La Luz de los Uchiha

1

Vivir con un vacío y una presión profunda en el pecho se ha vuelto parte de mi rutina. Desde que Sasuke desertó y Naruto se fue con el maestro Jiraiya, me quedé completamente sola y la nostalgia se había convertido en mi mejor amiga. Claro, tenía a Ino y los demás... Pero, jamás podrían llenar el vacío que tengo. Los demás tienen sus equipos, y por ahora, solamente quedaba yo que formaba parte del Equipo 7.

¿Cómo estarás, Sasuke? ¿Seguirás siendo el mismo de siempre?

Los recuerdos del Equipo 7 son la viva prueba que Sasuke existió y que alguna vez, fuimos una familia. Los cuatro juntos.

Sin embargo, no fue tiempo perdido. Tsunade, la legendaria sennin, me sometió a entrenamientos duros y sé que están dando frutos.

Ya no soy la misma niña débil de antes. Soy una ninja médico, con una fuerza asombrosa y percibo chakra mejor que nadie. Quedarme sin hacer nada cuando Naruto entrenaba arduamente y Sasuke —a su manera— también no me haría formar parte del equipo. Es agradable pensar que, a pesar de estar lejos, tenemos a donde regresar.

Quisiera que Sasuke recordara eso.

Estaba organizando un papeleo en el hospital cuando Shikamaru llegó.

—Sakura, Lady Tsunade te llama.

—Oh... Ya veo, ¿vas conmigo?

—Sí, Temari debe de estar llegando.

Lo miré con picardía.

—Temari, ¿eh, Shikamaru? Lo tenías muy guardado.

—No seas tonta, es un fastidio.

—Ajá, sí—reí.

Llegamos con la Quinta Hokage con rapidez.

—¿Me buscaba, Tsunade-sama?

—Por fin, Sakura, necesitaba de tu presencia para una misión. Estos días ha habido un brote de enfermedades en la Aldea, y se nos está acabando las hierbas medicinales que nos ayudan para sus defensas. Necesito que vayas a buscarlas, son estas—me señaló al darme un papel—No debes tener mucho problema. Como ninja médico, debes especializarte también en las plantas.

—De acuerdo, ¿iré sola?

—Claro que no. Irás con un ANBU de raíz. Hay una misión para él en la misma casa del señor feudal—explicó—Tranquila, no pasará nada.

Para que un ANBU de raíz vaya conmigo a misión debe ser algo más que solamente ir por plantas medicinales.

—¿Entonces...?

—Danzou quiere más presencia—rodó los ojos—al menos con estas pequeñas misiones no me reprochará, el ANBU sólo investigará si el señor feudal está exportando plantas ilícitas.

—De acuerdo, mi Lady. Iré a empacar.

Tenía que irme en aproximadamente una hora, no sería una misión lejos ni mucho menos peligrosa. Me fui hacia la puerta de Konoha, esperando a mí acompañante. Divisé a un chico pálido que venía hacía mí, de apariencia se aparecía un poco a Sasuke pero con una vestimenta completamente diferente a la vez. Llevaba un crop top el cual se asomaban sus abdominales. No tenía ni una expresión en su rostro.

—Haruno Sakura, soy el ANBU que te acompañará. Por órdenes superiores, iré sin mi uniforme ANBU—enmarcó una falsa sonrisa—Soy Sai.

—¡Hola! Un gusto—le sonreí dulcemente.

Por alguna razón, su aura me recordaba a Sasuke.

El camino era corto. Recordé la misión de cuando Sasuke y yo vinimos, exactamente a la misma casa.