Capítulo 12

990 49 12
                                    

-¿Mack? -preguntó una voz lejana-

-¿Mack? -preguntó nuevamente, pero esta vez la oí más cerca, entonces, la oí aún más cerca- ¡MACK!

Volteé bruscamente, las chicas me observaban extrañadas, Dani se acercó.

-¿Te encuentras bien? -preguntó preocupada-

-Si, ¿Por qué no lo estaría?

-Llevas una hora viendo el techo, o al menos la hora que llevamos despiertas -dijo Gia- Quién sabe cuánto tiempo llevas así.

Me levanté y pasé mis manos por mi cara.

-Lo siento, de verdad que me aislo cuando estoy pensando.

Con una sonrisa burlona Dani comenzó a preguntar.

-¿En que pensabas? O mejor dicho "quién" ¿No será que te transportaste al salón de clases? ¿Será que estabas pensando en un nombre que comienza con R? -me miró y subió y bajó las cejas repetidas veces-

-Seguirán insistiendo ¿Verdad? -pregunté resignada-

-Toda la vida -rió Gia-

La insistencia de ellas sobre Robert no me ayudaba para nada, de por sí ya invade mi mente sin mi permiso.
No le di más vueltas al asunto así que me levanté y bajé hasta la cocina dónde olía delicioso gracias a mamá.
Las chicas vinieron detrás de mí y al estar en la cocina aspiraron el aroma.

-Buenos días mamá, huele muy rico -me acerqué y le di un beso en la mejilla-

-Buenos días señora - dijeron mis amigas y sonrieron-

-Buenos días niñas, espero les guste el desayuno -sonrió y nos sirvió a todas-

Una vez en la mesa comenzamos a comer y hablar, mamá nos preguntaba que tanto ruido hacíamos anoche, a qué hora nos dormimos, nosotras simplemente respondíamos a sus preguntas soltando una que otra risilla.

En un momento las chicas se miraron pícaras y me miraron a mí, ahí entendí que querían hacer, yo reaccione a patear a las dos debajo de la mesa, terminé mi desayuno y me levanté a lavar los platos, las chicas terminaron rápido para seguirme a la cocina, al entrar soltaron las carcajadas mientras colocaban los plato en el fregadero.

-Mas les vale no hacer bromas al respecto frente a mi madre -gruñí- saben cómo es.

-Si, tranquila, no diremos nada frente a ella -dijo Dani secando lo que yo iba lavando-

-¿Qué les parece si vamos por un helado hoy? -preguntó Gia sentada en la encimera mientras se observaba los pies-

Dani y yo aceptamos, algo de azúcar nos hacía falta, después de limpiar lo del desayuno fuimos a mi habitación, sacamos la ropa que nos colocaríamos y nos fuimos duchando por turnos.

Estuvimos cantando durante la mañana, llegada la hora del almuerzo comimos rápido, recogimos mi habitación y salimos.
Por suerte había una heladería no muy lejos y era bastante buena, Dani pidió de vainilla, Gia de arequipe y yo de el clásico, simple pero delicioso chocolate.

Ya que la heladería tenía mesas y bancas en la parte de afuera, nos sentamos para degustar los deliciosos sabores mientras platicábamos, pero la tranquilidad no duró demasiado gracias a que llegó un espectacular Audi color negro, se estacionó y de el lado del copiloto bajó un chico alto de cabellos negros, ojos azules y piel con un ligero tono morenito, casi clara, estaba ligeramente hipnotizada por la presencia de ese chico hasta que del lado del piloto bajó él.

<Mierda>

No sé en qué momento ni como, me volteé quedando de espaldas al auto y a sus pasajeros.
Las chicas me miraron raro y me preguntaron que qué sucedía, no fue hasta que una voz profunda las saludó.

Tentemos A La Suerte |#1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora