*Esta fue mi primera historia, así que cuidado con el cringe :) *
Bella Hargrove, la chica nueva en el instituto de Hawkins.
Al contrario que su hermano, Billy Hargrove, siempre pasaba desapercibida, igual que su hermanastra Max Mayfield. Pero cier...
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Después del gran susto que nos llevamos y de que Once nos salvara, nos levantamos de nuestro escondite y miramos hacia dónde estaba el resto de grupo.
Llevábamos demasiado tiempo separados, sin saber que había sido los unos de los otros, pero volver a verlos me relajé al igual que ellos sobre todo al ver que Max estaba viva y entera.
No tardaron mucho en bajar hacia nosotros, y en cuanto lo hicieron me dirigí directamente a Max.
—¿Estas bien? —pregunté apretándola hacía mi cuerpo.
—Sí, ¿y tú? —Me miró.
—Yo estoy bien. ¿Has visto a Billy? —pregunté preocupada.
—Sí, sobre eso... No hay buenas noticias. Esta vez es él al que ha poseído el Azotamentes.
Suspiré. Lo ocurrido el año pasado volvía a ocurrir de alguna manera
—Pudimos salvar a Will, lo haremos también con Billy, no te preocupes. —Pasé mis manos por mi pelo mientras que la niña asentía con la cabeza insegura.
Me separé de mi hermana y me giré hacia el resto del grupo, que estaban abrazándose. Hacía tanto tiempo que no les veía... No sabía en qué habían estado metidos, pero si lo que Max había dicho era cierto, no podía ser algo bueno.
Robin estaba flipando por los poderes de Once, ya que nunca había visto a la niña en acción, y aunque le parecía un poco raro se lo creyó.
Todos estábamos muy confusos, y por eso no dejábamos de hacer preguntas, que quién era Once, quien Robin, que hacíamos allí... pero Once nos paró, ya que se había alejado del grupo sin darnos cuenta y se desmayó.
Todo el mundo se dirigió a ella, llamando su nombre y esperando que contestara, pero ella no hablaba. Mike no dejaba de preguntarle qué le pasaba.
—Está demasiado cansada, no le queda energía —dije, ya que lo sabía porque la conocía demasiado bien y ella misma me dijo una vez que cuando gastaba mucha energía se mareaba.
Pensé que estaba muy cansada, pero me equivocaba. Once tenía una inmensa herida en la pierna, era demasiado grande y tenía muy mala pinta, pero lo peor era que se movía.
—¿Que narices es eso? —pregunté asustada y confundida a la vez.
—El Azotamentes le atacó —me contestó Max.
El hermano de Will, Jonathan, tuvo una idea, y se levantó corriendo a buscar algo con lo que ayudar a la chica. En tan solo un minuto el chico volvió, con un cuchillo caliente en la mano y tras ordenarnos que sujetaramos a la chica, se dispuso a hacerle un corte en la pierna.
Ella no paraba de gritar, y los demás soltaban quejidos. No era una vista demasiado bonita, de hecho daba mucho asco, y aunque intentaba agarrar a la chica, no podía evitar apartar la mirada y esconderme en el pecho de Steve.
Once gritó:
—¡Para! Puedo hacerlo.
Al principio no nos convenció a ninguno, pero con verla quitarse aquella cosa nos valió. De hecho, sus poderes eran tan fuertes que rompió la cristalera que estaba detrás nuestro. Para evitar que me cortará, Steve hizo de escudo.
—Gracias —le susurré.
Me dedicó una sonrisa, pero después se hizo el duro, se puso serio y me apartó la mirada. Mientras tanto, Once consiguió deshacerse de aquella cosa y tirarla muy lejos.
Antes de que aquella parte del Azotamentes pudiera huir por alguna rejilla para unirse con su otra parte, Hopper apareció, junto a la madre de Will y un hombre que no conocía, y pisó aquel bicho, evitando que se moviera.
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¡Hola! Otro capítulo corto, lo siento :( Me está costando mucho esto de escribir con las clases online, pero ya queda menos y podré escribir mucho más. Mientras tanto podéis leer otra de mis novelas, se llama "Diario de un corazón roto". Si la queréis está en mi perfil, además, es cortita. Si la leéis decidme que os parece, me encantaría conocer vuestra opinión.
