La castaña lo voltea a mirar con sus labios fruncidos, confundida y molesta.
-¿Quién es ella?-
El pelinegro suspira, girando su cabeza para ver, a lo lejos, la chica que reía y saltaba por todo el lugar.
-Ella es Dagger...la que lo cambió todo-
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Al aquellas personas desaparer, el miedo solo se intensificó aún más en New York.
Pero cuando ellos volvieron a Hawkins...no había manera de describir lo alterados, nerviosos y asustados que estaban todos, luego de haber vivido lo que vivieron.
Aparecieron en la residencia Mitchell Whistle, aún protegida por los fuertes poderes de Dagger. Aunque, en estos momentos, la fuerza no era lo que definía su expresión.
Aún de rodillas en el suelo, y aún con la cara llena de sangre, Camila empezó a levantarse de una débil forma, mientras los miedosos ojos de todos estaban sobre ella, confundidos.
Con la poca valentía que le quedaba, alzó la mirada hacia ellos, encontrándose con lo aterrados y preocupados que estaban, viéndola por igual.
La rubia comenzó a ponerse de pie, retrocediendo en dirección al segundo piso. Mike dio un respigno notando esto, dio un paso al frente.
-¡Camila, espe-
Nisiquiera pudo acabar su frase, cuando la ojiverde se volteó y subió corriendo las escaleras. Al mismo tiempo, Mike y Emilia corrieron tras ella, pero no pudieron avanzar cuando los escalones empezaron a desaparecer cuando los pies de Dagger dejaban de tocarlos.
Pocos segundos después las escaleras ae habían ido por completo, dejando a todos estancados en el primer piso. Mientras que la rubia responsable de aquello corrió por el pasillo hasta llegar a su habitación.
Mike curva sus sudadas cejas, abriendo de más sus llorosos ojos viendo por donde ella se había ido.
La residencia se quedó en total silencio, uno muy desesperante.
Nadie dijo nada, hasta que la memte de Charlie recordó a varias personas. Y, con gran pesar, su rasposa voz se hace presentd.
-Los demás...siguen en Rusia-susurró con su vista baja, apenas parpadeando.
-¡No, no!-el grito de Mike sobresaltó a todos, sorprendiéndolos y dirigiendo sus ojos al nervioso muchacho-¡Qui-quiero saber qué fue lo que pasó, y quién es Ha-Harvey!-exigió firme, pero al final su voz se quebró de una dolorosa forma.
Emilia suelta un gran suspiro, llamando la atención del pelinegro. Ella lo observó con total pena.
-No me corresponde a mi contarte eso...-negó con su cabeza en un bajo murmuro.
Esa frase hizo que una presión más fuerte apareciera en sus pechos, preocupándolos más. Mike comprime el aire en su interior, volteando a ver a Charlie, quien se rompió al ver la triste mirada del novio de su hermana.
El mayor de los Whistle dirigió sus apenados ojos a Emilia, y esta movió la cabeza con evidente duda en sus ojos, mirándolo también. Los demás notaron aquella mirada.
-¡Vamos!-exige un inisistente Dustin abriendo sus brazos a cada lado de su cuerpo.
-Tenemos derecho a saber la verdad-habló Lucas con las cejas alzadas en dirección a ambos familiares.
