Cuando un nuevo mundo inicia, tú te verás obligada a enfrentarte a los nuevos retos que el oscuro Apocalipsis te ofrezca y sobrevivir sin importar lo que pase. Lágrimas, desesperación, peligro, amistades e enemistades y lo que uno menos desea: Tener...
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Observo a mi alrededor en busca de una persona.
Lo he pensado y he tomado la decisión de no irme sin el documento que Yeri y la señora Kim ocultan.
--¿Jungkook?--la voz de ______ me despega de mis pensamientos--Sé que sueles ser callado pero no has dejado de lucir muy pensativo. ¿Todo bien?
Logro detectar su preocupación por mí, admito que he adorado la expresión de su cariño y a pesar de querer guardar el secreto sé que no podré engañarla fácilmente. Necesito actuar pronto.
--______--entrelazo nuestras manos, noto el ligero apuro en mis palabras.
--¿Qué sucede?
--¿Te acuerdas de Yeri?--frunce su ceño pero pronto parece recordar su rostro.
-Sí, es la chica que trabaja con Jin.
¡Esa es mi ____!
Sonríoorgulloso por darle en el blanco.
-Pero.. ¿Qué tiene que ver? Bueno, además de todo lo que nos ha ocultado.
--No es todo.
Sus orbes vuelven a mirarme con un brillo, aunque es más un brillo de espanto que de felicidad lamentablemente.
-Ella tiene la carta que el mismo presidente le dio a la señora Kim negando su plan de ataque contra la nación.
--¿Qué?!--al instante cubro su boca. _____ me observa apenada, una mirada que me provoca mucha ternura--Lo siento, pero admito que a cada segundo me sorprenden más.
--Igual a mí pero debo ir por ese documento, así demostraría que el presidente es totalmente inocente--contesto causando que su semblante cambie. Las líneas de su frente están totalmente arrugadas ahora.
--Jungkook ir hasta su oficina es mucho más arriesgado de lo que hemos hecho, en especial en esta situación.
--No lo niego--respondo consciente de la situación. Sin embargo, no puedo esperar otro milagro para nosotros, ¿por cuánto tiempo Jin lograría protegernos?. Es momento de hacerlo por nuestra cuenta.
--Entonces..
--Entonces yo iré con él--pero aquella no es mi voz, es la de Lisa.
Cuando me encuentro con sus orbes sé que sus palabras van muy en serio. Nos ha oído.
--No tienes de que preocuparte _____, tu novio estará bien en mis manos--le dice pero sin ninguna intención de darle celos. Lisa se mantiene neutral y al mismo tiempo sin ningún signo de preocupación, cómo si no tuviera miedo.
--¿Hablas en serio?--pregunta, colocando sus brazos en forma de jarra a los costados de su cintura--Sin embargo no debo preguntar, despúes de todo tú no eres la novia.
