Hielo/Fuego

Alianzas

ATENCIÓN:

Capítulo con contenido +18

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Alec:

Los días pasaban rápido y en menos de lo que me di cuenta ya había pasado un mes desde que Jane y yo nos propusimos en encontrar nuevos candidatos para nuestro ejército. Teníamos a muchos de Volterra, pero nos hacía falta algo. 

Podíamos sentir que algo había pasado y debíamos aprovecharlo. Varios de los nuevos Neófitos en cuestión de días desarrollaron dones con poderes increíbles. Algunos de ellos eran casi comunes; otros eran de gran provecho para la lucha. 

Teníamos una especie de guardia. Los sobrevivientes más antiguos eran nuestras manos derechas y mandaban sobre los demás. Pronto fueron 50 y tanto mi hermana como yo no podíamos estar más satisfechos. 

Los entrenábamos diario. Algunos (los más ágiles) los mandábamos por todo el mundo a reclutar más, pero en ocasiones preferíamos hacerlo nosotros. Planeamos un pequeño por todo lo que es América. Ella iría al Sur y yo al Norte... 

—Te toca de nuevo ir a la zona de esa abominación... Si te ocurre lo que sea estaré cerca... — me dijo ella antes de separarnos. 

—No te preocupes, sé que debo hacer. Cuídate hermanita... — fue nuestra despedida antes de partir cada uno a su destino. Fue hace una semana que llegué a Forks y no noté nada extraño, salvo que el olor de esa maldita había desaparecido. 

La busqué por todo el bosque, los perros de su padre me persiguieron hasta la frontera con Alaska. Mientras corría podía sentirme cada vez más débil... Sentía un enorme vacío en mi pecho que me debilitaba a cada segundo, pero una vez que entré en Alaska se me quitó. 

Podía sentir su olor por todas partes y eso casi me mata... Seguí con mi rumbo y mientras más me acercaba me iba acostumbrando a su olor. 

En casi dos días llegué a un pequeño pueblo de asqueros perros. Me mantuve alejado por unas horas en lo más profundo del bosque. Podía sentir su olor... Todo el lugar olía a esa loba blanca. 

Poco después escuché como alguien gritaba... 

—¡La odio! ¡Maldita Jassie Black! ¡Maldita Zorra! ¡Esto no te lo voy a permitir! — escuchar su nombre fue la gota que derramó al vaso. 

—Perdona que me meta, pero creí escuchar que dijiste que odias a Jassie Black. — le dije a la loba que estaba en frente de mí totalmente histérica.

—¡Aléjate de mí, maldito chupasangre! ¡No te tengo miedo! — me gritó ella. 

—Eso lo puedo notar querida... pero quizás yo te pueda ayudar con el problema que tienes. Soy un conocido amigo de ella. 

—¿Tú? ¿Ayudarme? Sé que lo que quieres en verdad y no te dejaré...

—¿Ah Sí? Pensé que querías acabar con esa Maldita Loba Blanca. — cuando dije esas dos palabras ella supo a qué me refería. — ¿Crees que no conozco su asqueroso secreto? Ella es la culpable de que perdiera el brazo. ¿Qué te hizo a ti?

—Me robó lo que más amo. Mi novio y yo éramos las personas más felices, teníamos planes para un futuro, pero tuvo que nacer ella para robármelo... La odio... 

—Mi hermana y yo tenemos un ejército que puede acabar con ella. Necesitamos algunos miembros más, es una abominación y su familia debe morir por haber asesinado a todo mi clan. 

—Solo quiero que ella muera para ya poder recuperar a mi novio. 

—Tenemos planeado matarla antes de que pueda llegar a casarse con ese maldito lobo

—Entonces tenemos que hacerlo rápido... Mí Sebbastian ya le pidió matrimonio. — me dijo ella sonriendo con malicia. Ella era la indicada para esta batalla desde un principio. Su odio por esa loba blanca era perfecto, sumamente grande...

—Bienvenida al equipo...

—Soy Silvana... Mi manada está a su disposición... Solo digan cuando y como. 

—Mantente en contacto, Silvana... — me fui después de guiñarle un ojo. Ella nunca dejó esa sonrisa macabra que la hacía tan hermosa... 

—¿En serio te irás? — me preguntó ella. Me di la vuelta y cuando la vi ya no tenía su camiseta, en cambio tenía un precioso sujetador de encaje negro, sus pechos se veían grandes y completamente apetecibles... 

Me detuve por un segundo y luego la estampé contra un árbol... Fue allí que confirmé mis sospechas... Sus pechos eran perfectos y se veían completamente apetecibles; pero era más que obvio que lucirían mejor sin ese sujetador. 

—¿En serio lo quieres loba? — le pregunté mientras atacaba su cuello a punta de besos... Ella parecía estar cómoda en esa posición, tanto que subió sus piernas a mi cadera...

—Muy segura... — dijo ella entre gemidos. — solo fóllame...

Fueron las palabras que me terminaron de encender. Ataqué su cuello sin piedad y fue bajando mis besos hasta sus grandes pechos, primero los besé por encima del sujetador y luego se lo arranqué...

Efectivamente sus pechos eran unos de los más grandes y bonitos que había visto, así que los devoré en menos de dos segundos... La tenía comiendo de la palma de mi mano... Sus gemidos eran música para mis oídos y eso hizo que la deseara más y más...

Bajé la cremallera de sus shorts y pude sentir que estaba completamente húmeda...

—¿Ya te habían tocado antes nena? — ella  me respondió con un gemido mientras yo introducía mis dedos en su intimidad — ¿Quieres que lo haga más rápido lobita?

—Más rápido... — dijo ella jadeante... Lo hice un par de veces más y paré para poder bajarme la cremallera y metérsela tan duro que esa lobita no podrá ni caminar nada después de esto. 

Ella estaba contra un árbol jadeando y gritando de placer, mientras yo se la metía cada vez y más duro... 

—Dime que nadie te ha hecho sentir así... — ella pronto terminó y me llevó consigo. 

Unos instantes después ella comenzó a vestirse. Cuando ella terminó le di un pequeño beso y me di media vuelta.

—¿Te mantendrás en contacto, príncipe?

—Sí, además recuerda que tenemos que destruir a esa maldita loba blanca. — ahora sí me fui después de haber ganado una poderosa aliada. 

Esa Loba era perfecta para el plan que tenía para destruir a los Cullen y a esa Loba Blanca... Además no había pasado un mal rato sino todo lo contrario, aunque tuve que soportar siempre el olor a perro mojado, pero me importó un comino en cuanto me di cuenta que ella estaba más que dispuesta a matar a nuestra enemiga. 

Creo que esto nunca lo vas a ver venir Loba Blanca. 

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Holaaa...

Bueno aquí les traigo un capítulo que me sorprendió escribir y pienso que les va a gustar...

Éste es su regalo antes de navidad. Quiero que sepan que les tengo regalos no me he olvidado de ustedes...

Los adoro ❤️❤️❤️