No scars to your Beautiful ; Bang Chan.

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Llevaba cinco minutos tumbado en el suelo boca arriba, sumergido completamente en sus pensamientos con una sonrisa idiota en el rostro. Luego de que Suah lo abandonara en su habitación por ir tras su amigo; había quedado deseoso de un beso más. Cubrió su rostro con ambas manos, escondiendo una leve risa de emoción. Siendo sincero consigo mismo, jamás pensó que tendría la oportunidad de estar con la hermana menor de su amigo de ese modo. Ni siquiera tenía noción de cuando sus sentimientos habían cambiado tan drásticamente, desde verla como a una hermana pequeña hasta considerarla una mujer a quien podía amar de una forma romántica.  Ahora comprendía la razón de ese repentino coraje que llenaba sus venas al ver a la chica con su molesto amigo cara de ardilla; nunca lo hubiera averiguado si no se hubiera embriagado frente a ella.

Se dio unos golpecitos en las mejillas para devolver su mente a la realidad, se puso de pie y caminó fuera de la habitación sin poder borrar la sonrisa que se había grabado en sus labios. Cuando estuvo en el primer piso, se encontró con Hyunjin y Hyewon, está ultima dormía tranquilamente sobre el regazo del chico, quien no apartaba la vista de su rostro y le hacía pequeños masajes en su cabeza. Su miraba denotaba cariño y completo amor, el corazón del chico se hacía añicos pensando en todos los momentos maravillosos que habían creado, lamentando su actitud desconsiderada con ella; simplemente haciéndola a un lado por el único hecho de no tener el coraje suficiente para terminar su relación en la forma debida.

Incluso Chan, como espectador de tal escena, se sintió realmente mal por su amigo. Comprendía completamente su sufrimiento y sabía a ciencia cierta que él estaba pasándola realmente mal por ello. - ¿Por fin se quedó dormida? – Interrogó Chan interrumpiendo el silencio de la habitación, Hyunjin lo mira en el instante un poco espantado. -Sí, tuvo un largo día hoy. – Respondió con voz áspera, sus ojos estaban cristalinos y tenía la nariz rosada. - ¿Hablaste con ella? – Indaga el mayor, refiriéndose a la situación que Hyunjin le había ocultado a la mayoría de sus seres cercanos. El zagal niega con el rostro apagado y suspira después de unos segundos. -Tal vez lo haga más tarde, cuando se despierte. Ahora quiero que descanse. – Chan asiente con comprensión y toma asiento en el sofá de enfrente.

- ¿Qué tal estuvieron las clases? Tardaste bastante allá arriba. – Husmeó Hyunjin cambiando drásticamente de tema. Esta insignificante pregunta logra poner nervioso al castaño, sin embargo, lo controla, o eso creyó. – Suah es bastante buena con la lengua... - Se interrumpe a sí mismo al encontrar un doble sentido en sus propias palabras y siente como el calor empieza a colorear sus orejas. -En inglés. – Corrige rápidamente para complementar su oración, temiendo haber sido tan obvio; pero su amigo estaba tan distraído por la situación con Hyewon, que ni siquiera notó que el chico se había puesto tan rojo como la luz de un semáforo. -Ehmm, solo necesitaba algunos ajustes de pronunciación. Él que tenía bastante problemas era Jeonginie.