Mi idolo [Higuel]

Cap. 7

Esta semana he notado a Miguel muy distraído del mundo y más a tentó a su celular, lo que era raro porque no es mayor fan de la tecnología (en eso parece un anciano). Cuando le pregunté con quién hablaba me dijo que "con nadie" luego le pregunté a Isabel si sabía algo, solo se hizo pato.

Llegué al cuarto después de arreglar lo de una locación y los vi hablando en el sillón.

-...Bien, hablaré con ella, luego.

-Gracias Iza, eres la mejor.

-Claro que lo es, ¿De que estamos hablando?- interrumpí acercándome a ellos.

Miguel se veía muy nervioso.

-De... Lo lindo que sería tomar fotos en un lugar alto, en lugar del muelle- Dijo segura

-No se puede- negué seria, se que me están mintiendo, suspiré, ya se los sacaré más tarde -Mejor vete a alistar, Miguel.

Él se levantó sin oposición alguna, lo cual era raro en él, una vez que se fue tomé asiento junto a Isabel

-¿Que es lo que en realidad pasa? Tienes que decirme, trabajamos juntas.

-Si, cuando se trata de la carrera de Miguel.

-Asi que no se trata de su carrera ¿Eh?- ella no dijo nada -Bien, no me lo digas cómo tú socia, dímelo como tú esposa.- me acerque más a ella. No dijo nada -De acuerdo, no me digas, yo puedo averiguarlo sola.

Me levanté y avance un par de pasos.

-No, por favor, al menos déjanos prepararnos para eso- soltó -Miguel te lo dirá, cuando sea tiempo.

-¿Tan malo es?- Pregunté sin mirarla.

-No es malo, es...

-¡Ya estoy listo!- anunció mi pequeño cliente saliendo de su habitación salvando a su cómplice en el proceso.

-Hay que salir ahora, pero seguimos con nuestra conversación más tarde.

Salimos al muelle como estaba previsto, el perímetro fue delimitado, muchas fans veian a la distancia, Miguel volteaba a saludar de cuando en cuando, sin embargo su atención está en su teléfono. Arta de eso caminé hacia él.

-Ya deja eso o te lo quitaré.

-Ya no soy un...- dirigió su mirada a mi, prefirió guardar el apartado -Perdón, me concentraré más ahora.

¿Qué? O ya está madurando o está metido en un gran lío. En Cualquier caso no volvió a sacar el celular y acato las órdenes del fotógrafo.

Después de la seción fuimos de regreso al hotel, en el auto recibido un mensaje que de inmediato revisó, una sonrisa boba y muy mal disimulada se colocó en su boca, le mostró su celular a Isabel, ella también sonrió

-¿Qué pretenden ahora?

-Nada... Solo, hay una exposición de... Mini globos aerostáticos en el museo y Miguel... quiere ir

-¿Y Miguel no puede hablar por si solo?

-Si puede pero te tiene miedo- el aludido puso sus típicos ojos de cachorro

-¿Cuando es?

-Esta noche.

-No.- nadie habló -Tengo cosas que arreglar para la semana y no va a ir solo otra vez.

-Yo iré con él y de incógnito, Por favor

-Por favor- insistió la estrellita por fin

-Vallan pues, pero si se meten en problemas no habrá más salidas.