*PAUSADA* Las cuatro estaciones: Tiempo (Bilogía #CuatroEstaciones)

Capítulo 33

Elizabeth

Todo había pasado tan rápido, en un segundo estaba disfrutando de la celebración y al siguiente me encontraba en el suelo siendo protegida por el cuerpo de Arthur.

Apenas había logrado escuchar el grito de Derek cuando las bombas comenzaron a estallar, por fortuna cerca de nosotros no cayó ninguna de las esferas, sin embargo, al levantarme con la ayuda de mi esposo, me percaté de que una de las bombas cayó cerca de donde habían estado mis amigas.

Aunque Kristen reaccionó a tiempo creando una pequeña pared de raíces, aquello no evitó que pequeños proyectiles de vidrio la traspasasen y lograsen herir a Samantha y a Matthew.

Miré a mi alrededor, miembros de todas las especies se encontraban heridos; arquerrihus, sirenas, guardianes, cambiantes... Las portadoras y sus guardianes habían sido protegidos por el par de brujas que se encontraban conversando con ellos antes del ataque. Cassius y Ariadne habían creado una barrera alrededor de ellos y de varios más.

Sin embargo, a quien más me interesaba encontrar era a Callum, él se había hecho cargo de mis hijos desde que comenzó la celebración, por lo que necesitaba encontrarlo a toda costa y asegurarme de que los tres estuvieran bien.

—Allá están —Arthur me señaló un rincón del jardín, una pequeña barrera mantenía bajo su protección a Callum y a Nathan, aquel híbrido que últimamente pasaba mucho tiempo con mi hermano; cada uno mantenía a uno de mis hijos entre sus brazos—. Parece que Lydia logró hacer una barrera para ellos —y él tenía razón, la bruja de mirada originalmente oscura, ahora de mirada verdosa, mantenía fija su atención sobre el lugar en donde se encontraban los cuatro.

Soltando un suspiro de alivio, dejé que Arthur me guiase a una zona un tanto alejada, donde después se nos unieron mis amigas con sus antiguos guardianes, al igual que la Madre del Tiempo y Nicholas.

—¿¡Qué demonios está pasando, Hannah!? —Amy parecía alterada mientras ayudaba a Matthew con sus heridas—. ¿Es Stefan quien está haciendo esto?

—¿Quién más sería, Amy? —le respondió James con otra pregunta al mismo tiempo en que dejaba a Samantha sobre una silla, al parecer un fragmento de cristal de tamaño considerablemente grande se había enterrado en su muslo izquierdo—. Aquí la pregunta verdadera es: ¿Acaso no lo viste antes, Hannah? ¿No sabías que mi maldito padre atacaría? —el rubio frunció el ceño al ver la herida que mantenía a su esposa con sangre corriendo por su pierna.

—No es nada, James, solo es un pequeño rasguño —trató de convencerlo ella, por supuesto que falló con el intento.

—Kristen, necesitaré tu ayuda por aquí... —la rubia asintió y se acercó más hacia donde estaban ambos.

—Stefan debe mantener una bruja poderosa de su parte, me ha estado imposibilitando el ver en la línea temporal de él... —respondió la de cabellos oscuros—. No te dije nada porque no te quería angustiar, Anabella y Lydia lo sabían, por lo que ambas estaban tratando de ayudarme con eso, incluso tomé más medidas de protección para hacer del castillo impenetrable, sin embargo, han fallado y eso es lo que no me puedo explicar... ¿Por qué? ¿Cómo es posible? —Hannah parecía estar verdaderamente conmocionada por ello.

Nadie habló por unos segundos que parecieron horas enteras, hasta que vimos como una castaña de vestido verde se acercaba hacia donde nos encontrábamos, pero aquella mujer no venía sola, un Derek que parecía estar en realidad herido estaba siendo ayudado a caminar por ella.

Todos miramos sorprendidos hacia ellos.

—Las nuevas protecciones, las barreras, los hechizos que han puesto no han servido de nada, ya que Stefan ha recibido ayuda desde adentro del castillo... —fue lo primero que dijo Derek al llegar con nosotros, Samantha se levantó de inmediato al notar lo herido que se encontraba su ex-guardián y le cedió la silla en la que había estado sentada, Charlize le ayudó a que se sentara.