Doble Vida

61 5 0
                                    

Jassie:

Mi amigo me había ayudado tanto como me había hecho enojar al principio.

Amaba estar con él y con mi papá en la reserva. Sin embargo, algunos de los "Aspirantes" a ser nuevos en la manada me causaban furia. Decían que era un poco rara, pero eso no me molestaba; si se metían conmigo les lanzaba una bola de agua, fuego, tierra o en otro caso una ráfaga de viento. No podían hacerme nada, pues sabían que los dejaría en ridículo en la próxima clase.

No habíamos visto a ningún neófito por aquí, pero de vez en cuando se sentía su olor. En cierto modo fue un regalo para mí ser un licántropo. Ellos no lo sabían y era mi forma de protegerme.

Ésa mañana que mi papá me prometió se cumplió. Recuerdo que la pasé genial mientras que estudiaba. No podía pedir algo mejor...

Corría, usaba mi don y me desahogaba cuando sentía alguna emoción fuerte. Mis emociones variaban casi todos los días y la verdad me sentía bien cada vez que las descargaba con algún elemento. 

Mis padres, estaban conmigo. Mamá me contó sobre su experiencia en Forks y casi siempre que podíamos salíamos de cacería. Con papá me la pasaba entre risas, bromas y entrenamientos de mis dones licantrópicos. 

Esa mañana me tocó ir de nuevo a Forks. No la extrañaba para nada, pero debía hacer mi mayor esfuerzo. 

—Hola de nuevo. El guión que escribiste es bueno...

—Hola, que bueno que te haya gustado — era uno de mis compañeros de equipo y en ocasiones era bastante pesado. 

—Pero, me gustaría que hubiera una escena de romance. 

—Se la puedes añadir, tranquilamente... Depende si se adapta al personaje y  si me disculpas llegó una de mis amigas. 

—Está bien... — había hecho dos amigas en todo lo que llevaba allí. Ninguna de las dos sabía o si quiera tenía sospecha de mi naturaleza colmilluda y peluda. 

Ambas estaban completamente locas y la verdad amaba que esa locura estuviera presente. 

—¿Otra ves Jordan?

—Es un pesado.

—No te preocupes se cansará

—En algún momento. 

—¡Oigan no ayudan! 

—Cambiando de tema. Faltaste ayer dinos tu razón perfecta para faltar 

—Tenía cosas que hacer. — ambas eran insistentes en preguntas pero las callaba pronto. En ocasiones las clases se me hacían eternas y era allí donde me ponía a jugar con mi manos. 

Hacía pequeñas maniobras con los elementos. No podía correr en cuatro patas pero al menos podía disfrutar un poco de mi don. En los exámenes siempre obtenía calificaciones altas y eso me posicionaba entre el círculo de los normales; aunque de forma literal no lo fuera. 

Aunque pareciera sencillo tener esta vida no lo es. Mamá fue por mi. Muchos de los profesores que quedaban allí la saludaron y eso a mi no me importaba; tenía mayores cosas de las que ocuparme.

—¿Entonces me dejarás colocar la parte de romance?

—No, sé entre cuales personajes la quieres colocar y no dejaré eso. — me coloqué al lado de mi mamá y le dije en un tono solo audible para lo sobrenatural que quería irme. Ella en respuesta me colocó su mano en mi mejilla y me dijo que en unos minutos ambas estaríamos corriendo y riendo por el bosque. 

Sonreí al ver las imágenes que ella se imaginaba. Así fue lo que lo hicimos. 

—¿Quién es ese chico?

—Es de la obra. Es un pesado...

—Creo que le gustas, nena

—¿Qué mamá? No lo creo. ¿Cómo se va a enamorar de una doble vida?

—Aunque tu no lo creas, también soy una doble vida. Y tuve varios pretendientes pero al final siempre fue tu papá. 

—Es que él a mi no me gusta... Y además quiere añadir romance en una obra de teatro que no lo requiere. 

—Preciosa, tienes que darle a tu corazón una oportunidad de abrirse. Es más pronto cumplirás los 15 puedes invitarlo a tu fiesta. 

—Tendré que pensarlo... — mi mamá tenía razón en algo. Debía abrir mi corazón, ya era tiempo. 

Le dije que hiciéramos una carrera y ella aceptó, algo que yo había heredado de ambos padres. Era muy competitiva. Era más rápida y por ende le gané; aunque tuve que ponerme en cuatro patas. 

Al llegar a la entrada de la casa mi papá nos recibió. Me acarició el pelaje y me dio un pequeño beso en él. 

—Creo que nunca te dijimos que yo nada más tengo el derecho de ganarle a tu madre en una carrera con esa forma. 

Me molestaba que me desafiaran y justo fue allí cuando decidí que era tiempo de un enfrentamiento loba a lobo. Comencé a gruñir y a reclamarle que quería una carrera para demostrar lo rápida que podía hacer. 

—¿Quieres una guerra pequeña loba? — yo solo podía mirarle a los ojos y dar pequeños toques con mi pata derecha en su brazo. Cuando volteó a verme le puse mala cara. — Bien... Tendrás guerra... 

Se colocó de pie y en poco segundos volvió en su forma lobuna. 

Ahora si pequeña tendrás la revancha.

Mamá es mía. Estaba con ella antes de que llegaras.

¿Quieres apostar?

Te ganaré, soy más rápida que todos...

Comenzamos a correr sin parar. Yo llevaba la delantera hasta que me repasó por el lago. No me iba a dejar ganar tan fácil así que le eché más ganas y luego solté un pequeño aullido al cual la manada contestó. 

Eso distrajo un poco al alfa de la manada y me dejó ganar... 

Gané.

Hiciste trampa, preciosa...

No, tu la hiciste. La verdad que fue la manada quien respondió a tu aullido.

Fue tu aullido.

No lo fue...  

Dije soltando para mi interior unas cuantas carcajadas. 

Te amo, papá. Pero tengo que agradecerte que me impartieras junto con mamá el ser tan competitiva

No fue solo fue tu papá. Enana. 

¿De dónde saliste?

Aullaste... 

No, fue papá. 

Conozco tu aullido. 

—Creo que si vamos hacer una carrera, necesito que uno de mis tres lobos se transforme en humana-vampiresa para que sea más justo.

Fui detrás de un árbol, me coloqué mi ropa y salí en la forma en que mi mamá me dijo. 

—Será una carrera justa. — le dije sonriendo. 

Cuando la magia fluía era perfecto, pero luego ese momento se acabó cuando Alec apareció en la copa de uno de los árboles, y me miraba nada más que a mi. 

Me asusté tanto que me coloqué detrás de mis padres y de Sebbas. La única forma de protegerme a mi misma era transformándome; era tener que llevar una doble vida.

... 

--------------------------------

Holis chicos, se que me he tardado un poco, pero les suplico me perdonen pues he estado muy ocupada con mis estudios y la verdad aquí en mi país las cosas no están muy buenas que digamos.

Trataré de actualizar más seguido.

Los quiero
Besos
😘😘😘😘
Atte.
Su escritora

Hielo/FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora