Capitulo 25

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Hola, aqui les dejo un capitulo, Super corto, pero esque es necesario, porque el siguiente es mas largo y necesitaba que las cosas encajaran. Denle amor a este y mas de noche subo el siguiente.

Muchas gracias por leerme


Sakura no había asistido a trabajar durante todo el día en la mansión Uchiha, puesto que Madara se había quedado varias horas en su cuarto de hotel satisfaciendo sus necesidades sexuales. En tan solo un día, la pelirosa experimento de todo tipo de posiciones para incrementar el placer dentro del acto sexual.


Si le preguntaran cómo lo describiría, su respuesta sería "Salvaje", puesto que eso había sido Madara con ella.


Al irse, la pelirosa se metió a la ducha para tratar de quitar todo rastro de él, se miró en el espejo aquellos rasguños que le había dejado en la espalda y abdomen. Su entrepierna le ardía y dolía, Madara no había sido nada delicado a comparación de Sasuke. Con mucha dificultad podía caminar. Su estomago gruño de apetito, su cuerpo le exigía al menos algo de comida, lo único que había estado ingiriendo durante las horas que estuvo con el uchiha, habían sido únicamente vino y tabaco del cigarro. Se vistió con lo mas sencillo que encontró y salió en busca de algo para comer.


La noche caía en Japón, y Sakura rezaba tan solo por echarse algo al estomago e irse a dormir. Por alguna razón no se sentía bien, traía todo el animo por el piso, puesto que comenzó a cargar con el remordimiento del rechazo a Sasuke.


Entro a lo que parecía ser un restaurante pequeño de comida japonesa y mientras esperaba a que le dieran su orden, la pelirosa se veía en el vitral de la entrada. "-Como quisiera estar ahorita con Sarada o con Saíto-" - se dijo así misma.


Mas tarde, en una casa ubicada a unas cuantas cuadras de la Zona rosa, Kurenai se arreglaba para ir a visitar al capo mayor de todo Japón. Hace mas de un año que no veía aquellos ojos que la tuvieron bajo un hechizo de amor durante casi una década. Si por ella fuera nunca volvería a cruzar palabra alguna con él, pero su deseo de ayudar a la pelirosa de ojos verdes, le decía que debía de hacerlo.


Dejo a las chicas en sus lugares de trabajo y le solicito a Kakuzo que le llevara hasta dentro de la zona. Ese tipo era el cobrador de las esquinas y por ende un miembro de confianza dentro de la mafia que lideraba Madara.


La ultima vez que vio al capo mayor, se le fue recordado que evitara acudir al "Beso robado", a excepción de que se tratara de algo de urgencia y necesitara apoyo de algún otro miembro de la mafia. Al perder su exclusividad, ya era tratada como toda una "mujerzuela" mas dentro del lugar, sin embargo uno que otro integrante de alto rango y antigüedad le mantenía respeto. Al llegar al sitio se encamino hacia el área vip y diviso a Madara sentado rodeado de hermosas mujeres que le acompañaban en los tragos. "-Clásico-", se dijo así misma.Paro a un mesero y le quito una copa de champagne mientras seguía caminando hacia su destino.


El hombre alto y moreno inmediatamente la ubico, le dio un trago a su copa, tratando de indagar en su mente el porque se encontraba ahí. La vio subir las escaleras del área VIP y confirmo que era con él el asunto.


-Largo de aquí hermosuras, luego las llamo- Ordeno al momento de mujeres que le rodeaban. Una por una se levanto y se alejo del lugar, mientras Kurenai se plantaba firmemente frente a el mientras le daba un sorbo a su copa.El uchiha la viboreo de pies a cabeza como cada vez que la veía, para el, ella seguía siendo una mujer hermosa, aunque pasaran los años, seguía conservándose muy bien y ese vestido negro se lo afirmaba.

Tu hijo, mi hija (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora