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      "El hombre enmascarado"

—¡Ya quedó!—avisé a Sasuke, después de rodearlo con vendas y curarlo un poco más. Esta vez sí que quedó afectado.—Ahora recuéstate con lentitud.

Extrañamente, me hizo caso sin titubear.

—Qué terco, Sasuke, te dieron una buena pelea y querías seguir buscando a Itachi. Lo bueno de esto es que vamos a descansar.—Dijo Suigetsu.

—¿Descansar? ¡Si no has hecho más que perder el tiempo, vago!—le gritó Karin.

No pude evitar sonreír y soltar una corta risa. En varias ocasiones, Karin y Suigetsu me recordaban a Naruto y a mí. Pero claro, según ellos ni siquiera se caen bien. No lo creo.

—¿De qué te ríes?—preguntó Sasuke.

—Uh... Nada, recordando un poco el pasado.

Frunció el ceño ligeramente. Su mano rosó la mía, misma que estaba en el suelo al igual que yo.

—Byakugō, ¿cierto?

Asentí con la cabeza.

Te ves muy hermosa—me elogió Sasuke, tomándome por sorpresa, y provocando que mis mejillas se tapizaron de rojo.

—¿A qué viene eso? Nunca me habías dicho aquello—tapé mi cara con una de mis manos, claramente nerviosa, mientas que Sasuke me observaba con una ligera diversión.

Insisto: ¿cómo a estas alturas un simple cumplido puede ponerme así de nerviosa? ¡Compórtate, Sakura!

—Deben ser los medicamentos.

—No te he dado nada.

—Deben ser los medicamentos—insistió.

Sonreí, riendo.

—Lo que digas, Sasuke-kun.

—Tú... Hiciste falta—susurró y desvió la mirada.

—No te entiendo, Sasuke, ¿qué significa eso?—fingí ignorancia, divertida.

—Ya sabes a lo que me refiero...

—Uhm... No lo sé, ¿puedes explicarme?

—Sakura.

—Sigo sin entender...

Trataba de no reír.

—Te extrañé, ¿de acuerdo?—se rindió confesándome aquello.

Reí nerviosa y a la vez con satisfacción. Había conseguido que me dijera tal cosa.

—Yo también te extrañé, Sasuke-kun.

Tomé su mano y digirió su vista hacía a mí, con determinación.

—¿Has considerado mi idea de irnos lejos?—bajó levemente la voz—. Después de cumplir nuestros objetivos, no tengo nada que hacer aquí.

—Es una idea tentadora—admití.—Pronto lo hablaremos, ¿si? Descansa.

A pesar de tener la audiencia de Hebi, decidí plantarle un casto beso en su frente.

Después de cumplir nuestros objetivos. Me estoy replanteando mi venganza. Claro, no puedo negar que un resentimiento y enojo con el viejo decrépito de Danzō. Asesinó a mis padres y pocas veces puedo decirlo en voz alta, pero, ¿asesinarlo me convertiría en lo mismo que él? No le tengo miedo, solamente siento desprecio y repudio hacia él. Pero... Ya no sé lo que está bien o que está mal. Solo tengo que seguir avanzando.

La Luz de los UchihaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora