Viaje IV

1.4K 71 1
                                    

Narra Ana

Entramos en su apartamento siendo bastante torpes, pero es que la pasión con la que Mimi me besaba me impedía ver y caminar.

Habíamos hecho tiempo por Granada hasta la hora de cenar, me encargué de invitarla en una taberna que encontramos en un callejón, era bastante pequeña, pero muy acogedora y la verdad, comimos de muerte. Después ella se empeñó en comernos un helado, por un momento discutimos porque se quejaba de que mi helado favorito fuera el de pistacho, aún así, ella con su helado de turrón y yo con el de pistacho disfrutamos un poco más de la ciudad de noche. Subimos hasta el Albayzin donde pudimos ver toda la ciudad iluminada.

Cuando empezó a refrescar volvimos a casa y no se en qué momento comenzamos una batalla de besos.

- Mimi déjame cerrar la puerta, no quiero que ningún vecino se cuele - me separé un poco de ella y cerré la puerta, dejé la chaqueta en la entrada y volví a lanzarme a sus labios.

Andamos de una pared a otra besándonos con ganas, Mimi me dirigía a su habitación a la vez que yo me iba deshaciendo de sus prendas por el pasillo.

En cuanto cruzamos la puerta, me lanzó sutilmente a la cama y trepó sobre mi para juntar de nuevo nuestros labios.

- Te amo Ana que no se te olvide ¿vale? - me dijo antes de quitarme la parte de arriba y quedarme en sujetador.

Comenzó a besar mis pechos, haciéndome gemir de placer y dolor.

- Mimi no me hagas marcas porfavor - le susurré como pude, pero no quería moratones.

La rubia bajó la intensidad pero aún así no se separaba de mis pechos, se deshizo de mí sujetador y se lanzó a lamer un pezón, estuvo bastante tiempo recreandose hasta que pasó al otro sin dejar de masajear el anterior.

Volvió a mi boca y posteriormente se quitó todas sus prendas quedándose completamente desnuda y yo un poco cortada. Sabía lo que se venía y obviamente tenía muchísimas ganas de que sucediera pero tenía ese miedo de no estar a su altura.

- Estas buenísima Mimi - dije boquiabierta y ella rió ante el comentario.

- ¿Me dejas comprobar como tu me ganas? - me susurró en el oído dejándome sin respiración

Fue creando una línea imaginaria de besos, desde mi boca, pasando por ambos pechos, el abdomen y el filo de mis vaqueros.

Desabrochó el botón y besó el trozo de piel que quedó al descubierto, haciendo que me extremeciera un poco.

- Tranquila Ana, relájate, si no quieres siempre puedo parar ¿me oyes? - yo asentí.

- No es que no quiera Mimi, es que no tengo tanta experiencia como tú y no quiero defraudarte - me sinceré

- No me vas a defraudar, estoy segura que eres bastante buena en estos temas - me hizo reír - y si no es así vas a aprender conmigo porque estoy dispuesta a enseñarte - dejó un suave beso en mis labios que me relajó bastante y pude disfrutar de lo que venía a continuación.

Volvió a mis vaqueros y con una poca de mi ayuda se deshizo de ellos, agarró mis braguitas y a la vez que las bajaba besaba cada parte de mi piel, me estaba volviendo loca.

- Mimi... - decía con voz ronca.

- Shh, tranquila, no tenemos prisa amor - me susurraba y a mi me ponía aún peor.

Besó el interior de mis muslos y con su lengua recorrió los pliegues de mi sexo, se recreó bastante en la zona encendiendome aún más de lo que estaba.

Somewhere only we know✨ // warmiUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum