Capítulo 2

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A Park Bo gum le encantaba ser el centro de atracción. Para eso vivía. Desde que era niño, siempre había buscado la manera de llamar la atención. Comenzó a caminar antes que los de su misma edad. Aprendió a hablar antes. Y, mientras crecía, también se volvió más alto y más guapo que cualquier otro. Con su cabello obscuro, sus ojos penetrantes y su espalda ancha, era en efecto apuesto. Las chicas lo adoraban; los chicos lo idolatraban. ¿Y Park? Él absorbía toda la atención y se regodeaba en ella.

Sin embargo, existía un límite en la atención que podía obtener al crecer dentro de una pequeña aldea. Y eso lo había irritado. Después de un tiempo, para su gran deleite, Francia se involucró en la guerra. Park vio la guerra no como una oportunidad para defender a su país, sino como una ocasión para ponerse un uniforme elegante y enamorar a las doncellas, lo cual hizo, gustoso. Así, se convirtió en un héroe de guerra certificado. De esto habían pasado ya doce años.

Park Bo gum todavía se ponía su uniforme.

Y todavía se creía el hombre más guapo y masculino de toda la aldea.

- Eres el cazador más hábil de la aldea - prosiguió Lefou. Como Park le lanzó una mirada, de inmediato corrigió-: Quiero decir...del mundo.

- Gracias, LeFou -contestó. Bajo los ojos hacia lo que LeFou había «cazado» (un manojo de vegetales) y levantó una ceja-. Tú no hiciste un mal trabajo -agregó con falsedad.

-Uno de estos días aprenderé a disparar como tú- dijo LeFou, sin percatarse de la burla de Park-. Y a hablar como tú. Y a ser tan alto y guapo como tú.

- Basta, amigo -ordenó Park, fingiendo que no le gustaban los halagos-. Una actitud de triunfo es tan loable como el triunfo mismo.

LeFou ladeó la cabeza, confundido. Abrió la boca para hablar, pero se detuvo cuando vio que Bo gum se erguía aún más en su montura. Los ojos de hombre de cabello oscuro se entrecerraron, como si fuera un lobo acechando a su presa. Al seguir la mirada de Park vio lo que llamaba la atención de su amigo. Allá abajo, Taehyung se abría camino a través de la plaza de la aldea; su pantalón azul pastel intenso, su camisa blanca lucía bien bajo su cabello rosado. Incluso a esa distancia, LeFou notaba que las mejillas de el chico estaban sonrojadas de forma encantadora.

- Míralo LeFou -continuó Bo gum-. Mi futuro esposo. Taehyung es el chico más hermoso de la aldea. Eso lo hace el mejor.

-Pero él es tan culto y tú eres tan...- LeFou se contuvo. Había estado a punto de hacer la única cosa que le enorgullecía nunca hacer: ofender a Bo gum. Rápido, entes de que Park pudiera preguntarse porque había titubeado, terminó su oración-...experimentado.
Bo gum asintió.

-Lo se -coincidió-. Taehyung puede ser tan argumentativo como hermoso.

-¡Exacto!- exclamo LeFou, contento de ver que su amigo hablaba con sensatez-. ¿Quien lo necesita? ¡Nos tienes a nosotros! ¡El Dúo! -Lanzó el apodo casi con ilusión. Cuando regresaron de la guerra (porque desde luego LeFou había ido con su amigo a combatir), el hombrecillo había tratado en vano de hacer que la aldea los llamara el dúo. Pero nunca pegó. Normalmente eran Bo gum y el otro. O, con más frecuencia, solo Park Bo gum.

Absorbo a si mismo, Park apenas registró el anhelo en la voz de su amigo.

-Desde que terminó la guerra, hay algo que he echado de menos -dijo el hombre leonino, mirando todavía a Taehyung -. Y el es el único chico que he conocido que me da esa sensación de...-Park tartamudeó, tratando de encontrar las palabras adecuadas.

-Je ne sais quoi? -terminó LeFou, por Park.
El hombrecillo sabía lo que era tratar de nombrar claro cuando resultaba casi imposible saber de que se trataba. Así era como él se sentía respecto a su amistad con Bo gum.

El Bello y la Bestia ღ KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora