Capitulo 41.-

926 114 53
                                    

Lance no había querido volver al pequeño departamento que compartía con el azabache hasta que consiguiesen el anillo de Keith. Porque si, el muy tonto había comprado el de Lance, pero no el suyo

Lance no estaba seguro de si en verdad lo había olvidado o si solamente no estaba seguro de que Lance aceptase su propuesta y no quisiese cargar con ese recuerdo

O quizá sólo lo había olvidado

Porque no había forma de que Keith llegase siquiera a pensar que Lance no aceptara su propuesta. Es decir, si, son jóvenes... a decir verdad, Lance ya no está seguro de su edad. El tiempo en el espacio siempre está variando. No sabe ni siquiera cuántos de sus cumpleaños se ha perdido porque obviamente tampoco sabe cuándo es su cumpleaños en los calendarios alteanos. Pero Lance calcula que ronda entre los 20 y 21 años. Eso significaría que Keith tendría... ¿qué? 22. Pero con su viaje accidental entre dimensiones, tendría 24...

El cubano sacude la cabeza, molesto con el rumbo que han tomado sus ideas. Ahora mismo, nada de eso importa. No la guerra. No Lotor. Su boda. Su boda es lo que importa

Y es que sabe que no se casarán pronto. Sabe que no sería justo de su parte hacerlo sin su familia presente. Dios, tenía tantas ganas de presentarle a Keith a su familia. Casi puede imaginar la sonrisa de su hermana Veronica, el gesto burlón de Rachel. Quizá las bromas sobre el mullet de Keith por parte de sus hermanos Marco y Luis. Ohh, y sus sobrinos. Sus sobrinos amarían a Keith. Su madre se daría cuenta inmediatamente de que es el amor de la vida de Lance, y su padre podría un rostro sereno y aplastaría la mano de Keith un poco más fuerte de lo necesario cuando se las estrechasen.

Y llevaría a Hunk a comprar el traje con el que se casaría, porque seguramente Keith llevaría a Shiro. Podrían embutir a Pidge en un vestido y hacerla madrina de algo. O a Allura, o Coran, podría incluso hacer que Noah fuese padrino de algo también

Suspira, feliz con sus pensamientos. Su corazón no ha dejado de estremecerse y saltar dentro de su pecho desde que vio a Keith de rodillas frente a él. 

Oh, eso sonó muy mal 

Aunque, ¿por qué no decirlo? Lance está deseando terminar de comprar el anillo de su ahora prometido para correr a desvestirle dentro de la comodidad de su departamento. Es decir, puede ser que Lance McClain sea la definición de romanticismo, pero también es humano, demonios. Tiene necesidades fisiológicas.

Se ríe por lo bajini ante el rumbo torpe de sus pensamientos. Keith voltea a verlo con una expresión curiosa en el rostro antes de sonreír y darle un suave apretón en sus manos entrelazadas.

...

Después de conseguir el anillo de Keith y de empezar a dirigirse hacía su departamento, riendo y jugando con el vaho que emana de sus bocas, una pequeña nevada empieza a abrirse paso entre los vientos gélidos de Lotus, pero es tan suave que cada copo parece una pequeña caricia en los rasgos afilados de ambos chicos

Keith mira la nieve con algo parecido a la tristeza

-¿Pasa algo, cariño?- El cubano se detiene en cuanto nota el cambio en su prometido, decidido a descubrir la causa 

El azabache lo mira de reojo, y después de guardar silencio unos momentos, sonríe resignado, jalando de Lance hacia si, obligandolo a seguir caminando

-Te lo contaré mientras caminamos. Empieza a nevar más fuerte- le dice

Así que Lance sigue a su prometido. Caminando a su lado, expectante 

Keith parece haber olvidado que debía contarle algo a Lance, y cuando este cree que ya no hablará, es cuando lo hace

-Hace mucho tiempo tuve un amigo. Se llamaba Jules- empieza

Y Lance ladea la cabeza ¿Jules? ¿Quién es Jules? ¿De qué se tratará esta historia? ¿Será triste o emotiva? ¿Y si Jules fue su primer amor?

-Murió cuando era un niño

Oh

-No lo conocí mucho tiempo. En verdad. Pero era mi primer amigo. Murió mientras patinaba sobre hielo. La nieve siempre me recuerda a él

-Keith...

-Unos meses después fue cuando murió mi padre. En un incendio, que irónico, ¿no es cierto?, hielo y fuego 

Lance sostiene la mano de su prometido con dulzura. Es lo único que puede hacer

Pero Keith, para su sorpresa, sólo sonríe 

-Es sólo que pensaba que la nieve no me recordará nunca más a Jules. Ahora solamente podré recordar esta noche, la forma en que sonríes y cómo se refleja la luz sobre tu rostro. La forma en que respiras y tus escalofríos cuando te golpea una ráfaga de aire especialmente frío. Y me siento un poco mal por Jules, porque no merece que deje de pensar en él... pero quiero hacerlo. Quiero que la nieve siempre me recuerde a ti. A ti, sólo a ti

El cubano sonríe y se pregunta cómo es que Keith pueda despertar cosas tan cálidas en su interior aún cuando su exterior está helándose 

-Pero... tu padre...- balbucea 

Keith niega, sin dejar de sonreír

-Mi padre murió haciendo lo que tenía que hacer, y lo que amaba hacer. Salvando vidas. Lo dejé ir hace mucho tiempo... si lo hubieses conocido, lo hubieses amado. Todos lo amaban 

El paladín azul sonríe y asiente 

-Si se parece tan solo un poco a su hijo, aunque fuese en carácter, seguro lo hubiese hecho

Y Keith se ríe 

El resto del camino lo transcurren en un silencio cómodo

Pero cuando llegan a su puerta, Lance simplemente se lanza sobre su prometido 

Las llaves repiquetean contra el piso durante un momento después de que Keith las dejase caer de la impresión de tener el cuerpo de Lance presionado contra el suyo. 

No tarda en corresponder. Sus bocas se abren paso la una sobre la otra. Vaho escapando de ellas con cada bocanada que se permiten dar entre beso y beso. Las manos de ambos están por todos lados. 

Lance se obliga a tranquilizarse por un momento

-¿No crees que esto podría ser más cómodo dentro?- le susurra a su prometido directamente al oído, saboreando cada sílaba y el efecto que causan sobre él

No tuvo que repetírselo dos veces.















...

Ahora desaparecí más tiempo xd lo siento 

-VFOMPEROSA 

Por siempre y para siempre (Klance) Secuela La distancia de un beso no dadoWhere stories live. Discover now