Kapittel førti fire

81 17 2
                                    


A pesar de sentirme como un inválido me logro levantar de la silla con una sensación de hormigueo en mis pies hasta que bajo la mirada, estoy con medias y mis pantuflas están perdidas en alguna parte de la habitación al igual que mi dignidad. Casi arrastrándome llego a la puerta, de pie, veo su silueta, con el típico frío de las noches, está ahí tieso como una estatua, que pensaría que estoy alucinando si no fuera por el leve sonido de su respiración.

ㅡ¿Es cierto?ㅡ pregunto inútilmente. Él asiente, le pregunto si es una especie de venganzaㅡpor mi insistencia con lo de tener un hijoㅡque yo siempre he buscado la oportunidad de sacar el tema ya que él nunca lo hacía, podía bromear que nos casemos a los diecinueve años más el otro tema era un tabú.

Es la única vez que no le doy su espacio como solía y le hablo sin espera alguna.

Me pongo a su costado, me pongo serio y determinanteㅡ¿Entonces por qué viniste aquí?ㅡsuelto sin aguantar su silencio, no hay ni un ave que pase cerca, tal cual fuéramos los únicos seres vivientes en la tierraㅡSi no ha sido suficiente, no entiendo por qué vinimos. Tuve que dejar a mis padres, a mi-

ㅡ¿Qué? ㅡ Hoseok frunce el ceñoㅡ¿Crees que ha sido fácil para mí? ¿Abandonar la música, los fans, mi sueño desde pequeño?! Desde que bailaba en la calle para ayudar en algo a mi familia.. No, tú no eres el único que ha hecho sacrificios para estar aquí! ㅡseñala con el dedo índice al suelo enfatizando sus palabras que aumentan de volumen a cada pausa, la vena de su cuello levantada, lo puedo notar. Ahora me mira indiferente para luego dar media vuelta y abandonar la cabaña azotando la puerta de cerca que armamos hace meses, y ésta queda semiabierta a la vez que suelta un chirrido espeluznante.

Corro lo que me permiten mis piernas hasta llegar al borde de la cama llorando como si no hubiera llorado nunca en mi vida, lloro más que aquella vez que estrené mi bicicleta y la perdí en tan solo dos días en Daegu, más que cuando culpé a Jimin que me golpeara el meñique contra la punta de la cama en una pelea de almohadas, que cuando tuve mi primer pesadilla en Seúl.. Y quizá se escuchaba mi llanto fuera de la cabaña pero ¿quién me escucharía?,¿ Hoseok? Estaba a varios kilómetros de la civilización y nunca me había sentido tan solo a pesar de eso. Excepto hoy.

THE EX-IDOLS DIARIES [HopeV]Where stories live. Discover now