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—¿Jimin?— volvió a hablar Tae, Jeongguk aún mantenía su mirada en él, sin expresión, totalmente dura.

—Él ya se iba, ¿verdad?— hablé, el contrario asintió en la misma posición.

—Por supuesto que se va, y no volverá. Intenta que nadie te vea, no es bueno que nos vean junto con una persona rara como tú.— las duras palabras de Tae hicieron reaccionar al pelinegro, quien en un movimiento lo agarró de la camisa con fuerza.

—¿Tú me conoces acaso?— habló con enojo.

—Jeon Jeongguk, mejor conocido como el idiota que se cree superior a todos cuando no es más que una inservible versión totalmente patética y sin significado alguno en esta vida, tú no sirves, ni la versión verdadera es buena para algo.— abrí mis ojos al escuchar a Tae, ¿cómo pudo decir todo aquello? Luego todo fue como si pasase en cámara lenta, Jeongguk subió su puño impactándolo en el rostro de Taehyung haciendo que este cayera al suelo y aún con una sonrisa en sus ojos escupió la sangre de su boca sin inmutarse.

—He escuchado que Jungkook hubiese tenido una excelente vida si tú no existieses— lo miró—Y ahora me doy cuenta que todas aquellas personas tienen razón.

Observé el rostro ensombrecido de Jeongguk, quien en otro movimiento se agachó agarrando de los cabellos a Tae para mirarlo directo a los ojos.

—Tú no tienes derecho a hablar de mí cuando tu vida a sido un total asco— Taehyung borró su sonrisa

—¿Qué?

—¿Confías en las personas correctas, Kim? ¿Crees que le cuentas tus temores a los indicados?— Jeongguk sonrió de lado.—Se ríe a tus espaldas y le cuenta a todos lo que le dices, y tú sigues cayendo. Quien es patético no soy yo, sino tú.— soltó con fuerzas sus cabellos y luego me miró a mí, temblando con los ojos inundados en lágrimas y la mirada perdida.

—Gracias.— habló y sin más, se fue.

Dejándome a mí sin saber qué hacer, y Taehyung totalmente perdido en sí mismo, parándose con furia y avanzando hacia él, más no llego a tocarlo cuando lo agarré del brazo.

—¡Suéltame!— exigió soltándose con fuerzas para volver a avanzar, pero nuevamente lo sostuve—¡Suéltame Jimin! ¡Tú también eres un completo idiota y débil por creerle!— abrí los ojos en grande y mi corazón dolió por completo. Él dejó de forcejear y me miró con lástima, apreté mis manos.

—¡¿Qué te sucede?!— hablé con lágrimas.—¡¿Cuándo te has guiado tanto por los demás, Taehyung?!— lloré aún más —¡¿Cuándo mi mejor amigo cambió para convertirse en la marioneta del resto?!— suspiré aún temblando—¿Cuándo preferiste gustarle a ellos antes que a ti mismo?¿Cuándo decidiste no ser lastimado pero lastimar a los demás? incluso a los que te aman y han estado junto a ti en todo momento.— pude ver su expresión devastada, lo solté lentamente para girarme y alejarme.

—Lo siento.— lo escuché hablar y paré.—Yo... Tal vez fui brusco con mis palabras, lo siento.

—Si aceptar las disculpas fuera tan fácil como decirlas, el mundo no sería igual.— suspiré—Piensa en lo que es mejor para ti, Tae, y regresa cuando lo tengas claro. Por ahora, sólo vete, necesito estar solo.— continué mi camino y al entrar cerré la puerta sin fuerzas recostándome en ella.

¿Qué había sido todo eso?

Cerré los ojos aún con las palabras de Tae en mente. Él tenía razón, yo era débil, muy débil.

Caí al piso sin expresión pero aún así con lágrimas comenzando a salir de mis ojos nuevamente. ¿Quién diría que todo eso podría ocurrir?

Había sido mi culpa, sí, sólo mía.

Revisé mi celular para ver la hora, aún era temprano. Dicidí darme un baño para poder relajarme, aunque era probable que no sucediese.
¿Hubiese sido todo distinto si nuestro pasado cambiase?

Luego de terminar de bañarme fui hasta mi habitación, comencé a buscar mi ropa cuando en la silla posada al lado del armario veo la chaqueta de Jeongguk. Suspiré negando, ¿realmente tenía que olvidarsela? Debía esperar hasta mañana y dársela, aunque pensándolo bien, seguro comenzarían a especular del porqué Park Jimin tenía la chaqueta del famoso Jeon Jeongguk. ¿Qué debía hacer entonces?  lo pensé varios minutos cuando se me ocurrió algo, aunque la probabilidad de que sepa su dirección era de cincuenta y cincuenta. Agarré mi celular y marqué el número, tres tonos se escucharon y luego su cansada voz.

—¿Hola?

—Hola, Jin. Umh, llamaba para pedirte algo...

¿Trata sobre Taehyung?

—No, pero... Sí sobre Jeongguk.— silencio, un largo silencio.

¿Qué sucede con él?

—¿Tú sabes dónde vive?

—¿Por qué querrías su dirección?

Te lo ruego, haré lo que sea.

—...Bien, pero si pasa algo, no me metas.

—Hecho.— me pasó la dirección, me vestí y luego agarré su chaqueta, me lo pensé un poco más, quizás él siquiera quería verme, tal vez hasta estaba enojado. Pero, entonces, ¿por qué había sido ese agradecimiento?

Caminé hasta la puerta y salí, su dirección en realidad no estaba tan lejos, quizás un poco más que la de Hoseok. Agarré mi bicicleta y partí, tardé unos diez minutos cuando finalmente llegué, pero realmente no quería entrar allí. Caminé hasta la puerta luego de dejar mi bici a un lado, suspiré casi temblando y luego de contar hasta cinco me atreví a tocar.

Pasó al rededor de dos minutos cuando escucho pasos, mi respiración se agitó levemente cuando la puerta fue abierta, dejando ver a una anciana con un rostro sorpresivo al verme.

—Oh, buenos días. ¿Busca alguien?

—Buenos días, señora, estoy buscando a Jeon...Jeongguk...— su expresión se agrandó aún más.

—¿Cómo te llamas, joven?

—Mi nombre es Jimin...Park Jimin.

—Espérame un segundo aquí, Jimin.— asentí.

Pasaron como cinco minutos en los que no escuché ruido alguno, la anciana había cerrado la puerta por lo que siquiera podía ver algo. Pero luego los pasos comenzaron, la puerta fue abierta nuevamente dejando ver a quien buscaba, o bueno, no realmente.

—¿Ji-Jimin? ¿Qué haces aquí?— su rostro iluminado por una tímida sonrisa, aquel cabello caído sobre su frente, su lindo vestuario decorado con un estampado de conejito, sus redondos lentes cayendo sobre su nariz.

—Hola, Jungkook.— hablé para luego sonreír. Y es que como no hacerlo cuando era lo único que te causaba aquella persona; ser feliz.

Two personalities • [Kookmin]Where stories live. Discover now