I Want You [Hyunin] EN EDICIÓN

[22]

[Jeongin]

Desperté con un gran dolor de cabeza, pero un gran alivio.

Al parecer estoy en una sala de hospital. Estaba acostado en una camilla, con una bata de color celeste y un par de sueros en mis brazos. Enfrente mío había una televisión y en una pequeña mesa mi celular. ¿Cuánto tiempo estuve en este lugar?

Agarré mi celular y vi la hora, son las 13:50 y hoy es 8 de febrero. ¡Mi cumpleaños! Hoy por fin cumplo 18 años, pero mi idea no era pasarla en un hospital. Vi un par de mensajes que me mandaron, ninguno de mi mamá, algunos de Yunhyeong, Felix, Chan y Minho. Y alrededor de cien mensajes de Hyunjin pidiéndome perdón, bloquee mi celular y traté de levantarme, pero un dolor en mi estómago me lo impidió.

– Oh, Yang, despertaste por fin.– Un hombre abrió la puerta con una planilla en manos– ¿Cómo te sientes?

– ¿Bien?– No sabía cómo tendría que sentirme.– ¿Qué me pasó?

– Pequeño...– Ese "apodo" me hizo acordar a Hyunjin, y me puse algo triste ya que me lleve una gran decepción.– estuviste en coma durante tres semanas.

¿En coma? ¿Por un simple disparo? Lo único que recuerdo es que me secuestraron, me dispararon y desperté en este lugar. Todo por culpa de Hwang Hyunjin.

– ¿Y cuándo puedo irme?– Pregunté, ya que no pensaba pasar mi cumpleaños en este lugar. Por lo menos lo pasaría solo, con mi perro... ¡¿Quién alimentó a mi perro en estas tres semanas?!

– Hoy mismo, es tu cumpleaños, ¿verdad?– Asentí con la cabeza– Feliz cumpleaños, pequeño. Ya que eres mayor de edad, no necesito que el señor Hwang autorice el alta.

– Gracias, señor Choi.– Respondí al ver el nombre "Choi Ji Ann" en la placa.

– Puedes tomar tus cosas, pequeño e irte ya mismo, ten un lindo día. No olvides curar tu herida, cuídate.– Después de decir eso, salió de la habitación.

Procedí a levantarme con cuidado y agarrar mi ropa, la cual estaba en el pequeño sofá al lado de la puerta. ¿Quién habrá venido a verme? Estoy seguro que mi primo y mi mejor amigo.

Me puse un buzo blanco, un jardinero de jean largo, medias blancas y unas zapatillas Vans negras.

Salí de la habitación y crucé el largo pasillo del hospital hasta llegar a la salida, donde choqué con alguien.

– Pequeño...– Quedó sorprendido por mi repentina aparición, al igual que yo por la suya–...despertaste por fin.– Se lanzó hacia mí, dándome un abrazo, traté de apartarlo pero sentí que una cola golpeaba mi pierna.

– ¡Jinjin!– Aparté a Hyunjin y me arrodillé para acariciar y abrazar a mi perro.– ¿Quién te dió de comer todas estas semanas que no estuve?– Levantó su mirada como si me entendiera e hice lo mismo.

– Al parecer sabe quién lo cuidó– Sonrió y lo acarició.

– Gracias, no era necesario– Agarré la correa de mi perro y me fui, pero Hyunjin me tomó la mano.

– Feliz cumpleaños, bebé– Me agarró las mejillas y me besó, pero lo aparté rápidamente.

– No quiero verte.

Pedí un taxi y fui a mi casa, tal vez sería un día mejor si la paso solo en mi cumpleaños y no con personas falsas.