Cap. 10

624 114 13
                                    

Decir que las chicas se enojaron cuando invite a Hiro al hotel sería decir poco, nisiquiera sé si me duele más el cuerpo o el orgullo pero terminaron aceptando. Tuve que terminar todos los pendientes del día a velocidad, solo eran un por de ensayos y grabación en solista, nada que no pudiera controlar.

Cuando llegamos me metí a bañar en chinga, pedí pizza y "comida chatarra que se supone no debo comer, también les pedí, le suplique a las chicas que se desaparecieran por un rato, sin embargo cuando salí perfectamente arreglado con unos jeans negros una camisa roja y una corbata, sin disfraces ni ropa horrible ¡Todo listo para dar una buena quinta impresión!

Al abrir la puerta lo primero que veo es a Hiro con cara de circunstancia frente a frente con Sawako en fase de madre sobreprotectora.

Iza salió de la cosina luciendo despampanante como si nada.

–Oh, aquí está Miguel– dijo Iza, los otros dos voltearon a verme con sopresa –Bien, no vemos chicos– se despidió tomando a Sawa del brazo y prácticamente arrastrándola a la salida.

–¡Y no se metan en problemas!– fue lo último que dijo Sawa antes de que se retiraran por completo.

–Esto es... ¿Normal para ti?– se amino a decir Hiro

–Si, espero que no hayan dicho nada raro.

–No, no te preocupes.– sonrió con tanta naturalidad que no pude evitar devolverle una sonrisa igual.

Nos sentamos en la sala, ya estaba todo listo para cenar. Era algo sencillo sí, no quería que se sintiera como en una relación mega aburrida, se bien que lo tedioso que es eso.
Le serví una rebanada de pizza y refresco.

–¿Quieres ver una película o jugar aún vídeo juego?– ofrecí.

–Mejor la película, no quisiera umillarte en la primera...– habló con confianza asta que lo interrumpí.

–¿Cita?

–...P-partida– Sus mejillas enrojecieron, solo quería bromear.

Me reí, no pude evitarlo, se veía muy lindo.

Vimos una boba comedia mientras cenamos, hicimos bromas y reíamos como un par de tontos. Eso era lo que quería, ser simplemente nosotros mismos sin todo el drama de celebridades ni de villanos raros de esta loca ciudad.
Al acabar con la pizza apostamos a ver si deverdad era taaaan bueno en lo videojuegos, gran error de mi parte, me aplastó sin piedad una y otra vez.

Hoy descubrí que a Hamada le gusta ganar, de verdad le gusta y que es todo un crack en los videojuegos.

–¡Gané! Rindete Rivera, no puedes contra mi.– Dijo poniendose de pie

–No es justo, la carrera me hizo manco.– respondí encogiendome en el sillón

–¿Encerio? Apuesto que asta en Guitar Hero te ganaría

–Sueñas Hiro, pero no tengo control para jugar aquí ¿Y si vamos a un arkade? También podría retárte en Dance Dance Revolution

–Yo no juego a eso, y aún así, dudo que puedas bailar con una gabardina gigante puesta.

–Oh rayos, lo olvidé completamente– me hundí aún más en el sillón –Esto me recomendó tanto a la preparatoria que olvide donde estaba– Solté

Él rió y se sentó a mi lado

–No jugaba así con nadie desde la universidad, bueno, supongo que tenía edad de Preparatoriano

–Entraste a lo 14 y te graduaste a los 18, en efecto pasabas por uno de prepa.– Él me miró sorprendido y extrañado a la vez. Creo que eso sonó muy psicópata, ¿Alguna vez mencionó eso conmigo? Rápido, pensar en algo –O al menos es lo que esta en internet, fue una noticia a nivel mundial ¿Sabes?

–Ah, Claro, eso es lo que no me gusta de la vida pública, todo el mundo puede saber cosas de ti que ni tú sabes.

–Por eso mismo tengo que ocultarme cuando salgo. Es horrible, realmente quería ganarte en mí juego favorito y no puedo por temor a que me reconozcan– quejé

Él se quedó en silencio por un momento.

–Conozco un lugar donde podemos jugar sin que nadie nos vea– dijo confiado –Pero debes venderte los ojos hasta que lleguemos...

Mi idolo [Higuel]Where stories live. Discover now