No scars to your Beautiful ; Bang Chan.

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-Eso no pasará.- Me pongo a la defensiva, me rehusaba totalmente a ese destino. Además, Chris no podía ser cómo estás chicas lo describían.

-Suah, ¿No te molesta que a ti te trate como a un cachorro y que otras chicas estén disfrutando de su gran...- Heejin le propinó un golpe en el hombro a Chaewon evitando así que terminara la oración que estaba por decir. -Gran... corazón.

Ambas chicas estallaron en carcajadas, por mi parte, yo comenzaba a molestarme; estaba segura que estaban burlándose de mi amor unilateral y estaba harta de tratar de entender lo que decían.

-Es verdad, dicen que su.... corazón, es grande. Ahora imagina el tamaño del afecto que puede propinarte con él. Sinceramente, es algo que tengo que averiguar.- Sigue parloteando Heejin y Chaewon sigue riendo junto a ella. «¿Por que les causaba tanta gracia el tamaño de un corazón?» Tal vez el helado que les vendieron estaba algo rancio.

-Bueno, hay que parar.- Pide mi amiga pecosa al ver mi cara de desconfort, me sentía fuera de lugar y lo único que quería era volver a casa.

-Pido disculpas.- Habla Heejin limpiándose las lágrimas de sus ojos. -¿No quieres ir a saludar?- Negué apenas opinó.

-No quiero que me vean, no pedí permiso para venir aquí.- Confieso.

-No te preocupes, yo llame a Tía Lin y le avise que dormirías en mi casa hoy.- Explicó mi amiga con naturalidad, la mire como si un tercer ojo había aparecido en el centro de su frente.

-¿Tendrán una pijamada? ¿Puedo ir?

-Solo si vas en tu modo hetero.- Bromeó Chaewon llevándose un golpe por parte de la otra chica, ellas parecían divertirse bastante; pero, ¿Por qué yo me sentía tan incomoda? Debía relajarme de una vez.

-Agi.- Su dulce tono de voz estuvo lejos de ayudar a tranquilizarme, mi boca se secó y sentí el color de mi piel abandonarme, comencé a girar mi cabeza lentamente en busca del chico. Mientras que mis acompañantes habían puesto cara de haber visto un espectro, cubrieron su boca con una de sus manos y sus ojos se abrieron a tope.  -Creí que no te gustaban los juegos.

-Amm... me gano la curiosidad.- Solté sin pensar, por alguna razón, la mirada que sus ojos me brindaban parecía atravesarme, haciéndome ver totalmente transparente frente a él; no podía mentirle fácilmente a Chan, así que tenía que ser cuidadosa. Una oleada de calor me invadió, mi mente reprodujo las palabras emitidas por las chicas sin mi consentimiento y de pronto me sentí avergonzada.

-¿Suah? ¿Qué haces aquí?- El tono de voz en Hyunjin me hizo sentir en peligro, fácilmente podría tomarlo como una advertencia sobre un posible regaño. Se sacó las manos de Eunji de encima y se acercó a mí, su estatura era intimidante, aún más que la de Chris.

-Hola, pequeña.- Eunji mantenía una sonrisa congelada, y la sinceridad con la que "saludó" me pareció cuestionable. Se acercó a mi con los brazos abiertos y me estrujo entre ellos, provocándome dolor. -Lo siento, me emocioné.- Sonríe con cierta inocencia y me acaricia el cabello.

-¿Le pediste permiso a mamá?- Cuestiona Hyunjin juntando las cejas, realmente era molesta la forma en la que mi familia me sobreprotegía; pero no podía hacer nada contra de ello, solamente tenía la opción de callar y obedecer, ya que era menor.