*Segunda temporada de "21 Formas De Enamorarse de México"*
México actúa raro, no es porque quiera alarmar a los países, nunca fue su intención.
No pretende hacerle eso a sus pretendientes.
Pero necesita resolver asuntos del pasado.
Portada hecha po...
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Algunos países, junto con la Organización de las Naciones Unidas, temían. Temían que se repitiese la situación del pasado uno de noviembre; tan solo dos días de haber visto a la nación latina desplomarse. El día en el que fue dado de alta transcurrió en la mañana del día de noviembre, ONU se encargó de llevar a México a su hogar, donde lo recibieron algunos de sus estados: CDMX, Nuevo León, Sonora, Sinaloa, Veracruz y Yucatán, Edo. Méx llegó más tarde.
Actualmente era tres de noviembre, donde se estaba llevando a cabo otra junta; pero la mayoría de países no podían centrarse en lo que la organización hablaba, pues la situación se repetía: México había llegado, está vez, al mismo tiempo que USA y Canadá; estos intentaron hablarle, pero la tensión se sentía en el aire. Nada más empezar la junta, México se quedó serio mirando hacia un punto indefinido de la sala.
ONU lo notó, pero no pudo hacer nada, salvo esperar a que la junta terminase. Por fortuna, no faltaba mucho.
ㅡ Bueno, antes de terminar esta junta debo decir algo ㅡdijo ONU dirigiendo su mirada hacia un latinoㅡ México.
El de sangre azteca despertó de su trance y miró confundido al de piel azul;ㅡ ¿Me hablabas?
ㅡ Debido a lo ocurrido hace dos días, te recomiendo que te tomes un descanso ㅡsonrió pacifistaㅡ Tienes permitido faltar a las siguientes dos juntas.
La sala se llenó de murmullos que intercambiaban los países, "qué suerte", "no fue tan grave, no se pasen", "¿En serio tan grave fue?", "Ojalá diga que no, no quiero dejar de verlo".
ㅡ Eh, gracias por la oferta ㅡse acomodó en su asiento sonriendo nerviosoㅡ Pero... no creo necesitarla.
ㅡ De todas formas considéralo ㅡONU tomó asiento más relajadoㅡ Puedes llamarme para avisarme si sí faltaras.
ㅡ Okey ㅡMéxico se encogió de hombros.
ㅡ Bien, declaro esta junta oficialmente terminada, los veo en dos días ㅡdijo y comenzó a guardar todos los documentos que sacó de su maletín.
Países comenzaron a hablar, otros se levantaban de sus lugares y otros sencillamente permanecían sentados. El caso de México era diferente, pues éste se levantó pensativo de su asiento y caminó a la salida, siendo el primero en salir con varias miradas de países preocupados sobre él.
Bajó escaleras -lo cual era raro, pues la mayoría de las veces tomaba el elevador, tarareando las canciones que se reprodujesen- sin quitar su seriedad; si bien, era un misterio por qué se había puesto muy mal, también era un misterio los repentinos recuerdos, y trataba de averiguar el porqué.
Salió de aquel edificio ignorando rotundamente a FBI, el cual lo había saludado en el segundo piso, pero se sorprendió al ver que el país no le correspondió. Sacó las llaves de su pantalón a medida que se acercaba a su camioneta roja; una vez ahí, introdujo la llave y la giró, pero antes de poder abrir la puerta, una voz detrás de él lo llamó.
