ƁƦ | ❝Nada es más doloroso para la mente humana que un gran y repentino cambio❞
Flashpoint ha desafiado las reglas de la realidad, creando un mundo donde la magia sólo se ve opacada por la maldad que ésta trae consigo.
Camila Rojas, una joven perio...
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Un nuevo amanecer, un nuevo día en Central City. De hecho, es más que eso, porque mientras para el 98% de la población es un día cualquiera, para nuestro querido Barry Allen es su primer día de regreso a su línea temporal "original" —porque para el final del día, descubriría que el cambio de Wally West no sería el único en éste nuevo mundo—.
Barry había despertado con una alegría poco usual, bueno, sobretodo después de los acontecimientos vividos en esa línea temporal donde sus padres estaban vivos... (Tiene que encontrar un nombre más corto para eso, sí. Aunque realmente lo que más quiere, es olvidarlo y enfocarse en su verdadera vida). Como sea, a pesar de aquella felicidad, no podía quitarse de encima la sorpresa de encontrase con un Wally... diferente. Por decir menos.
Durante toda la noche se esforzó en no preguntar cómo es que él es parte de los West en este mundo, pero eso no evitó que de vez en cuando le diera una que otra mirada, analizándolo.
En ese rato pudo darse cuenta que tiene algo de la personalidad del Wally que recuerda, así como sus gustos. Pero ese no es él. No lo es y no puede hacer nada para cambiarlo.
Por más que quiera ver a Joe con su verdadero hijo, o a Iris con su hermano, no puede cambiar las cosas una vez más. O entonces los resultados serían aún peores.
Será difícil, y doloroso, pero no puede hacer nada más que aceptarlo y tratar de entablar una relación de hermandad con él, que realmente parece verlo como un hermano.
—Buenos días, papá, Barry —la voz del pelirrojo lo saca de sus pensamientos, y lo ve bajar las escaleras hasta llegar al comedor, donde se encuentra con Joe.
—Buenos días, hijo —regresa Joe, mientras que el castaño ladea su cabeza en modo de saludo—. Hoy tendrás que irte solo a la universidad, porque nosotros tenemos que estar en media hora en el precinto.
La mención de la facultad llama la atención de Barry, por lo que se encuentra preguntando antes de que Wally pueda decir algo:
—Oh, ¿sigues interesado en la mecánica?
—Por supuesto —contesta enseguida el pelirrojo, pero frunce el ceño un segundo después—. Ayer te pedí ayuda con mi proyecto final, ¿ya lo olvidaste?
—Oh, no, yo... —Barry se atraganta con su café, por lo que tiene un momento para pensar en lo siguiente que dirá mientras se recupera—. Sólo tengo un caso en la cabeza que me ha tenido distraído este tiempo. Pero recuérdame de qué se trata y claro que te ayudo.
—Bueno, chicos, tendrá que ser después —Joe le da un último sorbo a su café y se levanta para ponerse su saco—. Ya tenemos que irnos. Y por primera vez, lo haremos a tiempo. ¿Puedes creer que ni siquiera tuve que despertar a tu hermano, Wally?
