Un pequeño recuerdo de ti [NAMSEOK]

QUINCE

Hoseok baja del taxi que tomó en el aeropuerto luego de pagar. Hacía un poco de frío, pero era soportable. Miró a su alrededor y con un suspiro pesado caminó hacia el conjunto departamental en el que alquiló una habitación por un buen precio. A Jin no le había costado mucho hacer una reservación en ese lugar porque era un lugar tranquilo donde vivían personas extranjeras.

Era como un barrio lleno de personas de otros países que estaban quedándose allí por trabajo. Cuando llegó al edificio empujó la puerta de cristal y al entrar una mujer de edad avanzada le recibió con una sonrisa. Empezó a hablar en inglés sabiendo que Jin se comunicó en ese idioma para hacer los papeles de arrendamiento.

La señora con una sonrisa le llevó al ascensor mientras le explicaba las reglas del lugar. Subieron al tercer piso y señaló la puerta que estaba frente a ellos. Salieron del artefacto y la mujer abrió la puerta con las llaves que sacó de su bolsillo.

-El cuarto tiene un baño, una cocina, un dormitorio y una pequeña sala donde está también el comedor. Tiene buena vista a un parque tranquilo y lleno de vegetación.

-Es genial. Voy a instalarme hoy.

-Las llaves son todas suyas. Yo no tengo ninguna copia y hasta puede hacer cambiar la cerradura. Vivo en el primer piso, cuarto número tres por si necesitas algo.

-Muchas gracias. Cualquier cosa le informaré- Hoseok despide a la señora y suspira al ver aquel pequeño departamento blanco y solitario. Odiaba la soledad, pero no tenía otra opción que acostumbrarse a ella.

Caminó por el lugar conociéndolo mejor y era mil veces mejor que aquel departamento en el que vivió con Jin por pocos meses.

Llegó a la habitación y estaba vacía. No había ningún mueble ni una cama en la que dormir. –Tengo que ir a comprar una esterilla y colchas hasta mientras

Camina hacia el baño y le gustó que tuviera una tina. Era un baño cómodo para él solo. Una regadera, una tina, el inodoro y lavabo, un mueble para toallas y otro para los productos de aseo, un espejo completo y eso era todo lo que tenía, era pequeño, pero muy equipado y distribuido.

–No te vas a quedar por mucho tiempo. Y si hablas con Jin él podrá darte dinero si te hace falta para la comida. Tengo que administrar mi dinero para no recurrir a Jin tan pronto.

La cocina era pequeña pero muy linda, estaba pintada de un verde pastel y los muebles tenían mariposas pintadas de distintos colores. –Es linda. No cambiaré nada de ella.

Por suerte la sala tenía muebles que venían con la casa porque los antiguos dueños los dejaron al mudarse a un lugar mejor.

También tenía un comedor de cuatro personas y todo estaba en buenas condiciones. Hasta parecían recién comprados y eso le quitaría el peso de tener que comprar algo para llenar el lugar.

Con un suspiro salió de su departamento para ir a comprar algo de ropa abrigada y comida en algún restaurante. No tenía energía para hacer algo y tampoco ollas o platos.

Estaba obligado a comprar comida por algún lugar de la calle. Cuando salió del edificio se encontró con bastantes personas extranjeras allí que hablaban en sus idiomas natales.

Era como en Estados Unidos, allí había el barrio chino y este lugar en Noruega era como ese pero lleno de gente de distintos países, sería algo como el barrio de extranjeros. Lo que también era bueno porque podría hablar en inglés con ellos si necesitaba algo del lugar. No se vería obligado a hablar el idioma del que no sabía nada.

No fue tan lejos cuando encontró una tienda de ropa, se veía lindo el lugar y entró porque no quería pasar más frío. –Hola. ¿En qué puedo ayudarte?

-Necesito pantalones y poleras- a pesar de que el clima era frío, dependía de la zona en la que te encontrabas y la estación. Ahora siendo septiembre el aire es fresco y los días son más cortos. La chica que le atendió se fue a la parte trasera de la tienda y luego regresó con lo pedido.

Hoseok se probó varios pantalones y escogió cuatro, luego se probó las poleras y se llevó cinco. También compró ropa interior y luego salió del lugar para ir a una farmacia y comprar útiles de limpieza. Fue también por cobijas, almohadas, toallas y esterillas de gimnasia.

En el camino vio utensilios de cocina a buen precio y compró algunos para poder cocinar en su departamento y no comer tanta comida de la calle.

Con dificultad pudo regresar a su departamento donde dejó todas las cosas tiradas en el suelo de la entrada.

Estaba sudando por el esfuerzo de cargar tantas cosas y tratar de que la comida que compró no se cayera o cualquier otra cosa que tenía. Se sentó en el sillón para recuperar la energía y el aliento.

No podía creer que tuviera que volver a iniciar su vida desde cero, una vez más en un lugar donde no conocía a alguien. Siquiera antes tuvo a Jin hasta que fue reclutado por el gobierno, luego conoció a Siwon y le dio trabajo en su bufete de abogados y más tarde conoció a Namjoon.

Ahora lo más cercano a un amigo era la dueña del edificio y solo debía buscarla cuando necesitara algo del departamento o cuando debía pagarle el arriendo.

Ya descansado empezó a mover las cosas al lugar que correspondía cada una. Las bolsas de comida las dejó en la mesa, las pocas ollas, vasos y platos junto con los cubiertos en la cocina.

Las cobijas, la almohada y las esterillas las dejó en el piso de la habitación y empezó a acomodarlas para formar una superficie acolchada y luego tendió la cobija y luego la colcha sobre ellas. Por último puso la almohada y ya tenía una cama improvisada.

Ya era de noche cuando terminó de arreglar la poca ropa que compró y los utensilios de cocina, un sartén, una olla, dos platos, dos vasos, dos cucharas, un cuchillo y una tabla de picar. Era lo que mejor precio tenía y estaban de promoción.

Luego fue a la mesa y sacando la comida de la bolsa y sus envases de plástico empezó a comer en un profundo silencio. Ni siquiera había sonido de automóviles o personas conversando fuera del edificio. Todo estaba en calma y sin ruido, algo que le desesperaba demasiado.

Cuando terminó llevó las cosas de aseo que compró, se duchó, se lavó la boca y poniéndose su bóxer cuando se secó bien su cuerpo y cabello se fue a su imitación de cama y se acostó allí.

Todo estaba oscuro, solitario y vacío. Ni siquiera intentó evitar llorar, se dejó derrumbar en aquella soledad como hace mucho tiempo no lo hacía. Lloró tanto que su cuerpo cayó en un profundo sueño luego de horas llenas de tristeza y arrepentimiento.

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Las letras en cursiva es porque hablan en inglés. Lo que va a ser todo el tiempo de esta manera. 

Espero les guste la historia =)

Bye Bye~