Capítulo 3.

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El sexto año finalmente había comenzado. Eso fue lo primero que apareció en la cabeza de Genevieve al escuchar a la Profesora McGonagall asignarles un ensayo para la próxima semana.

-Odio mi vida-suspiró Theo desde su lado.
-No es tan malo-río levemente.

Al terminar la clase y comenzar su período libre, Genevieve fue en camino a la biblioteca, aprovecharía el tiempo para hacer el ensayo lo mas pronto posible y así poder tener mas tiempo libre. Mientras comenzaba la lectura de el primer libro que seleccióno pensaba en cuánto le gustaba estar sola en el enorme lugar, pero eso rápidamente cambió.

-Así que te casarás con mi hermano-escuchó de repente.

Levantó la cabeza y observó a Sirius Black tomar aciento frente a ella. Sirius llevaba el uniforme completamente desacomodado y se inclinaba indiferentemente sobre la silla ante la mirada acusatoria de la señora Pince.

-Así es-respondió y suspiró, sabiendo que tendría que posponer su trabajo para tener esa conversación.
-¿Porque?
-¿Porque?-repitió confundida.
-Hay hombres mejores-respondió.
-Creo que entiendes que no tuve mucho poder en la decisión-rodó sus ojos-y Regulus es un buen hombre.
-Es un niño-río burlonamente.
-¿Y tú no?

Sirius se enderezó en la silla repentinamente y se acercó mas a ella bajando la voz, haciendo notorio que quería hacer de esa conversación algo mas privado.

-No desde que me fui de esa casa, algo que el cobarde de mi hermano no pudo hacer.
-Hay diferentes clases de valentía ¿sabes?-cuestionó-Talvez él fue mas valiente que tú al quedarse en ese lugar a soportar los tratos de sus padres en lugar de huir como tú-dijo mientras sentía como su enojo aumentaba.
-Se quedó ahí porque piensa como ellos, en poco tiempo será un mortífago-respondió.
-No-negó-no lo será, no lo permitiré.
-Cómo si tu tuvieras algún poder sobre él-río-serás su esposa, las esposas no tienen ni voz ni voto y lo sabes.
-Callate Sirius-bajó su voz-Reg es una buena persona y sabe lo que es correcto, talvez no sea el mayor fan de los muggles pero no es un asesino.
-Tu no conoces a mi hermano
-Lo llamas "tu hermano" demasiado para pensar tan mal de él-lo miró fijamente y lo vió retorcerse en su asiento incómodo-Sé que lo quieres Sirius y sé que te preocupas por él-continuó-te prometo que si Regulus se ve obligado a hacer algo que no quiere te lo diré-prometió sintiendo compasión por el chico frente a ella.

Sirius la miró fijamente también y asintió lentanmente antes de volver a abrir la boca para seguir hablando.

-Él nunca te hará feliz-dijo en un tono casi incomprensible.
-Lo seré-respondió-con el tiempo, me enamoraré de él.
-No puedes forzar el amor. Ni tú lo amarás ni él te amará a ti.
-No puedes saber eso-negó sintiéndose asustada ante la idea.

Lo que mas quería era que la conversación que había tenido la anoche anterior con Regulus sea mas que eso, una conversación. Quería que las cosas funcionen y quería tener una vida feliz, cómo Reg también quería.

-Puedes encontrar a alguien mejor-dijo él-que si te ame y que si te merezca.
-¿Alguien como quien Sirius?-río sarcásticamente.
-Alguien como yo.

Genevieve sintió como su cuerpo se estremecía y no respondía a ella, abrió la boca sin saber que decir exactamente pero antes de responder Sirius ya se había levantado de la mesa y se había ido de la biblioteca, dejándola sola otra vez.

Que Sirius tenía sentimientos por ella no era una sorpresa, para nada. Lo que le sorprendía es que aún los tuviera, aún después de haber desaparecido de su vida hace un año cuándo su familia lo desheredó y al mismo tiempo, cualquier oportunidad de un futuro dónde ambos podrían estar juntos había desaparecido.

-Aquí estás-escuchó la inconfundible voz de Lily Evans.
-Te hemos buscado por todos lados-comentó Aria a su lado, mientras ambas chicas se sentaban frente a ella, Lily ocupando la silla dónde Sirius había estado minutos antes.
-Solo quería adelantar algo de trabajo.
-Es el primer día Gigi-se quejó Aria.
-A mi me parece perfecto-intervino la pelirroja-Así estarás libre para ir a Hogsmeade con nosotras.
-¿Ya han publicado las fechas?-frunció el seño sorprendida.
-Aún no-contestó-pero quería que hagamos planes así nada nos impide ir juntas luego, hace tiempo no pasamos tiempo las tres.

La primer semana que Genevieve y Aria habían pasado en Hogwarts se habían mantenido juntas paseando de un lado al otro, conociendo todos los lugares del castillo que pudieran conocer y no pasó tanto tiempo hasta que llegaron a la biblioteca dónde dos niños de segundo año siempre pasaban su tiempo, Lily y el slytherin, Severus Snape.

Severus era amable con ellas pero distante, no confiaba mucho en las personas y si bien Gigi le parecía agradable y a veces la ayudaba en su tarea de posiciones, el aura alborotadora de Aria lo ponía de mal humor. Y como ambas niñas siempre estaban juntas, Severus no había hecho demasiado esfuerzo en formar una amistad con la rubia.

Sin embargo, Lily estaba encantada con ambas, eran las primeras alumnas de Slytherin (además de Snape) que no se alejaban luego de escuchar su apellido. Y había sido la persona que convenció completamente a Genevieve de que sus padres estaban equivocados respecto a lo que le enseñaban a sus hijas.

Agatha ya no estaba en el colegio en ese momento, o dicha amistad jamás habría podido ir a ningún lado. Y Berenedice estaba feliz y ayudaba a Genevieve en todo para que sus padres jamás se enteraran de la relación que ella mantenía con una hija de muggles.

Así las tres niñas se volvieron inseparables y aprovechaban cualquier momento que encontraran para juntarse en secreto y ponerse al día, lo que se volvió aún mas difícil luego de que Aria saliera (involuntariamente) del closet. De hecho, fue a casa de Lily dónde la castaña del grupo escapó el verano siguiente a lo ocurrido, quien aún no estaba lista para enfrentar el rechazo de su familia.

-Solo quieres eso para que James no te invite a salir-río saliendo de sus pensamientos.
-A decir verdad, Potter está muy distinto este año-dijo pensativa.
-Debe haber madurado ahora que lo nombraron premio anual.
-Si-interrumpió Aria-¿porque el viejo Dumby haría eso? ¿creen que se ha vuelto loco?
-¡Aria!-la regañó Lily.

La castaña se limitó a rodar los ojos, sus amigas sabían que ella odiaba los nombres largos y practicamente acortaba cada nombre que escuchaba. Asi fue como Genevieve consigió el apodo de "Gigi" y Cacacillia Hooch de Hufflepuff el apodo de "caca", que hace que la rubia empiece a reír incontrolablemente cada vez que la cruza en los pasillos, Caca no era la mayor fan de Gigi tampoco.

-¿Que te hace pensar que James maduró?-cuestionó Aria ignorando el regaño de su amiga.
-Pues...

Y así las tres se metieron de lleno en una conversación sobre el Gryffindor mientras Genevieve hacía lo posible para olvidar de todo el drama que los hermanos Black estaban causando en su vida y se repetía a si misma las palabras que Agatha le había dirigido aquella noche hace años.
Tenía que alejarse de Sirius.

Ocean Eyes -Regulus Black-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora