DOS

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Dos años un mes atrás

Un joven de diecisiete años bajaba corriendo las gradas del edificio del juzgado. El ascensor estaba muy lleno y tenía que ir a dejar algunas carpetas llenas de papales al dueño de una empresa tecnológica. Su jefe (amigo) se lo pidió ya que él no podía porque tenía que entrar a un juicio y no tenía tiempo.

Siwon le dijo que un hombre con terno y lentes estaría esperando en la sala de espera por aquellas carpetas y que se apresurara para que no tuviese que esperar mucho. Hoseok bajaba agitado y cuando llegó al primer piso no se detuvo, se cruzó con algunos trabajadores y les fue saludando al apuro.

Cruzó el primer piso y abrió la puerta de la sala de espera con rapidez, pero al tener un montón de carpetas que tapaban su vista no vio las cuatro gradas que dividían la entrada y el piso alfombrado donde estaba el señor. –Buenos días, se- eso fue lo único que dijo ya que gritó al no sentir más piso y cayó estrepitosamente al suelo de costado. Las carpetas salieron disparadas a los lados y algunos papeles por igual.

-¿Estás bien?

-Sí. Lo siento mucho por esto. Los recogeré ahora mismo.

Hoseok se levantó avergonzado rápidamente y comenzó a recoger las carpetas y papeles. –No te preocupes. Yo te ayudo.

El hombre de traje y lentes se hincó para ayudarlo en su tarea y Hoseok no pudo ni verle a la cara por lo avergonzado que estaba. Minutos después ya todo estaba en orden y Hoseok se disculpaba con el señor por el accidente que tuvo.

-Ya te dije que no te preocupes, fue un accidente. ¿Cómo te llamas?

-Soy Hoseok y es un gusto conocerle- lo dice muy nervioso y aun sin mirarle a la cara, con la vista siempre a sus manos.

-No te voy a hacer nada malo, no tienes que tenerme miedo, Hoseok. Soy Namjoon y me gustaría que me vieras a la cara mientras hablamos.

-Lo siento. No quise hacerle pensar eso. Solo estoy avergonzado y no suelo mirar a la cara a nadie.

-Ya no te disculpes y no pasa nada. Pues en mi caso es muy importante que alguien me mire. Ya te dije que no soy malo.

Hoseok asiente tímido y rápidamente alza su cabeza para ver al hombre alto. Se sonroja al verle tan cerca y darse cuenta de lo guapo que es. Hoseok se quedó en un trance mientras miraba a su mayor a la cara. Se había enamorado a primera vista y el tenerlo tan cerca le provocó sensaciones en su cuerpo que jamás había sentido en su vida.

Namjoon pasó por lo mismo, le llenó de ternura ver a aquel chico mirarle con sus ojitos brillantes y su expresión de adoración. Se quedaron viéndose por segundos que parecieron minutos hasta que Hoseok se sonrojó hasta las orejas y apartó su mirada con rapidez.

-Lo siento, me distraje mucho.

-No sigas disculpándote. ¿Cuántos años tienes?

-Tengo diecisiete.

-Eres muy joven. No quiero meterme en algo privado pero tengo curiosidad al ver que estás trabajando aquí.

-Solo ayudo a Siwon hyung con cosas pequeñas. Me tengo que ir. Una vez más lo siento por todo el desorden- hace una reverencia y casi sale corriendo de aquella sala. Namjoon sonrió al verle irse tímido y sabía que esa no sería la última vez que vería a aquel chico pelinegro.

Namjoon miró las carpetas una vez más y con una sonrisa salió del edificio y fue a su auto donde le esperaba el chofer junto a su asistente. –La felicidad que emana tu cuerpo es única, qué pasó con Siwon que te tiene con esa sonrisa.

-Con Siwon no pasó nada. Fue con su ayudante.

-En todos los años que he trabajado contigo nunca te he visto así de feliz.

-Yoongi, nunca he sido tan feliz como ahora.

(...)

Namjoon estaba esperando una oportunidad para ir de nuevo al juzgado y encontrarse con el pequeño Hoseok. No fue hasta una semana después que tuvo que ir a cerrar un contrato con Siwon que lo vio de nuevo en la oficina de su amigo.

Cuando llegó junto a Yoongi toda su alegría volvió al verle arreglando algunos papeles en la pequeña sala que todas las oficinas tenían. –Hola.

-Namjoon, es un gusto verte.

El nombrado le dio la mano y lo saludó. Fijó su mirada en Hoseok y el menor se levantó del sillón para hacerle una reverencia y saludarle, le devolvió el saludo respetuoso y él se sentó de nuevo para seguir con su trabajo. Se obligó a apartar su mirada y se sentó en una de las sillas del escritorio.

(...)

-Eso es todo. Ya sabes todo lo que tienes que hacer con aquel contrato, dile los cambios que vas a hacer y todo irá bien.

-Muchas gracias, Siwon. Te enviaré una copia por fax.

-Claro y no es nada. Hoseok, ve por las copias de Wheein donde Jessi y acompaña a mis dos amigos a su auto.

Namjoon no se iba a negar para nada a eso, estaba agradecido con su amigo y le sonrío al chico para darle confianza. Miró a Siwon con su carita roja y luego dijo muy bajito que debían salir los tres. Namjoon con una sonrisa salió de la oficina y luego se puso a lado de Hoseok ignorando la mirada analizadora de Yoongi.

-¿Qué tal te está yendo?- pregunta Namjoon y Hoseok le mira muy tímido.

-Muy bien, gracias por preguntar.

-No es nada, Hoseok.

Cuando salieron del edificio Hoseok miró hacia el otro lado de la calle y sus ojitos y boquita se abrieron en sorpresa. Namjoon vio hacia donde veía pero no supo lo que pasaba.

-¿Qué pasó?

-Jessi se está yendo. Lamento esto- Hoseok salió corriendo desesperado y por ello no se dio cuenta del camión que iba con rapidez. Namjoon salió corriendo cuando se dio cuenta y cuando Hoseok pisó el asfalto el camión estaba a centímetros suyo y el mayor con rapidez lo atrajo hacia la vereda y por la fuerza que aplicó ambos cayeron al suelo.

Todos los que presenciaron eso se quedaron quietos por segundos al ver que el camión siguió con su camino y los dos hombres estaban en el piso. Yoongi casi muere al ver a su amigo y jefe exponerse ante tal peligro por salvar al chico. De lo pálido que era naturalmente ahora parecía que iba a desparecer.

Fue corriendo hacia su jefe que estaba revisando a Hoseok mientras le regañaba por su tonto actuar. Hoseok estaba muy quieto y sin color en su piel acaramelada. Casi muere por un descuido muy tonto, casi le pisa un camión que ni siquiera se dio cuenta de él atravesándose en su camino. Comenzó a llorar como un niño y Namjoon se alarmó por ello.

Le abrazó para darle confort mientras seguían en el piso rodeado de personas, Yoongi llegó hasta ellos y les ayudó a ponerse de pie mientras les decía a las personas que ya se podían ir y que todo estaba bien. Si bien Namjoon quería abrazar al chico no era de esta manera, no mientras lloraba porque un camión casi lo mata.

-Todo está bien, Hoseok. No te preocupes, vamos a un lugar para que te relajes. Yoongi, dile a Siwon lo sucedido y que venga al pequeño parque de la esquina.

Yoongi asintió y fue de regreso hacia la oficina mientras Namjoon caminaba con Hoseok entre sus brazos hacia el parque.

Un pequeño recuerdo de ti [NAMSEOK]Where stories live. Discover now