Destinados

Prácticas

Hoy era el día, el día en el que los estudiantes de primer año de la UA irían a hacer sus prácticas de héroes por una semana entera.

Mientras unos ya estaban listos y cambiados, un lindo pecoso estaba profundamente dormido, normalmente él sería de los que ya están despiertos y listos para irse pero últimamente dormía como ángel por una extraña cosa... La camisa de Shigaraki, cada vez que no podía dormir inconsciente tomaba la camisa de Shigaraki para dormir como un bebé, ahora era una costumbre dormir abrazándola.  

El sonido de su alarma no dejaba de sonar y los gritos de su madre tampoco, él solo dormía plácidamente en su cama sin importarle nada,  esos molestos sonidos no le afectaban nada, oh si también esos ¡Deku! ¡Shine! No le importaban... ¿Shine? ¿Deku?

La puerta de la habitación de  Midoriya fue abierta con brusquedad con una patada dejando ver a un Bakugo molesto.

- ¡Mueve tu trasero de una buena vez nerd de mierda! - gritó Bakugo para después cerrar la puerta con la misma fuerza que con la que abrió.

Midoriya estaba sorprendido ¿Qué hacía él en su casa?. Miró la hora y se levantó rápido de su cama, su maleta ya estaba echa solo tomó un baño de cinco minutos y se cambió para salir directo a la sala.

- ¡Oh! Izuku buenos días - dijo su madre tendiéndole un pequeño bento. - Ya es tarde para desayunar así que cómelo en el camino ¿Ok?

Izuku asintió tomando el bento para después mirar a su alrededor ¿Era su imaginación haber escuchado a Kacchan? Pero no, no lo era. En el sillón se encontraba Mitsuki y Katsuki, la primera sonriendo saludándole y el segundo mirando para otro lado enfadado.

- Buenos días - saludó Izuku a los dos visitantes dando una pequeña reverencia.

- Buenos días Izuku, espero que mi hijo te haya despertado apropiadamente y si no lo hizo tan solo dime, lo corregiré con gusto.

- S-si me despertó bien - dijo Izuku con nerviosismo, no le iba a decir que llegó dando una patada a la puerta gritándole...  Aunque admite  algo... Fue amable para ser él, esperaba mas como una patada en la cara o que lo tumbara de la cama.

Un golpe se escuchó en la sala, Mitsuki había golpeado a Katsuki en la cabeza.

- ¡¿Porqué me pegas?! ¡Bruja!

- ¡Cuidado de como me hablas! ¡Desde aquí se escucharon tus gritos! ¡Debiste despertar a Izuku con cuidado!

- ¡¿Huh?! ¡¿Porqué debería?! ¡Vamos tarde! - terminó de decir lo último saliendo de ahí.

- Lo siento Izuku, después hablaré con él. A decir verdad tengo cosas que hacer en otro lado, es por eso que decidí venir por ti, los dejaré en el metro,  entonces ¿Nos vamos?.

- ¡Muchas gracias! - respondió Midoriya dándole una gran reverencia.

- No te preocupes, sabes que eres como mi segundo hijo - dijo Mitsuki mientras le acariciaba el cabello despeinándolo aun mas. - ¡Nos vemos Inko!

- ¡Si! ¡Gracias por llevar a Izuku!, Izuku ve con cuidado ¿Ok?, ¡Estaré velando por tu seguridad!

- Te preocupas demasiados mamá...  No te preocupes estaré bien, ¡Además estaré bajo el cuidado de un profesional! Entonces, ¡Nos vemos!

Durante el trayecto Mitsuki hablaba con Izuku animadamente  mientras tanto... Katsuki solo bufaba molesto mirando hacia otro lado. Una vez llegado a su destino Mitsuki  se despidió con un abrazo y un beso en la frente de Izuku dejándolo rojo de la vergüenza y a Katsuki solo le dio una suave palmada en su espalda provocando una molestia por parte de este al casi caerse del impacto.