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Luego de todo lo ocurrido, mamá y Jimin se despidieron no sin que antes ella le hiciera prometer que volvería a visitarla, Park parecía encantado con la idea y finalmente volvimos a casa de los abuelos, hablé con el acerca de las cajas que hay en ...

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Luego de todo lo ocurrido, mamá y Jimin se despidieron no sin que antes ella le hiciera prometer que volvería a visitarla, Park parecía encantado con la idea y finalmente volvimos a casa de los abuelos, hablé con el acerca de las cajas que hay en mi habitación y el accedió a ir a revisar, lo que nos lleva justo al momento en el que Park se esta quejando en vos baja por tener que cruzar de su ventana a la mia.

—Vamos, tus piernas son largas, no es muy dificil llegar hasta aquí — esta vez soy yo quien se queja mientras lo observo del otro lado.

El se sostiene de la rama cerca de su ventana mientras me dirige una mirada amenazante, el fresco viento de la noche hace mecer sus cabellos con gracia y tiembla ligeramente ante la sensación del frio.

—Claro que es dificil — reclama avanzando como gato temeroso.

—Yo lo hacía todo el tiempo.

—Eso es porque eras un delincuente — le miro con diversión aunque un poco ofendido tambien.

El sigue avanzando mientras recita el padre nuestro pidiendo por no caer, la verdad es que no es mucha distancia de una ventana a otra, el problema es que Jimin es un llorón que le teme a las alturas, mientras el sigue avanzando a su ritmo yo me encuentro apurandolo solo para molestarlo logrando mi objetivo, pues en su rostro se ha formado un puchero y tiene el ceño fruncido.

—¡Ya callate! — me reclama de mal humor.

—Deja de gritar o te van a descubrir — le señalo mientras sonrío de lado, el bufa en respuesta y finalmente llega a la ventana.

¡Gracias dulce Jesus!

Pero bueno, estamos hablando de Park Jimin, quien hace su triunfal entrada a mi habitación cayendo estrepitosamente al suelo, lo escucho gruñir frustrado mientras yo me carcajeo por su torpeza, ha caído de cara llevandose consigo las cortinas, quedando envuelto entre estas, de alguna manera le da un toque gracioso y adorable.

—¡Deja de reírte de mi! — exclama mientras alza la mirada, como esta oscuro no puedo ver bien si se ha sonrojado o no, pero estoy casi seguro de que si lo ha hecho.

—Es que, en serio Jimin...

Antes de poder continuar, la puerta es abierta de manera sorpresiva dejando ver a mi madre, ella grita "¿Quien esta ahí?" su expresión es somnolienta y sus cabellos cortos estan desordenados en todas las direcciones posibles, esta usando pijama y en su mano sostiene un sarten en tanto con la otra busca un interruptor.

Seguido de ella viene mi hermano, que trae un bate de béisbol, usa un boxer blanco con estampado de besos y una camisa enorme, a su lado esta la pequeña Young Mi, abrazando un pato de peluche y por ultimo esta la esposa de mi hermano, quien usa una bata dejando notar su pancita en crecimiento.

¡Seré tío por segunda vez!

La luz se enciende logrando que Park parpadee un par de veces para acostumbrarse, por la caída, su cabello esta desordenado y como era de esperarse esta sonrojado hasta las orejas, luce avergonzado, incluso a mi me dio vergüenza y eso que nadie me ha visto, la situación se ve mucho mas ridicula de lo que suena.

ɢʜᴏꜱᴛ ᴏꜰ ʏᴏᴜ (ᴋᴏᴏᴋᴍɪɴ)Where stories live. Discover now