Cuarentena: aislamiento que, por cualquier motivo, se impone a una persona.
Normalmente se relaciona con algo negativo, pero ¿y si es la única forma de conocer alguien destinado a cambiar tu futuro?
Natalia se levanta contenta, algo extraño en un martes y algo aún más extraño en confinamiento, puede que otra persona negase cualquier tipo de relación con cierta desconocida que en los últimos días visita con frecuencia sus pensamientos, pero ella no. Si algo había aprendido durante su adolescencia era a ser principalmente realista, aquello le había servido para superar su "gran amor de instituto", una chica heterobásica que compaginaba a partes iguales la belleza y la ausencia de neuronas; para negarse a estudiar derecho, consciente de que jamás trabajaría de algo que la horrorizaba por mucha seguridad económica que aquello fuese a proporcionarle; y, sobre todo, para mantener los pies en la tierra cuando sus canciones y sus entrevistas habían empezado a sonar en las televisiones y las radios.
Aquella consciencia de lo que la rodeaba, que le indicaba inequivocamente que debía haber algún tipo de interés por parte de aquella cocinera desconocida, sumada a una repentina confianza en sus capacidades de conquista, hacen que se decida a escribir a la desconocida antes, si quiera, de salir de la cama.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Espera un par de minutos por si la otra contestase, pero, al no recibir respuesta, se levanta para hacer el desayuno. Pasa un par de horas componiendo y tonteando con el piano mientras hace tiempo hasta la video llamada familiar a las 13:30h. Sus padres, sus hermanos y varios de sus tíos han quedado para tomar unas cervezas juntos antes de comer, algo que era tradición en su familia los fines de semana, pero bueno, en cuarentena daba un poco igual que fuese martes.
- Natalia, hija, ¿estás comiendo bien? pareces más delgada – pregunta la madre.
- Claro, mamá, no te preocupes – responde con una sonrisa – De hecho, estoy aprendiendo recetas nuevas con esto del aislamiento.
- Sí, ya te vimos en Instagram, ¿qué es eso de comer coliflor, tía?, ¿qué trauma tienes? – bromea su hermano.
- Pufff, pues me quedó riquísima, he comprado otra y todo – responde sin dejar de sonreír – dadme un momento, que creo que me están escribiendo por WhatsApp.
Preocupada por si en el estudio estuviesen intentando contactar con ella, ya que tiene silenciados a casi todos los contactos para evitar que la interrumpan en sus "momentos creativos", la morena busca entre las diferentes conversaciones hasta llegar a la más reciente.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
