CON LAS GANAS | CACHÉ

Capítulo 4: Pídemelo por favor.

POV CALLE

El restaurant de comida italiana ya está cerrado. Algo mas que desee ordenar. -le dije a mi jefa entrando nuevamente a la oficina.

-Ya no importa señorita Calle, recoja sus cosas. Está despedida.

-¿Disculpe que ha dicho?

-Creo que me ha escuchado bien, esta despedida. -me dijo extendiendo su mano para entregarme mi celular.

A lo que sali a ordenar la comida lo había dejado en el mueble que se encontraba en la oficina.

Tomé mi celular aun confundida y pude notar que la pantalla estaba encendida.
La observé y vi que una imagen estaba abierta, Johan había enviado al grupo un foto montaje de María José en una piscina llena de café y todos se estaban riendo de aquello.

Oh mierda! En ese momento creo que me olvide de como respirar. Quería que me tragara la tierra y ni si quiera era mi culpa. Pero ¿lo había visto?

-¿Acoso tomó mi celular sin mi permiso? -pregunté un tanto molesta.

-El celular se encendió solo y pues entenderá que al ver mi nombre en la pantalla sentí curiosidad.

Yo la contraté señorita Calle para que trabaje, mas no para que se ande con niñerias burlándose de mí con sus amigos. Yo no soy burla de absolutamente nadie.

-Es que yo no -intenté hablar pero fue inútil.

-Basta! no quiero escuchar una palabra mas, por un momento llegue a pensar que me había equivocado con ud por el mal juicio que le hice esta mañana, pero claramente tenía razón, desde que entró en mi oficina ya me habia dejado claro que tipo de persona es, quiero que se retire tengo mucho que hacer y de paso me hace el favor y les comunica a sus compañeros que mañana muy temprano los espero en mi oficina.

Estaba tan enojada en ese momento que solo empecé a hablar sin ni si quiera pensar bien que palabras salían de mi boca.

-Usted no debió haber tomado mi celular, invadió ni privacidad! eso es un delito.

-¿Me está amenazando señorita Calle? Por que con gusto lo podemos hacer un asunto legal y veremos quien sale perdiendo. -me dijo tomando un sorbo de su vaso de wisky.

-No, no se preocupe me queda claro quien saldría perdiendo. -tenia mis ojos cristalizados con las lagrimas amenazando salir, quería decirle de todo pero atacarla me ocasionaría problemas, esta mujer era muy poderosa y me acabaría, asi que simplemente me dirigí a la puerta y la tiré tan fuerte como pude y abandoné esa maldita empresa. Abandoné Garzon Industry.

Pedí un uber y me dirigí a mi departamento. Estaba tan molesta que ni si quiera les escribi a los chicos. Se que no lo habian hecho con mala intencion, aunque su broma me habia costado el empleo.

Me sentia miserable y fracasada, me habian despedido el primer día de trabajo. Podía ser mas loser? Mi padre tenia razón después de todo.

-Servida señorita.

-muchas gracias -le extendí el pago al hombre y me baje del carro. Abrí la puerta del departamento y no podía creer lo que estaban viendo mis ojos.

-Calle! Que haces aqui pensé que trabajarías hasta muy tarde.

Kim estaba realmente paniqueada y ni que hablar de su acompañante. Pero que carajos estaba pasando.

-Así era pero surgió algo y me viene mas temprano.
Buenas noches profesor Jaramillo.

-Buenas noches Daniela, eh yo iba de salida. Nos vemos luego.