★彡[ Capítulo 14 ]彡★

2.4K 214 140
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Mes 5: ¿Saber o no saber?


Eijirou cumpliendo sus cinco hermosos meses. Mostraba ya un vientre un poco prominente, estaba feliz ya había aclarado varias cosas con Katsuki, pero ahora su único inconveniente era su madre.

Aunque la amaba, la mujer estaba siendo un fastidio como dijo Katsuki, ella estaba tratando de que su confianza y su amor por el rubio acabara, cada vez la mujer salía con algo y otras se vio en la necesidad de correrla de su casa.

Suspiro mientras acariciaba su vientre, sonrió enternecido.

— Sabes bebé ya quiero que nazcas, te quiero en mis brazos — estaba sonriendo, con sus ojos cerrados disfrutando de la paz que envolvía el lugar.

Empezó a tararear una canción de cuna que alguna vez le enseño su progenitora, en eso escucha el timbre de su hogar.

— ¿Quién será? — se pregunta ya que no esperaba visitas — espero no sea mamá — dijo levantándose lentamente.

Camino a la puerta y abrió.

— Todoroki, hola — saludo sonriendo.

— Hola Kirishima, ¿O es Bakugou? — pregunto curioso viendo su vientre.

— Puedes llamarme como gustes — sonrió sonrojado.

— ¿Puedo pasar? — pregunto tranquilo, aun estaban en la puerta.

— ¡Claro! — dijo feliz — pasa — se hizo aun lado dejando que el bicolor entrara.

Se dirigieron a la sala, Kiri lo invito a sentarse y fue por algo de té, al volver mira a Todoroki acariciando sus manos como si estuviera nervioso.

— ¿Y a qué debo tu visita? — pregunto tomando de su té.

— Yo… — desvío la vista — me encontre con Midoriya — suspiro — fue un poco incomodo pero parece que ya no esta interesado en Bakugou — dijo viendo al pelinegro.

— Si, eso me dijo cuando lo vi — desvío su vista — ¿Aún te gusta? — pregunto nervioso.

— Si, pero… — suspiro — no se que hacer — se recargo en el sillón y soltó un gran suspiro.

— Tranquilo, si te gusta aceptalo, enamora lo — dijo tranquilo Eiji — y si no te acepta ya tendrás algunas otras opciones — sonrió.

— Intercambiamos números — Eiji podía jurar que vio un diminuto sonrojo en la cara del bicolor — dijo que intentaba ser una buena persona, que quería ser feliz — miro al chico frente a él.

— Intenta lo — ánimo.

— ¿Si no acepta? — estaba preocupado.

— Tan siquiera sabrás que lo intentaste, de otro modo te quedarás con la incertidumbre de que hubiera pasado si lo hacías… — trataba de convencerlo.

Un Alocado AmorWhere stories live. Discover now