The Witcher | La guerrera

Capítulo 22: El primer deseo



El camino le ha llevado a un pueblo distinto.

Stark entraba a las calles bajo una monarquía diferente.

Se acercó a un hombre cuya bolsa de oro colgaba de la cintura, lista para ser urtada.

-¡Hey, hola corazón!- saludó al hombre con una coqueta sonrisa.

El hombre no se limitó a prestarle atención, en segundos una seductora sonrisa invadió su rostro.

-Hola hermosa, ¿buscas un poco de oro?- tomó su bolsa y la mostró
-Tengo un par de ideas que podrían interesarte-

Stark rió dulcemente y acarició el pecho del hombre
-Te sigo-

El hombre tomó su mano y la llevó por un callejón alejado de la gente.
Ahí Stark le arrebató la bolsa de oro y con la misma le dió muy fuerte en la cabeza.
Este, tras chillar, cayó sin conciencia y Stark pudo darse vuelta para irse, pero una figura femenina bloqueó su paso.

-Yo sé cómo podrías usar ese oro- era una mujer hermosa, de cabello negro, ojos morados, labios carnosos, cuello alto.

Tenía un vestido negro que imponía poder al igual que su rostro, su voz y su postura.

Stark parpadeó un par de veces.
-¿Disculpa?-

La mujer la escaneó de arriba a abajo por un largo e incómodo rato
-Buscas dinero... yo también-

Stark le dió la espalda
-No es tu asunto- iba a irse pero la mujer tomó con mucha fuerza su brazo.

Stark jadeó incómoda, se miraron a los ojos y de pronto el brazo de la guerrera se iluminó sin que ella lo ordenara, como si con magia la otra mujer hubiera revelado el poder que Stark ocultaba.

La mujer sonrió
-Que criaturas tan maravillosas te encuentras en un lugar tan ordinario como este-

Stark la miró con asombro.

En cuanto la mujer soltó su brazo este dejó de iluminarse.

-Mi nombre es Yennefer de Vengerberg, ¿cuál es tu nombre?-

La guerrera enderezó su espalda
-Stark de Nowhere-

-¿Dónde es No where?-

-En ningún lado-

Hubo un silencio entre ambas hasta que Yennefer sonrió y soltó una ligera carcajada.

-Acompáñame, Stark, y te daré el oro que necesitas-

-¿Tu me contratas?- pregunta la guerrera -¿Qué es lo que buscas, por qué habría de seguirte, hechicera?-

Yennefer avanzó unos pasos dándole la espalda y buscó las palabras con las que respondería a la pregunta.

-Lo importante no es lo que yo busco... si no lo que tú buscas-

Stark negó
-Hasta luego-
Al girarse, Yennefer estaba justo frente a ella una vez más.

-Yo busco mucho- avanzó mientras Stark retrocedía
-Puedes ser parte de mi camino en lugar de estar en él... te recomiendo la primera opción-

Stark rodó los ojos exasperada.
-Solo yo salgo de una para meterme en otra- gruñó.

Yennefer le ofreció su mano
-No necesito protección, pero tu poder... pude sentirlo desde que entraste al pueblo, alguien como tú necesita una guía superior y yo...

-¿Tu eres esa guía?- preguntó Stark con tono burlón.

Era desquiciante que las personas con poder siempre buscaban lo mismo de ella.
Sin embargo, ¿qué otra opción tenía?
La mujer accionó su poder como si de una vela se tratara, claro que quería saber más sobre ella.