Capitulo 1

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Coramora, 05 de Septiembre del 2018

La última vez que Axel vio a Jane fue la noche antes de irse a Leosville para grabar lo que sería su primera canción y el inicio de toda su carrera musical. Desde ese entonces ha recorrido el mundo entero junto a sus mejores amigos buscándola; tocando en ciudades casi desconocidas y caminando por las calles solitarias de unas cuantas más, pero su búsqueda le ha costado ya nueve años y quién sabe cuántos años más.

Para Axel, Jane era la indicada, la chica que todo lo vale y por la que haría mil y un locuras; era la chica de sus canciones y de sus sueños, pero quizás le faltaba despertar un poco y darse cuenta de su realidad.

Kloss era la banda más famosa del momento, sus canciones han recorrido ciudades y han batidos records. Sus álbumes han ganado muchos premios; el más famoso y quizás el que más le duele a Axel, es el primero: Canciones para Jane.

Porque Jane era todo para él.

En cada historia de amor, hay una chica. En este caso, la chica todavía no la vuelto a ver, pero las esperanzas de Axel siempre están ahí; nunca se ha rendido a pesar de todas las veces que su familia, sus amigos y su manager le han pedido que pare, que Jane no regresará y que debe continuar con su vida.

Pero Axel llevaba dentro de él la sensación de que algún día la volvería a ver.

Y no estaba equivocado.

Iniciamos esta historia, con una firma de autógrafos. Más de quinientas personas habían llegado al centro comercial sólo para verlos; Axel, T,J, Gino y Griffin llevaban casi dos horas firmando discos, fotos y unas cuantas camisas de todos sus admiradores. Estaba más decir que se encontraban cansados, pero quizás Axel necesitaría recobrar sus energías para lo que le vendría luego.

—Sólo una ronda más de fans y ya estamos listos—comentó T.J soltando su bolígrafo en la mesa—. Me duele el trasero de estar tantas horas sentado aquí; estas sillas son demasiado incómodas—se movió un poco de su asiento.

—Ja, por eso es que yo me traje mi bello cojín—comentó Griffin con una sonrisa segura—, pero como nadie escucha al bueno y listo Griffin, deberán aguantarse sus calambres en el trasero una media hora más.

—Cállense que ahí viene unos fans—habló Gino y le sonrió a los dos chicos que se acercaban.

Griffin se acomodó la chaqueta y se levantó a saludar a ambos chicos con un abrazo; era algo común y propio de él, los fans decían siempre que era el Kloss más tierno y entregado con sus fans. Una chica quién llevaba un cd para que se lo firmaran, saludó a los cuatro y le pidió a Axel un autógrafo extra para un afiche que tenía de él.

Mientras Axel firmaba, un chico y una chica se acercaron también. Griffin volvió a levantarse para darle un abrazo a cada uno y se sentó a esperar a que ellos llegaran a él y les firmara.

La chica se acercó a Gino, quién estaba de primero en la mesa y luego saludó a Axel que estaba terminando de firmar el afiche del fan anterior. Axel mantuvo la mirada baja revisando un momento su bolígrafo, cuando ella colocó el disco de Sonata de Euforia a su vista, haciendo que él la levantara y la mirara.

Sintió cómo si todo se detuviera por un momento, su ritmo cardíaco se aceleró y creyó que estaba soñando. La chica lo miró con duda al notar que él permaneció callado observándola y su rostro se puso pálido como si acabase de ver un fantasma.

Un fantasma del pasado.

— ¿Te encuentras bien? —le preguntó ella esta vez un tanto asustada por el estado en el que él se encontraba.

La chica que conoció #KlossWhere stories live. Discover now