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Apenas salió del aeropuerto comenzó a buscar con desesperación a Momo , se sentía temeroso en un país desconocido sin manejar bien el idioma. Su amiga le había avisado con anticipación que se retrasaría un poco debido a una sesión fotográfica que tenía aquel día por lo cual le pidió que esperara por unos minutos.

Seokjin observaba una y otra vez su reloj de mano para verificar la hora que según él pasaba lentamente haciendo así una espera eterna. Se paseaba de un lado a otro sintiéndose observado por algunas chicas que pasaban a su lado arrastrando su equipaje pero no sólo se trataba de chicas sino que también uno que otro chico lo miró con detención con claros signos de coquetería los cuales causaron un evidente sonrojo en su rostro.

Estas pequeñas muestras de atención le ayudaban a subir un poquito su autoestima que debido a los últimos acontecimientos se encontraba por los suelos. El hecho de pensar que Jungkook lo había dejado para ir detrás de otros chicos más jóvenes y guapos le afectaba en la visión que tenía de si mismo. Sentía que quizás era muy poco para Jungkook por eso había decidido cambiarlo de un momento a otro.

De pronto sus ojos fueron apenas cubiertos por dos finas manos que con esfuerzo intentaban cubrir su visión.

— Adivina quien soy Jinnie bebé — Dijo la alegre chica japonesa.

— Sólo hay una persona en el mundo que me llamaría con ese apodo.

Jin se dio la vuelta para abrazar con cariño a su amiga la cual no veía desde que la chica había abandonado Corea para regresar a su país natal. Momo siempre se ha caracterizado por ser una chica alegre y tierna de esta cualidad radica el apodo cariñoso que le otorgó a Seokjin debido a su actitud algo infantil.

—Perdón por hacerte esperar más de lo acordado pero la sesión de fotos me ha tomado más tiempo del que tenía presupuestado. El director de arte era un ser realmente insoportable por lo cual tuve que cambiar mi ropa demasiadas veces lo que provocó mi atraso — Se disculpó con pesar.

Seokjin le regalo una sonrisa dando a entender que todo estaba bien. Momo al ver la actitud relajada del rubio pudo liberar la tensión sostenida producto de la preocupación que tenía al pensar que Jin se perdería en el aeropuerto.

Juntos caminaron hasta el auto de Momo el cual no estaba muy lejos de donde se encontraban. El clima era frío por lo cual apenas estuvieron dentro del auto sintieron que estaban un poco protegidos del frío abrumador del exterior.

—¿Por cuánto tiempo vienes Jinnie? — Preguntó la chica mientras ponía en marcha el vehículo.

—Tengo pensado quedarme un mes, creo que es un tiempo adecuado para sanar un poco mi corazón. Sé que los recuerdos no se borrarán en cuatro semanas pero sé que estar lejos de Jungkook me ayudará a no extrañarlo tanto, pero a pesar de todo ya estoy un poco mejor.

Momo quiso decir muchas cosas pero sabía que si las palabras directas salían de su boca en ese momento no ayudarían de mucho a su cabizbajo amigo que se encontraba en el asiento del copiloto. Podía observar claramente en la mirada melancólica de su amigo que las cosas que sucedieron con Jungkook le habían afectado más de lo que demostraba. Lo conocía muy bien como para darse cuenta que aquel chico siempre fingía estar bien para no molestar al resto y era justo lo que estaba haciendo en ese momento bajándole el perfil a la situación para no causar preocupación.

—Pero no vine aquí sólo a hablar de mi, cuéntame como has estado — Lanzó Jin con tal de cambiar de tema rápidamente.

—Me ha ido bien en esto del modelaje, he viajado mucho estos últimos meses. Pero debo reconocer que en ningún lugar de los que he estado he conocido tan buenos amigos como tú y Ken. Aún recuerdo nuestras noches de fiesta en las cuales perdíamos la cabeza con tanto Soju que bebíamos — Rió recordando una que otra anécdota vivida en el país vecino — Por temas de trabajo ahora vivo en un departamento que comparto con un amigo que conocerás pronto. Decidí vivir con él para evitar los departamentos compartidos con otras modelos que nos da la agencia, es un verdadero caos vivir con esas chicas.

Destinados - SujinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora