Un Alocado Amor

★彡[ Capítulo 2 ]彡★

Luna de Miel

La fiesta continuo hasta altas horas de la noche, Kiri estaba en la mesa de regalos eran muchísimos, se preguntaba que clase de obsequios les habrán dado.

— Que te parece si tomamos algunos y nos escapamos con ellos a nuestra habitación, en el hotel — dijo Katsuki abrazando su cintura.

— Me parece buena idea — Eiji sonrió, estaba muy feliz.

Entre ambos tomaron varios obsequios y corrieron como si de fugitivos se trataran, llegaron entre risas a la habitación matrimonial que la familia de Bakugou había preparado para ellos, fue su regalo de bodas.

Eiji recordaba las palabras de su suegra, "Quiero nietos pronto", pero no era seguro que pudiera tener.

Los estudios que te realizó cada tercer mes no daban esperanza alguna, Baku le dijo que no importaba que él lo amaba así, pudiera o no tener hijos.

Kirishima se sentía mal trataba de sonreír, pero no podía hacer nada.

— Venga abramos los regalos — dijo animado Bakugou sacando de sus recuerdos tristes al pelirrojo.

— Bien — tomo uno y lo abrió sin ver de quien era.

Era un álbum de fotografías tenía una nota en la portada.

— Para que guarden sus momentos de chicos gays, atte: Kaminari — termino de leer.

— Deja lo anoto — dijo Katsuki tranquilo.

— ¿Qué es eso? — pregunto confundido al ver como el rubio efectivamente anotaba el nombre de Denki en un cuaderno.

— Es mi lista de venganzas, así se a quién debo matar y cuando — dijo tranquilo restándole importancia.

— Bueno, dejando de lado tus intentos de asesinar a las personas, sigamos — dijo tomando otro, abriéndolo.

Eran dos pases para una cena romántica en el restaurante del hotel.

— Vaya que original — se burlo Katsuki — maldito Sero — lo anoto.

— Aja, bien el que sigue — en el había una colección de cuchillos — Creo que esto es para ti de parte de Mina — ahora si asesinaba gente.

— Mina me agrada — sonrió asustando al pelirrojo.

— Jum... bueno este es Jiro es un disco con nuestras canciones romanticas, videos y fotos — sonrió.

— Se salva — tomo un regalo y lo abrió dentro había un bote de lubricante y condones — mira bien que saben — dijo — la vieja es una pervertida, joder cuantas veces de habrá violado al viejo, mierda ya no podré sacar eso de mi cabeza — se regañaba mentalmente.

— Ni yo... — murmuro sonrojado, aunque ellos no eran unos santos.

— Este es del bastardo mitad-mitad — de lo dio a Eiji.

— Es... ¿Dinero?... hay una nota, chicos no se que regalarles asi que compren lo que más les guste — termino de leer — es un poco raro esto... — dijo nervioso.

— Badtardo bicolor, listo — termino de anotar.

— Oye no puedes matar a todos — regaño Eiji.

— Mira amor, ser vengador corre por mis venas al igual que la sangre, nunca dejare de serlo así tenga que vengarme de tu hermoso trasero con gusto lo haría — tiro los regalos de la cama — tengo ganas de vengarme ahora — dijo besando al pelirrojo que no alcanzó a decir nada.

Eiji sintió como su pareja lo abrazó y lo recostó en la gran cama nupcial.

Eijirou por la sorpresa gimió cerrando sus ojos.

Se dejo llevar, se dejo hacer.

Besos, caricias, palabras susurradas al oído, gemidos y sonidos inundaban la habitación.

— Me encantas — susurro Bakugou moviendo su cuerpo sobre el de Kiri — esta ropa estorba, sabés quería arrancartela nada más te vi con ella — acariciaba el torso del pelirrojo.

— Has... mmm... lo — gimió.

— Eso pensaba hacer — sonrió.

La ropa dejo de existir, sus bocas se acoplaron una con la otra, se tocaban, se aruñaban.

Katsuki se alejó un poco, volvió con el bote de lubricante y un sobre.

Eiji abrió sus piernas facilitando que el rubio se acomodara entre ellas, Katsuki, colocó lubricante en sus dedos y empezó a acariciar la suave y tersa entrada perteneciente a su esposo.

Metió un dedo, seguido de otro y otro, con tres dedos dentro empezó a dilatar la entrada estrecha de su pareja.

El rubio tomo el miembro de Ei y lo acaricio causando placer en su cuerpo, cuando sus dedos entraban y salían fácilmente, los retiro y se masturbó.

Abrió el sobre y antes de colocarse el condón Eiji lo detuvo.

— No te lo pongas — dijo Eijirou.

— Pero debemos... — susurro.

— No pasa nada, de todos modos es muy poco probable que yo... — desvío su vista.

— Lo haré a como pides — beso la frente sudada del pelirrojo.

Kiri asintió tranquilo, relajándose para lo que seguía, Katsuki coloco lubricante en su miembro acariciando en movimientos circulares, cuando lo tuvo en su esplendor entro en Eiji.

— ¡Aaaah! — gimió de dolor, aun no se acostumbraba a su tamaño.

— Relajate — se besarnos, distrajo a Eiji y al estar dentro se detuvo.

Después de un momento Kiri empezó a mover su cadera dando aviso de que estaba listo.

El rubio empezó a embestir lentamente, acaricio el cuerpo de Kiri dejando también marcas rojas en su piel, marco su cuello, su pecho, sus piernas, cualquier lugar visible.

Siguió en un vaivén volviéndolo cada vez más rápido y certero, Kiri gemía con sus ojos cerrados aruñando la ancha espalda de Katsuki.

Se dedicaron un último beso al culminar, Kiri entre ambos y Bakugou dentro de él marcando con su líquido que ese chico era suyo.

Salió lentamente y se dejo caer a su lado, alcanzó la sábana y cubrió ambos cuerpos, acomodo a Kiri en sus brazos y ambos. cayeron dormidos.

Continuara

Ya no será por día(creo) sino por suceso