𝒍𝒐𝒗𝒆𝒍𝒚 𝒄𝒉𝒂𝒏𝒚𝒆𝒐𝒍 ➳ chanbaek

18.

El día deslumbró con sus rayos de sol y casi buen clima, pero Chanyeol seguía tan grisáceo y en la penumbra como el anterior.

Baekhyun seguía sin aparecer, sin contestar sus llamadas y mensajes, sin estar en su departamento. Él asistió a la escuela con la esperanza de verlo, pero tampoco lo vio ese día. Se sentía abatido, no había prestado atención a sus clases, no tenía apetito y su cabeza dolía mucho.

Se encaminó por el pasillo hacia el baño, escuchando las risas y el parloteo a unos metros de él. Un grupo de tres chicos caminaban en dirección contraria conversando a un tono alto.

—Ah, eres un pesado.

—Cállate, por tu culpa nos enviaron a detención.

—¡Yo no fui! ¡Eso fue culpa de Jongin!

—Deja de victimizarte, idiota —se quejó, pasando por el lado de Chanyeol.

Este frunció el ceño. Esa voz, ese nombre...

"Deberíamos irnos, Jong"

Jong.

Jongin.

Se detuvo y se volteó viendo a los chicos alejarse a paso lento. Entonces caminó hacia ellos y tocó el hombro del más alto de los tres, el que supuso que era dueño de aquel nombre. Este, de piel trigueña y labios gruesos lo miró con las cejas fruncidas al igual que los otros dos.

—¿Huh? ¿Quién eres?

—¿Dónde está Baekhyun?

El otro lo miró confundido totalmente y luego, se echó a reír junto a sus amigos.

Definitivamente era él. Esa risas las reconocía de esa vez del callejón.

—No tengo idea de lo que hablas —dijo simplemente, girando sobre sus propios pies y comenzando a caminar de nuevo.

Pero la mano de Chanyeol se enredó fuertemente en su muñeca, impidiéndole avanzar. Jongin lo miró incrédulo.

—¿Qué diablos?

—Sé que ustedes lo golpearon la última vez en ese callejón —dijo con molestia mientras su mano temblaba sujetando al otro chico —Entonces dime dónde está y no llamaré a la policía.

Los tres lo miraron divertidos, incrédulos.

—Si no cierras tu boca entonces quizás nos divertiremos contigo, loco bastardo —se burló.

—Estoy seguro que ustedes le hicieron algo, yo sé que ustedes...

Jongin lo acorraló contra los casilleros y estampó su mano justo al lado de su cabeza.

—Eres gracioso, pero escucha, imbécil —soltó con seriedad y el rostro molesto junto a una mueca —No tenemos idea de dónde está ese marica, así que deja de involucrarnos, ¿bien? De todos modos, ¿a quién carajos le importa si desaparece para siempre o algo como eso? Es solo un pobre diablo huérfano —escupió burlonamente —A nadie le importa ese marica idiota.

Las cejas fruncidas, los labios apretados y el rostro rojo de Chanyeol al escuchar cada palabra cargada de odio y burla. Se sintió enfermo, tanto que se atrevió a levantar su mano dispuesto a lanzar un torpe golpe, pero esta fue sujetada.

Miró a quien lo detuvo, Yixing tenía la vista clavada en Jongin.

—Aléjate de mi amigo.

El chico de piel trigueña lo miró divertido y rió, de todos modos obedeciendo.

—Ah~ no sabía que ahora te juntabas con perdedores como este.

—El profesor venía detrás de mí. Deja de crear problemas y vete.