Ike y Zelda "Amor Prohibido"

Enfrentar el destino

Hola, he vuelto ¿me extrañaron? (Ok no) bienvenidos al capítulo final de esta historia para el cual me he inspirado más de lo habitual, amé escribir este fanfic y a la vez me puse a llorar de la mezcla de sentimientos que me he provocado yo solita capítulo tras capítulo.

Bueno en fin, ojalá disfruten de este capítulo y los invito a que vivan una montaña rusa de emociones porque de verdad siento que me inspiré de más y ustedes se merecen un buen cap después de la larga espera.

Una última cosa y solo para que no vaya a haber reclamos jiji, el capítulo tendrá dos partes ya que está algo largo, digo por si ven que les llegan dos notificaciones. Disfrútenlo mucho, ¡los quiero!

Narra Ike

Me reuní con mis compañeros en el comedor, el ambiente se sentía algo incómodo, en especial por Soren que no dejaba de quejarse en voz baja por absolutamente nada en particular.

Mist se encargaba de servir el desayuno mientras que Rhys y Gatrie preparaban las cosas que llevaríamos al bosque esa mañana, empacaban algunos arcos y varios carcajs con flechas. Pude ver como Link comenzaba a impacientarse por salir a cazar por todo Telluis y hacía un gran esfuerzo por contener su emoción.

En cuanto a mí, estaba ansioso por ver a la princesa y poder pasear con ella por todos los sitios de mi tierra natal, fui tan ovio que todos mis amigos lo notaron, en ese momento, ya no servía de nada ocultar mis sentimientos, la amaba y después de lo ocurrido, estaba feliz de ya no tener miedo de decirlo, menos aún sabiendo que contaba con el apoyo de la compañía.

Miré por la ventana, hacía un día excelente para la cacería, Titania ayudaba a Oscar y Boyd a colocar las monturas en los caballos que había en establo.

A los pocos minutos, la compañía se encontraba lista, esperábamos a Zelda y a Impa para desayunar cuando escuché un ruido en el piso de arriba. Shinnon y yo nos ofrecimos a subir a ver que ocurría, pues temimos que estuvieran teniendo otra discusión, al llegar a la habitación de Zelda, nos encontramos con una conmovedora escena.

Zelda o mejor dicho, Sheik, abrazaba dulcemente a Impa acariciando delicadamente sus blancos cabellos.
Me propuse a entrar pero Shinnon me lo impidió colocando su mano en mi hombro por lo que permanecimos detrás de la puerta, fue imposible no escuchar lo que decían.

—Sheik...¿de verdad estás aquí...? —Murmuraba Impa entre sollozos de felicidad.

—Así es impa—la preciosa voz de Zelda se había transformado en la de un atormentado joven sheikan reencontrándose con su hermana después de tanto tiempo. No me imaginé que aquella magia era tan poderosa como para transformar a una persona en una completamente diferente.

—¿Pero cómo fue que...?— cuestionó Impa pero sus palabras se perdieron en el aire.

—Una parte de mi espíritu sobrevivió— dijo Sheik -me escondí en aquel viejo libro de hechizos esperando que algún día, alguien me liberara para que pudiera reencontrarme contigo, a medida que pasaban los años, fui perdiendo la esperanza de volver pero un día, la princesa Zelda encontró el libro y pronunció el hechizo, no obstante, las cosas no salieron como esperaba en lugar de volver a mi forma humana, mi espíritu entró en el cuerpo de Zelda haciendo que ella adoptara mi forma, pero para mi mala suerte no fui capaz de controlar lo que pasó por lo que ella asustada deshizo el hechizo y yo volví al libro- explicó Sheik.

Impa escuchó atenta la historia de su hermano y se acercó a él para mirarlo con detenimiento, no se parecían mucho salvo por la energía de las facciones de sus rostros.

—Te he extrañado mucho sheik...—murmuró entre lágrimas la peliblanca.

—Y yo a ti Impa, siempre soñé con verte de nuevo... aunque sea por última vez— exclamó el rubio con melancolía.