Leyendo: Ashikabi no Shinobi

Capítulo 25

Capítulo 24: Operación de rescate

Mientras preparaban el almuerzo, estaban discutiendo cosas que habían aprendido sobre Higa y se preguntaban cuánto sería cierto. Y si algo de eso lo es, ¿podrían usar eso como chantaje para que él se alejara de todo y tal vez incluso para que Yukari conociera a Shiina antes? Deciden comenzar a rastrear a Shiina tan pronto como regresen y llamar a Yukari, mientras le dicen que es importante. Si pueden mantenerlos en la posada mientras pueden deshacerse de Higa, o al menos obligarlo a retroceder, entonces podrían avanzar un poco con su juego de sekirei. Los ninjas estaban charlando sobre formas de infiltrarse en el edificio e incluso formas de matar sin ser notados. En realidad, fue una conversación bastante interesante. El almuerzo terminó pronto y volvieron a sus asientos, esperando el libro. La voz del capítulo resultó ser Lenard Nimoy, el Spock original en la serie original de Star Trek, así como muchas de sus películas. Otro de mis favoritos.

XoX

Akitsu observó clínicamente cómo todas las lanzas de hielo que había enviado hacia el chico de cabello blanco, Shiina, se derretían y se dispersaban en partículas de agua mucho antes de que pudieran tocarlo. La confusión brilló en sus ojos ante la vista. Esto nunca había sucedido antes. ¿Qué tipo de poder extraño e inusual poseía este chico para que pudiera derretir su hielo tan fácilmente?

Su hielo no era como el hielo normal. Para nada. Como todos los poderes manifestados por Sekirei, su hielo era especial. Ni siquiera el fuego normal podría hacer que su hielo se derrita. Solo había dos formas de que su hielo se dispersara. O tenía que quererlo para hacerlo, o un Sekirei tenía que enfrentarse a su poder con un poder mayor.

Eso era lo que había sucedido aquí. Akitsu podía sentir un extraño poder en el aire, como un extraño zumbido que hacía vibrar las moléculas de oxígeno a su alrededor que hacía que el cabello de la nuca se erizara, podía sentir el uso sobrante de los poderes de Shiina antes de que se desvanecieran lentamente. en la atmósfera. Sin embargo, al mismo tiempo, no podía entender cuáles eran esos poderes.

"Increíble. ¡¿Alguien realmente puede igualar el poder de Akitsu y no tener un solo dígito ?!" Dijo Matsu. "Realmente necesitamos llevarlo a un lugar seguro cuando regresemos".

A pesar de su sorpresa al ver a alguien destruir su hielo sin usar ningún tipo de forma visible de poder Sekirei, la expresión de su rostro no cambió de su expresión normalmente pasiva mientras miraba a la Sekirei mucho más joven con los ojos entrecerrados.

"Por favor, vete", suplicó Shiina, luciendo bastante miserable. Akitsu sintió lástima por el chico. Estaba siendo utilizado por alguien que tenía a su Ashikabi como rehén. No podía empezar a imaginar lo que debía estar pasando. "No quiero pelear contigo, pero si te interpones en mi camino, no tendré más remedio que derrotarte por el bien de mi Ashikabi".

Akitsu podía entender su sentimiento. Luchar por el propio Ashikabi era uno de los propósitos de un Sekirei. Su respeto por el chico aumentó. Todavía...

"No puedo hacer eso", negó con la cabeza hacia él, la escarcha comenzó a formarse a lo largo del suelo mientras más dagas dentadas de hielo aparecían de la nada. "Las órdenes de mi Ashikabi-Sama fueron claras".

Su trabajo era capturar al Sekirei que tenía delante, ileso y aún activo. Su Ashikabi-sama contaba con ella para hacer esto. Le había confiado este trabajo. Y ella lo completaría.

"Ya veo ..." Shiina parecía muy decepcionada por tener que desactivar otro Sekirei, especialmente uno con el que no necesitaba luchar para salvar a su Ashikabi. "En ese caso, también tendré que derrotarte". Después de decir esto, Shiina cargó hacia adelante, su cuerpo cubierto de un aura de color púrpura claro.