La casa.

8- Confusión

Recuerdos de la noche vienen a mi a la vez que le doy un vistazo a la habitación completamente oscura.  Yo acepte pasar la noche aquí junto a este hombre que apenas conozco y que es un idiota.

-Te despiertas temprano.

Doy un brinco en mi lugar y ahí lo veo a un lado de la cama   ya con un traje negro puesto  , se veía elegante como la primera vez que lo vi.

Traía una taza en una mano y la otra la llevaba en su bolsillo de el pantalón mientras me veía fijamente a los ojos.

Me veo obligada a romper conexión. Era algo incómodo.

-¿Que horas son?  - salgo disparada de la cama y me mareo un poco.

-Cuidado y no te caigas. - habla aún desde su lado con una gran sonrisa.

Lo veo fulminante y me dispongo a arreglar mi cabello.

-¿Puedo ir al baño?

Se voltea y me ve unos segundos para entonces luego asentir  levemente con la cabeza.

¿Cual era su problema? Dios ¿Cual era mi problema?  Titania no puede saber sobre esto o iba a burlarse.  Termine en la cama de este tipo aunque no pasamos de el margen pero aún así estuvo mal , muy mal.

El era tan raro en las mañanas. Anoche fue totalmente diferente conmigo.

"No es seguro volver a tu habitación sola..."

Dios , tenía razón. A la media noche desperté gracias a unos ruidos de unos cristales romperse y luego una discusión entre unos hombres y mujeres.

"¿Y donde voy a dormir?"

Sonríe.

Si y ahí terminamos. Todo por mi estúpido miedo. Quizás solo lo hizo por molestarme.

Salgo de el baño luego de refrescarme y ahí me lo encuentro sentado en la cama poniéndose un reloj en la muñeca.

-Bueno , gracias...- frunso el ceño ante mis propias palabras. -Supongo. - me doy la vuelta , voy dispuesta a salir pero el me lo impide.

-Te acompaño. - me habla al oído y una fuerte corriente de electricidad corre todo mi cuerpo.

-No hace falta. - trato de salir pero el me lo impide.

-No seas niñita. - me hace voltear y quedo helada.   Estaba serio y la manera en que me ve  causaba que mis pelos se pongan de punta.

-¿Que sucede contigo?- despierto de mi trance y trato de zafarme de su agarre. Me tenía demasiado de muy bien agarrada , dolía mucho. -¡Suéltame! - mis ojos se cargan de lágrimas y ahí el parece caer.

Me suelta y se acerca a la puerta.

-Tu no perteneces aquí. - dice y frunso el ceño. -Tienes que irte , tienes una semana. - quedo atónita. ¿Una semana? Quiero irme , eso está mas que claro pero era muy poco tiempo ¿Donde iba a pasar la noche?

-No por favor , necesito más tiempo.

Me le acerco pero ahí el abre la puerta. Sale de la habitación y agarra a una chica que iba pasando. La acerca mucho a el y la besa.

Maldito cerdo. ¿Que demonios sucede con el?

-Imbécil. - susurro y comienzo a caminar fuera de allí.

¿Cual era su problema? Si cree que con esto me entregaré a el pues ahora mucho menos lo hago.  

Lo siento pero a  perdido ahora.

***

Me deshago de mis audífonos y salgo de la cama al escuchar un sonido en la puerta.

Me acerco y ahí doy un brinco en mi lugar. Eran las ocho de la noche ¿Quien me llama  a estás horas?

Quizás no es seguro que abra. Puede ser Harry o algún hombre ebrio.

-Señorita soy yo. Tengo un mensaje para usted. - frunso el ceño y rápidamente abro la puerta.

Era el grandullón.

Veo sus brazos y trae un enorme ramo con  las flores más hermosas que pueden existir. Rosas rojas y blancas.

Levanto una ceja y el sonríe.

-Tómelo señorita , es de parte de el señor. - me pasa el ramo y luego una enorme caja de chocolates Ferrero.  Son mis favoritos ¿Como lo sabe?

-Si...- suspiro. -Gracias. - sonrío y el hace un ademán con la cabeza para entonces luego retirarse.

Voy hasta mi cama y dejo todo sobre el colchón.   Me cruzo de brazos y luego de un rato me animo a leer una pequeña tarjeta en el ramo.

Espero que sean de su agrado señorita Ted. Debemos vernos , la veo en la mañana en mi habitación x. Styles

Sonrío y lanzo a la cama la tarjeta. Que hombre tan raro.