Capítulo 24

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Parvati Patil era una ginecóloga-obstetra reconocida en el país británico. Su practicidad y conocimientos en el área eran alabados y envidiados por muchos de sus colegas, eso sin contar con la admiración de sus pacientes por su dedicación en cada caso presentado. Sin embargo, no muchas mujeres tenían la posibilidad de ser atendidas por ella ya que su tiempo se distribuía mayormente entre sus congresos y su familia. Es por eso que aquellas mujeres que conseguían una vacante en su agenda se consideraban afortunadas, y más aún si obtenían su amistad, tal como lo eran cierta rubia y pelirroja que se encontraban sentadas en uno de los sofás dispuestos en la sala de espera.

-Aun no puedo creer que asignaran a Hermione para una reunión de última hora -comentó Ginny mirando su teléfono móvil-. Es decir ¡hoy es la fiesta del conglomerado! ¡Hoy deberían estar libres de trabajo!

-Por lo que sé solo trabajarán medio tiempo, y estoy segura de que no se esperaban que esas personas quisieran discutir la fusión de su empresa justamente hoy. Así como no tenemos duda de que nuestra amiga es la mejor para estos casos - replicó Luna mirando soñadora a una mujer con un estado de embarazo avanzado, hablando sonriente con un nervioso hombre quien parecía ser el marido de ésta.

-Sí, es cierto. Pero también es cierto que era importante que Hermione viniera a colocarse el implante, es decir, si ya no quiere correr riesgos de un olvido y haya fiesta sin gorro.

-¡Ginny!

-¡Que! No estoy diciendo ninguna mentira. Esos tortolitos hechos los tontos son bastante calenturientos; y mientras ella no esté usando nada, y él tampoco, a este paso voy a ser tía por partida doble.

-¿Ah sí? ¿Y qué me dices tú? ¿Te has cuidado?

-Pues, para que veas, sí -afirmó Ginny con una sonrisa de suficiencia-. Hablé con Blaise y decidimos que queremos intentar ser padres una vez después de casarnos.

La rubia miró a su amiga con ojos desmesurados-. ¿Casarse? ¿Eso quiere decir que...?

-Sí, me pidió matrimonio ¡y le dije que sí!

Ambas chicas chillaron emocionadas antes de darse un gran abrazo. Tuvieron que murmurar una disculpa al ser amonestadas por la secretaria quien solo negó con la cabeza sonriendo.

-¿Y ya saben para cuando quieren casarse?

- Solo sabemos que será una semana antes de navidad.

-¿Tan pronto? -dijo Luna sorprendida.

-Queremos que sea lo más rápido posible, así disfrutaremos al máximo nuestra luna de miel en lo que dure los efectos de la inyección que me colocaré hoy.

La rubia parpadeó asombrada-. Vaya, ya veo que lo han discutido muy bien.

-Así es - suspiró Ginny-. Digamos que el pequeño susto que nos llevamos el sábado fue como un llamado de atención; ya sabes, para definir algunas pautas en mi vida.

-Y no sabes cuánto me alegro por ello.

El teléfono de la pelirroja vibró por la llegada de un nuevo mensaje, seguida por el de Luna anunciando lo mismo.

-Qué raro, Draco quiere reunirse con nosotras.

-Sí, Theo me está diciendo lo mismo. Parece que es importante, ya que nos quiere ver en cuanto terminemos con nuestras "diligencias".

Ginny enarcó una ceja mientras leía la respuesta de su novio-. Y de seguro tiene que ver con nuestra amiga, Blaise me esta pidiendo que no le digamos nada a ella, que allá nos explican.

-¡Le quiere preparar una sorpresa para la fiesta! ¡Que romántico! - anunció Luna risueña, contestando a su vez al castaño.

-Luna Lovegood, Ginevra Weasley.

Dulce PesadillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora