Capítulo 17: Una vista en picada

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—Me decepciona ver qué no está feliz de verme, doctor—dijo el hombre de pie, en el marco del portón, frente a ustedes.

—(Nombre), quédate atrás— dijo John, empujándote ligeramente con su mano detrás de si.
Su expresión era de un rigor que no se podía comparar ni siquiera con la vez que ocurrió el caso de la famosa pintura robada. Estaba asustado, pero también parecía dispuesto a lo que viniera.

Esto te hizo sentir aún más asustada.
Si de verdad era el Moriarty del que había estado hablando, entonces era un hombre capaz de todo con tal de enfrentar un encuentro con Sherlock, pero él ni siquiera estaba presente, de modo que dedujiste que planeaba una trampa, pero ¿De qué tipo?

—Lamento arruinar éste momento tan romántico, me siento terrible por ello— siguió el hombre con un tono de sarcasmo altamente exagerado.
Todo su porte y forma de ser denotaba demencia y falsedad.
—Pero bueno, es que este tipo de cosas no me divierte...es tan absurdo y tan... Aburrido—continuó, mostrando una mueca desproporcionada de disgusto y desviando su mirada hacia tí.

Sentiste que un escalofrío recorrió toda tu espina.

—¿Qué es lo que quieres?— le pregunto John, intentado sonar lo más firme que pudo.— Sherlock no está conmigo, no he sabido de él ¿Qué amerita todo esto?

Moriarty no dijo nada, solo se limitó a intentar disimular una obvia sonrisa  burlona.
Entonces, sacó sus manos que hasta hace un momento tenía dentro de los bolsillos de su pantalón y caminó lentamente más cerca de ustedes, sin prisa, pero haciendo que John intentará retroceder la mayor distancia posible en vano.
Después de todo, el balcón en el que estaban era bastante pequeño y solo tenían entre ustedes a Moriarty y una larga caída.
Te sujetaste del hombro de John, como si tuvieras miedo de alejarte más y que, repentinamente, el hombre te tomara por el brazo e hiciera... Pues cualquier cosa que un villano haría.

—¡Ohhh! El incomparable John Watson— dijo con ahinco Moriarty— El valiente soldado ¿No es tierno ver cómo funciona su pequeño cerebrito?
”La verdad es que no me sorprende que no sepa lo que hago aquí.

Entonces detuvo el paso, quedando a una distancia significativa del rostro de John.
Continuaba con esa extraña expresión Burlona, mientras mecía de un lado a otro la cadera, como un niño emocionado.

—Vamos, intenté adivinar...Le daré una pista.—rió Moriarty.

Entonces, y sin siquiera darles tiempo de reaccionar, introdujo su mano rápidamente en su otro bolsillo del pantalón y, al sacarla, extendió un revolver hacía el rostro de John.
Tu dejaste escapar un grito ahogado, mientras que te aferrabas ahora a la espalda sudorosa de John, temblando y a penas pudiendo ver al hombre en cuestión.

—Estoy aburrido— dijo Moriarty, que hablaba como si de una conversación casual se tratara.— Y, bueno...le aconsejo que no intente quitarmelo.
”El edificio detrás de ustedes tiene a alguien cubriéndome la espalda. Así que si no quiere una bala en su cráneo o en el de su novia, más vale que se comporte, doctor.

John tragó saliva. No dejaba de fruncir el seño e intentar ponerte detrás de si en un vano intento de mantenerte a salvo.

Estaba claro que todo esto no era más que un juego para atraer a Holmes al lugar, que todo giraba entorno a una trampa para él y que ahora estaban todos en peligro.
Seguramente habría enviado un mensaje al detective para que viniera a buscarlo y salvar a su amigo...pero mientras tanto todas estas eran vagas suposiciones que terminaban en la misma incertidumbre de si saldrían con vida o no.

—Vamos...no quiero esperar aquí sin más, doctor— exclamó Moriarty, con tono impaciente al ver que nadie decía nada.— ¿Por qué no...me presenta a su querida amiga?

Caso sin resolver (John Watson x tú)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora