Cap. 16

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Entro
-Harry, t/n, que hacen aquí?- pregunto el confundido

-Abuelo lo qué pasa es que estábamos cumplía eso un castigo que nos asignó el profesor Snape y terminamos tarde, teníamos hambre así que vinimos a hacernos algo de comer- respondí yo con Harry a mi lado nervioso

-Puedo probar?- consulto él y nosotros asentimos y metió una cucharada al platillo que habíamos preparado el azabache y yo -Umm curioso, Dauphinoise, esta delicioso, quien lo hizo?

-Lo hizo t/n señor- dijo Potter -Yo solo soy un aprendiz aquí

-Muy buen trabajo, esta delicioso- continuó el dándole otra cucharada -Más les vale volver rápido a sus habitaciones, hablare con sus prefectos para que no los castiguen, ya andan metiéndose en problemas muy seguido- se dio la vuelta -Ah y péinense, pareciera que se hubieran peleado- termino el de decir y se marcho

Harry y yo empezamos a reírnos sonrojados por tal comentario
Terminamos de comer

-Bueno ahora si tenemos que irnos- dije yo levantándome de la mesa

-Tienes razón, ya es tarde- respondió el

Salimos de ahí y me acompaño hasta la puerta de mi sala común

-No hacia falta que me acompañaras Potter, sé el camino- dije frente a él

Tomo mis manos -No es necesario pero me gusta hacerlo- dijo él y besó mis nudillos

-Ya es hora de dormir, así que me voy- exclame dándome la vuelta

-No, no te irás sin despedirte bien- me jalo de la muñeca haciéndome quedar cerca de él y me besó
Fue dulce y lento

Nos separamos y vimos una figura al final del pasillo

-Theo, que haces afuera?- pregunté al rubio que se encontraba apoyado en una pared observándonos

-Lo mismo le pregunto a ustedes- respondió el con tono arrogante

-Pues yo vine a traer a t/n, así que ya me voy- le lanzo una mirada de desprecio y se marcho pero no sin antes plantarme un intenso beso rápido en los labios

Entre a la sala común la cual estaba vacía y me dirigí a mi habitación

~.~

Pasaban los días y Umbridge ahora como suma inquisidora era más insoportable que nunca
Esos días durante los desayunos me sentaba en la mesa de Gryffindor junto Hermione, Ron y Harry con el cual ya no teníamos mucho tiempo a solas por todos los nuevos decretos que iba imponiendo el sapo rosado

~.~

Iba saliendo de clases con Zabini y vi a lo lejos a Potter hablando con Cho Chang

-Nuevo chisme de profesoras, me gusta- dijo el moreno a mi lado sonriendo -Ah mira ahí está tu novio hablando con la chinita come murciélagos- exclamo el señalándolos

-El no es mi novio... aún y no le digas así a la chica, todavía no me ha hecho nada como para llamarla así- le respondí yo

Nos dirigimos a donde se encontraba doña sapito despidiendo y corriendo del colegio a la profesora de adivinación 
La mujer estaba destrozada y la profesora Mcgonagall fue a abrazarla
Hasta que llegó el profesor Dumbledore pidiendo que se escoltara a la señorita Trelawney a su habitación

-Tiene derecho de despedir a mis maestros, lo que no tiene es la autoridad para desterrarlos de aquí, ese poder sigue siendo del director- argumentó el con tranquilidad retirándose de ahí -Ahora vayan a sus salones- termino de decir

-Toma eso vieja zorra, ese es mi abuelo- exclame yo con orgullo

-Tiene estilo ese señor- dijo riéndose Blaise a mi lado

~.~

Me encontraba en la biblioteca haciendo un informe de 30 páginas para DCLAO sobre "Porque la magia es peligrosa para los jóvenes"

El lugar se encontraba solo y en silencio hasta que llegó alguien y se sentó a mi lado

-El ministerio está conspirando en nuestra contra, en contra de Hogwarts- anunció Harry a mi lado

-Potter me asustaste y primero se dice "Hola t/n, cómo estás? Que estás haciendo?"- respondí entre risas

