One Shots Camren G!P

Un amor a lo venezolano (2da parte Lauren G!P)

Lauren estaba sentada como de costumbre esperando a la morena salir de la revista. Solo que el día de hoy la asombraría.

Flashback.

-Marico acompáñame- le rogaba la ojiverde al su amigo mientras estaban en el departamento compartido.

-Coño ya basta- comento el chico mientras se levantaba de su cama para ir al armario –Esta bien, imbécil- comento para ver por el rabillo del ojo a Lauren alzar sus manos en forma de victoria.

Ahora de camino a uno de los centros comerciales en donde Zayn compraba su ropa, estaba Lauren detrás de él.

Quería tener una vestimenta adecuada para así de esta forma poder pedirle formalmente una cita a la morena.

-¿Porque no la vez como un culo y ya?- comentaba el chico mientras le pasaba algunas camisas de vestir a la ojiverde.

-Porque no la quiero de culito, la quiero así como para echarle los perros, siempre, así marico a lo bonito- contesto mientras su mirada se perdía.

-A ti lo que te hicieron fue un amarre, sino fue que te lo hiciste tu misma- dijo riendo mientras llegaban a la sección de pantalones de vestir.

-De eso no bro, me aprietan... el ya tu sabe- dijo bajito esto último.

-El guevo- grito Zayn ganándose la mirada de algunas personas alrededor – Las cosas como son Lauren, el guevo- dijo para pasarle un pantalón –Igual no los llevamos- dijo caminando hacia el área de los jeans.

-¿Crees que a ella le guste esto?- señalo toda la ropa que llevaba cuando le acomodo ahora un jeans negro con aberturas en las rodillas.

-Esto es pura perdida de plata, es embuste que esta mujer te va a dejar con esta ropa toda la noche- solo basto escuchar eso para que Lauren sonriera.

-Es lo que quiero mi pana, es lo que quiero- y así fueron de sección en sección, buscando todo tipo de prenda.

Pero algo si es cierto, por más que el mono se vista de seda, mono se queda, ya verán el porqué.

Fin del Flashback.

Ahora sentada con unos jeans negros rasgados por las rodillas, una camisa de vestir negra con una línea blanca en el sector de los botones, un bléiser negro, unas botas del mismo color, su cabello negro con ligeras ondas, además agrego un poco de delineador negro para resaltar sus ojos verdes, esperaba a Camila ansiosa.

Casi siempre era de usar camisetas y uno que otro jeans con sus zapatos deportivos, así que nunca se había preocupado por el hecho de tener ropa adecuada, ya que desde que llego no había sentido interés alguno por alguna chica.

Así que aquí estaba, frotándose sus manos con angustia evidente hasta que ocurrió lo que deseaba, su caminata fue detenida cuando abría ligeramente la gran puerta de vidrio para salir de la empresa y justo allí comenzó su momento de echarle los perros.

-Si la luna fuera queso, se quedaría pequeña con este que te tengo- dijo Lauren llegando al lado de la morena que no se había percatado de ella, por el atuendo.

-¿Lauren?- pregunto dudosa mirando de arriba hacia abajo.

-La misma que viste y calza- comento mientras trataba de tomar la mano de la morena que rápidamente se la quitó.

-¿Qué quieres?- comento tajante, causando que Lauren riera.

-A ti- dijo muy cerca del oído de la castaña, que tratando de evitar el contacto había tragado hondo al sentir, el perfume fuerte de la chica, era uno de los perfumes de caballero que más le gustaba.