Hermanos Grey

Capítulo 5

Samuel P.O.V

No había dejado de pensar en Phoebe. Desde que la vi bailando me encantó, y desde luego no iba a dejar que un idiota la besara.

Suspiré, ¿ Qué tenían esos ojos grises que no me dejaban en paz?

Desde que la vi mi miembro saltó debajo de mi pantalón, y no sirvió de nada cogerla de la mano o de la cintura. Mi cuerpo pedía más de ella, pero fue cuando su perfecto trasero rozó con mi erección que no aguante más, la quería tomar en ese momento. Fue una dulce tortura, pero una tortura a fin de cuentas.

Quise acostarme con cualquier chica, pero no podía, esos ojos me invadían.

Ya la había reconocido, la había visto en fotos con su familia pero no tuve el placer de conocer a esa muchacha tan hermosa. No podía dejar de pensar en su olor, cuando utilice la excusa de susurrarle.

- Phoebe - suspiré.

Theodore P.O.V

Estaba todo un asco había vomitado en mi camisa en pleno camino a la escala. Sophie estaba algo molesta porque me estaba comportando como un inmaduro.

Si papá se enteraba de esto adiós al piso.

Llegamos y me ayudó, no estaba tan ebrio. Era consciente de lo que pasaba, solo me daba vueltas todo.

Me llevó a la antigua habitación de mi papá.

- Quítate la camisa.

Sonreí. Eso me hizo recordar a algo, y cuando la mire supe que ella también lo recordó.

Saqué mi camisa que olía a vómito de alcohol.

- Bien, ahora esperaremos a que los chicos vengan...

No escuché lo demás ya que mi cuerpo involuntariamente se dejó caer en la cama.

******

Un zumbido me despertó. ¿En donde. .

Vi a Sophie dormida a mi lado, era tan linda... Su celular seguía emitiendo ese maldito sonido que me daba dolor de cabeza. Lo cogi.

Sophie
Ya estamos llendo, ahora pasamos por ustedes.
Phoebe x

Quería despertar a Sophie pero verla así me lo impedía.

- So- susurre.

Sophie se removió y abrió sus ojos avellana y los clavo en los míos.

- Phoebe me dice que ya vienen.

Sophie se levantó y yo quise imitarla pero cuando lo hice todo me dio vueltas. Vaya que si me había embriagado.

Sophie me tiró la camisa sin rastros de vómito.

- Gracias - susurre.

Ella encogió los hombros. Algo iba mal con ella. Me paré y me acerque.

- Estas bien?

- ¿¡Así la pasas!?

La miré confundido, no sabia a que se refería.

- Que...

- Te llamó una tal Alondra.

Oh. Ya lo entendía. Pero quien era Alondra?

- No conozco a una...

- Seguro era la chica de la disco- interrumpió- me dijo que se sentía mal porque la habías dejado con ganas y te envío su dirección por si decides darle una visita.