Ike y Zelda "Amor Prohibido"

Los Mercenarios de Greil

¡AVISO!

Hola, bueno no se como empezar con esto... la verdad es que tuve algunos problemitas personales los cuales me impidieron escribir durante las últimas semanas y debido a ello, se merecen una disculpa de mi parte por la ausencia, espero que lo comprendan y no se molesten tanto conmigo, lo siento mucho :"3

Por otro lado, esta historia está muy cerca del final, por lo que este penúltimo capítulo será un poco más largo de lo habitual, ojalá les guste ya que lo escribí con muchísimo cariño para ustedes <3 y le dediqué bastante tiempo para que quedara lo mejor posible.

El capítulo será narrado por más de un personaje, espero que lo disfruten mucho y no se aburran con la trama.

Como siempre muchas gracias por el apoyo que me dan en los comentarios y por mensaje privado, es lindo ver como a las personas les gusta lo que escribes ^w^
Un último favor, si les esta gustando la historia, haganmelo saber con sus votos, saben que estos me motivan a continuar escribiendo.
Dicho esto, ¡comenzemos!

Narra Zelda

Los últimos rayos del sol se ocultaron finalmente en el horizonte desdibujando el color azul celeste del cielo.
Recuerdos distantes de mi infancia invadían mi mente de manera abrumadora, momentos felices que ahora no eran más que un abismo de imágenes borrosas y espejismos difusos.

Una estrella fugaz cruzó la noche a medida que el barco avanzaba a través de la niebla.
Faltaba cada vez menos para llegar al continente de Tellius, la cuidad natal de Ike, en la cual nos refugiáriamos después del escape, sentí un escalofrío cuando el viento gélido de la noche acarició mi rostro.

Había llovido mucho durante los dos días anteriores y era alentador por fin sentir el calor.

Al girar la cabeza vi a Link hablando con Ike... ¿Cómo había sido posible que aquel mercenario estuviera de nuevo tan cerca de mí y a la vez tan lejos después de tanto tiempo?
Sonreí al evocar mi primer beso con él en el Tiempo del Tiempo hace ya dos años, enseguida intenté dejar ese recuerdo de lado y concentrarme en mi nueva vida siendo libre, sin embargo aquello me resultó imposible, jamás podría ser libre si continuaba atada al pasado.

Me sentía mal al haberle confesado a Link lo confundida que estaba respecto a Ike y a los sentimientos que creo seguir sintiendo por aquel mercenario.
En cuanto a Impa, le expliqué de mil formas distintas los motivos de mi escape y pese a eso, no logró comprenderlo, también le dije que no tenía idea de que Sheik era su hermano ya que ni siquiera lo conocí en vida y ella jamás mencionó su existencia.

Por otro lado, me dolía haber abandonado a mi padre en Altea, sabía que él no lo entendería pero no podría soportar una vida al lado de alguien a quien no amaba. Marth por muy guapo que estuviera, jamás iba a ser el amor de mi vida y de eso todos en el barco estaban completamente seguros.

La idea de volver a mi antigua vida se fue borrando lentamente mientras que mi sueño por alcanzar la felicidad se hizo cada vez más latente.

Unas lágrimas de melancolía invadieron mis ojos, no me iba a permitir llorar nunca más por amor pero sí Ike iba a estar a mi lado por los siguientes días, aquello me iba a resultar imposible, desde que volví a verlo, todo dio giro inesperado y odiaba que fuera así no quería sentirme vulnerable de nuevo y mucho menos enamorada. Desafortunadamente, ocultar mis sentimientos era aún más difícil que admitirlos.

El frío cada vez era más fuerte y Link se acercó con lentitud hacia mí.
Me dediqué un momento a verlo, era mi mejor amigo y reconozco que es bastante guapo, hubiera resultado mucho mejor para mí haberme enamorado de él que de Ike, mi corazón no se hubiera lastimado tanto y de aquella forma tan desgarradora, pero desafortunadamente no podía cambiar el pasado, solo que aún no sabía como vivir a pesar de él.