-Hola t/n, estás muy hermosa hoy y veo que estás haciendo tarea- dijo el sonriendo -Continuando con lo que estaba diciendo, Hermione quiere que hagamos un ejercito y que yo sea el maestro, no estoy muy seguro de que mis conocimientos sirvan de algo pero me gustaría que tú te nos unieras- propuso el hablando rápido y nervioso

-Claro que quiero Harry- lo mire dedicándole una sonrisa

-Genial- exclamo el contento
Pasaron unos minutos y yo seguía concentrada en lo que hacía en silencio
Él jugaba con sus dedos en la mesa mientras miraba lo que yo hacía
-Oye podrías darme atención? Por favor- dijo el mirándome

Reí -Harry estoy haciendo este informe el cual tú también deberías hacer- me levante y me dirigí a una de las repisas a buscar un libro para seguir con mi resumen
El me siguió

Encontré el libro que buscaba y me estire para alcanzarlo pero estaba muy alto así que no pude

Él se estiró y tomó el libro -Quieres esto?- pregunto el señalando el libro

-Dámelo cuatro ojos, lo necesito- exclame con una sonrisa

-Pues alcánzalo- levantó su brazo haciéndome difícil tomarlo ya que él era más alto que yo
Salté pero no pude y decidí apretar el bulto en su entrepierna haciéndolo flexionar se del dolor
-Eso es trampa- exclamo el 
Tome el libro de sus manos y me di la vuelta para dirigirme pero el me jalo y me empujó acorralándome en una de las repisas
Me miro a los labios con sus pupilas dilatadas del deseo, mientras me sonreía se inclinó hacia mi y me besó
Le seguí el acto, nuestras lenguas bailaban al mismo ritmo
Nos detuvimos a tomar aire, me quede mirándolo fijamente a sus ojos y tome unas de de sus manos y la dirigí a la parte inferior de mi pierna la cual estaba descubierta al llevar solo falda

Mantuvimos el contacto visual mientras él obedecía a mi petición
Empezó a acariciar con la yema de sus dedos, haciendo que mi piel se erizara
Siguió besándome mientras mantenía su mano debajo de mi falda hasta que subió peligrosamente y paró un momento a mirarme para ver si yo estaba de acuerdo, no lo pregunto, su mirada decía todo por el
Y yo solo asentí
Con su dedo índice hizo a un lado mis bragas empezando a acariciar lentamente mi clitoris, yo solo gemía en silencio en sus labios
El me besaba, me mordía, hasta que llevo su dedo a mi entrada y lo introdujo lentamente haciéndome gemir más fuerte, puso su mano en mi boca haciendo mis sonidos sordos

-Estamos en un lugar público, lo mejor será que no hagas ruido- amenazo con voz ronca, eso hizo que mi humedad aumentara ante su dominio

Sin parar de empujar lentamente incorporó un segundo dedo haciendo que curveara mi espalda sobre el polvoriento estante de libros
Aumento su velocidad, su mano en mi boca sin permitirme soltar un solo sonido
Se acercaba mi éxtasis y él lo notó
-Vamos, desahógate- ordenó acelerando aún más su ritmo
Solté un gemido liberador y me corrí sobre sus dedos

Los saco de mi calor y los metió en su boca chupándolos, yo quede atónita ante eso
El solo me sonrió pícaramente

-Sabes muy bien, cariño- me guiño un ojo y me besó tiernamente y yo le correspondí el acto -Toma, esto es tuyo- se agacho y recogió el libro por el que habíamos estado peliando hace rato, me lo dio
-Voy a buscar una pluma y hojas de pergamino para hacer el informe contigo, ya vuelvo- me dio un beso suave en la mejilla y se retiró
Yo estaba en shock, ¿Que acaba de pasar? Se sintió tan bien, limpie el sudor de mi frente, acomode mi falda y mis bragas y fui a sentarme nuevamente a la mesa con un montón pensamientos incorrectos invadiendo mi mente

Mariposas negras +18 (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora