35. La palabra más bonita

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Una vez que grabamos la canción con Miriam, ya está todo listo para el lanzamiento de Te presto mi voz... O casi todo, porque Mario y Lorenzo acaban convenciéndonos de que el mejor anuncio para el lanzamiento del disco es volver a lanzar Notas con videoclip incluido. Y, tras tanta insistencia, Amaia acaba consintiéndolo, con una condición: que yo también participe en él. Y tengo que reconocer que me encantó la experiencia. Grabar con ella siempre es increíble, pero esta vez tuvo un regusto único, especial, porque hablaba de nuestra historia más reciente.

El lanzamiento del videoclip tuvo el efecto esperado y, si ya había expectación tras algunas pistas que habían ido cayendo en redes por aquí y por allí, como la foto de Miriam en el estudio, el anuncio produjo una auténtica revolución. El vídeo superó varios millones de visitas en el primer día y, además, las críticas que recibimos eran todas excepcionales. Pero eso no era lo más importante. Lo más importante es lo orgullosos que estamos los dos con el resultado.

-Espero que seas consciente de que, aunque no podemos decir que te haya ido mal en ningún momento, la repercusión de este trabajo va a ser similar a la de 1016 –me recuerda Mario.

Pero mis ojos se van directamente a Amaia, que está sentada a mi lado, como siempre.

Ah, no, Mario. Va a ser mejor, porque todo en mi vida es más hermoso cuando Amaia forma parte de ello. Y espero que los fans sean capaces de ver eso como yo lo veo.

-Hoy nos ha llegado la portada del CD, ¿queréis verla? –nos pregunta Mario, pero no espera respuesta, como es evidente. ¿Acaso hace falta?

Nos acerca la carátula de un ejemplar, y no puedo evitar emocionarme. Casi a oscuras, se aprecia mi perfil mirando hacia el fondo, porque allí, en último plano, Amaia, de pie ante un micrófono, está iluminada por un foco que cae desde arriba. Pero este también deja la mayoría de sus rasgos a oscuras, creando un haz de luz a su alrededor precioso... Porque es ella. Desde el principio había sido ella la luz en la oscuridad. Luz que lo refleja y lo ilumina todo a su alrededor.

Se me llenan los ojos de lágrimas y Amaia se acerca a abrazarme.

Es perfecta.

Hoy no hace falta que hablemos de la fecha de lanzamiento. Esa ya está más que cerrada, aunque es otra cosa que tuve que pelear, porque para mí solo había una posible: el 6 de noviembre. Pero a todo el mundo le parecía que era demasiado tarde.

Que no... Que no... Es que no lo entendéis. Tiene que ser ese día, porque ese día hace un año.

Todos se me echaban encima, pero yo me mantenía firme. Amaia se limitaba a mirarme sin decir palabra, aunque yo sabía que ella intuía la importancia. Finalmente, pedí la Tablet.

"El 6 de noviembre decidiste que me prestarías tu voz", fue lo único que le escribí a Amaia.

Y ya no hubo más que hablar. Amaia sentenció: sería el 6 de noviembre. Y el videoclip, dos semanas antes.

-Llevabas razón, Alfred. No podía ser ningún otro día –me susurró aquella noche, cuando ya estábamos en la cama. Nos fundimos en un beso.

Sí, Amaia. Sí y mil dieciséis veces sí.

Y, en ese momento, no sé cómo ni por qué, algo hace clic en mi cabeza, y encuentro otra llave, una que llevaba esperando mucho tiempo... Al día siguiente, cuando lo compruebo con José Luis, no me lo puedo creer. No quepo en mí de la euforia que me recorre.

¿Crees que podré darle una sorpresa? Sería tan guay...

José Luis me devuelve una mirada convencida.

El camino a casaWhere stories live. Discover now