I really need you tonight. [Frerard]

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Frank sostuvo su chaqueta contra su pecho, casi llegaban las ocho de la noche y él se encontraba en el umbral de la puerta del pelirrojo. Habían terminado ya todo el trabajo que significaba teñirse, y finalmente Gerard disfrutaba de su cabello rojo brillante.

—¿Estás seguro de que no quieres quedarte a cenar?—insistía el mayor, mostrando su sonrisa encantadora y sumamente persuasiva, admirando los ojos del castaño fijamente—, no puedo decirte que voy a cocinar algo delicioso porque apenas puedo hacer una hamburguesa, pero quiero que te quedes.

Frank desvió su mirada y la paseó por varios puntos, hasta mirar sus pies y dudar un poco sobre su decisión.

—En realidad tampoco sé hacer hamburguesas, ¿delivery?—el castaño sonrió y asintió, sin poder resistirse a él.

No era difícil descubrir que con tan solo nombrar a Gerard, a Frank le aparecían corazoncitos en los ojos. Y no era su culpa, muchas personas sentían lo mismo, aunque ninguna tenía la posibilidad de estar tan cerca del pelirrojo.

Gerard se lanzó al sillón con su iPhone en la mano, buscando alguna aplicación para chequear cuáles eran los restaurantes a los que podían pedir.

—¿Te gusta el sushi, no?

—No como pescado.

—¿Qué dieta es esa?—indaga inmediatamente el contrario, viendo al contrario sentarse tímidamente junto a él.

—Solo soy vegano—rió y el pelirrojo mencionó un simple "aah", buscando algo en la aplicación que se acomodara a eso.

***

Pasaron extensos minutos en la sala, entre charlas y entretenidas anécdotas, con las que poco a poco se conocían mejor. Todo iba normal, hasta que a Gerard se le ocurrió enseñarle su clóset, con la fantástica idea de atender al delivery con vestidos y zapatos muy extravagantes, parecía algo hilarante y gracioso, así que Frank accedió.

—Creo que es un poco largo—mencionó riendo el castaño, observando la tela completamente llena de volados y pedrería más que rozando el suelo—¿no?

Gerard se giró, y observó el vestido de color marfil que tenía puesto el contrario. Le pareció muy gracioso de esa manera, y aún más porque aún tenía una camiseta gris debajo del vestido.

—¿El vestido es muy largo o tú no eres muy alto?

—Muy gracioso, ¿prefieres los altos?—el castaño mencionó aquello como una broma que le haría a cualquiera, pero se sintió incómodo porque le gustaba un poco el contrario, y mencionar cualquier cosa al menos un poco insinuante le ponía las mejillas color carmesí.

"Oh" pensó el mayor, aunque sólo rió ante ese comentario.

Continuaron poniéndose los vestidos y las prendas que Gerard apenas usaba, pero eran muy llamativas. Parecían dos niños jugando. Realmente no era extraño ver al pelirrojo con un tipo de vestimenta poco común, por lo que tal vez todo allí le sentaba bien y para nada se veía raro, pero en opinión de Frank, él mismo se veía ridículo.

—Oye, mira, a ti que te gustan las hebillas bonitas—Antes de que pudiera replicar, el pelirrojo tomó su rostro suavemente y movió el cabello de su rostro, ajustandolo con una hebilla cubierta con algunas plumas—, ¿te imaginas así en el atelier?—bromeó, y Frank giró su cabeza para ver su reflejo en el espejo que ocupaba gran parte del clóset (y cabía mencionar que ese clóset era prácticamente una habitación más).

El mayor aún tenía sus manos rozando la piel del castaño, y su respiración parecía haberse detenido por un segundo. ¿Era posible tener una piel tan suave?, no era momento para preguntar cómo se cuidaba su piel, así que solo se dedicó a admirar el cabello recogido con la hebilla y la manera tierna en la que el vestido con el cierre aún a medio subir ajustaba su cuerpo. Si ignoraba un poco el hecho de que llevaba una camiseta debajo, podía ver incluso a una modelo con ese estilo.

Gerard enfriaba las mejillas del contrario con los anillos enormes que tenía puestos, y un sombrero como accesorio adornaba su cabeza, además del abrigo y falda a juego que envolvían su figura de una manera desalineada sobre su ropa de entre casa.

—Creo que recibiría algunas burlas—rió al imaginarlo, pero Gerard no lo hizo, él solo permanecía sosteniendo su rostro y admirando sus ojos. De vez en cuando movía un poco sus dedos para quitar algún mechón del cuadro perfecto que formaba la expresión de Frank, y lo acomodaba detrás de su oreja.

Una tensión inundó la habitación abruptamente, y en menos de un segundo lo único que podían observar eran los labios del contrario. Los centímetros escaseaban, sus respiraciones se aceleraban y sus narices se rozaban delicadamente.

Gerard cerró sus ojos por inercia y apoyó sus labios sobre los contrarios, sintiendo la cálida sensación. Frank movió su boca levemente y comenzó a besarlo, con todo lo que esa palabra significaba. Sus manos descansaban de forma suave en la cintura del pelirrojo, mientras él acunaba su rostro.

El menor sentía las mariposas en el estómago en su máximo esplendor, mientras movía sus labios al compás. La respiración lenta y la calidez en cada uno de los movimientos hacía que detenerse no estuviera en sus planes.

Apenas podían decir que se conocían desde hace un mes, pero la sensación de dulzura y la constante necesidad de tener la atención del contrario los había atrapado.

—Me gustas—murmuró el castaño aún con los ojos cerrados, pensando en la sonrisa adorable del mayor, pero no esperó una respuesta, y solo volvió a besuquearlo justo como lo habían estado haciendo los últimos minutos.

—A mí también me gustas, Frank—respondió, y se quitó el sombrero de su cabeza, para luego deshacer el beso por completo y apoyar su frente en el hombro de su acompañante.

Agradeció poder ocultar al menos un poco su verguenza entre todas las cosas ostentosas de ese lugar, porque no podía creer lo que estaba haciendo.

* * *

Hola! Espero que les haya gustado este capitulo.

Hice este dibujo para el capitulo, espero que tmb les guste 💖, creo q se publica con una calidad horrorosa asiq bueno ahí tienen mi twitter que es "_xCancerx_" y mi Ig (donde dentro de poco voy a publicar dibujos) es "xfranartx"

Bueno basta de spam ❤