𝐂𝐔𝐑𝐈𝐎𝐒𝐈𝐓𝐘 𝐊𝐈𝐋𝐋𝐄𝐃 𝐓𝐇𝐄 𝐓𝐈𝐆𝐄𝐑?

026(Golpes, golpes y más golpes)

Mina se sentó luego de un largo día de trabajo en una esquina del sofá, estaba incómoda y le dolía la espalda pero no quería despertar a su novia, porque sabía que si lo hacía tendría a una rubia molesta todo el día.

Y no estaría dispuesta a calarse otro grito o golpe de la coreana, hoy no era un día en el que ella soportaría algún tipo de daño tanto físico como emocional, de parte de nadie, su paciencia estaba en uno por ciento y la pelinegra que llegaba de la cocina lo notó.

— Buenos días —La voz que uso parecía de ultra timba, Jihyo abrió los ojos y con una sonrisa nerviosa se fue a su habitación, le tenía miedo a una humana que no tenía ni fuerza para empujarla.

La rubia infló sus mejillas y se levantó impulsando con la poca fuerza que le quedaba en los brazos, su rostro palideceo cuando sintió un agarre en su brazo derecho, volteó la cabeza como la niña del exorcista y se encontró con la sonrisa de su querida, amada y ahora malhumorada novia.

— ¿Te desperté?.

— No, fue el alien que ahora se acaba de ir a nuestra habitación a dormir en el clóset —Ironizó, Mina miró la habitación y recordó que Jihyo había entrado pero estaba segura que no era la mayor porque Chaeyoung no se expresaría así de su hermana, sacudió la cabeza, eso sí, cuando estaba molesta no pensaba con claridad, así que podía ser que Jihyo era aquel alien no ella— Deja de pensar porque sabes que eres tu —Tragó grueso y caminó dos pasos para darse la vuelta y encarar a la menor.

Chaeyoung ni se inmutó con su mirada asesina, optó por levantar el mentón, nada, fruncir los labios, nada, entre cerrar los ojos eso si que tendría un impacto en la menor, nada— ¿Ya no me amas? —Salió corriendo a  la habitación.

La híbrida iba a abrir la boca pero no supo que decir, solo se río y rodó los ojos, Mina era demasiado dramática estaba segura que si la contrataban para hacer un drama se volvería una estrella, de esas que usan lentes de sol hasta en el baño y son perfectas.

Mina siempre ha sido perfecta para ella, así que cree que aunque tenga todo el dinero del mundo o nada seguirá siendo perfecta, aunque no se bañe, no se maquille y hasta si engorda.

Eso sí, la gordura no sería por comer demasiado, su chica se ejercitaba y si no lo hacía le pondría una botella de ketchup a una cala de pescar y se montaría arriba de ella para hacerla correr, esa imagen se le vino a la mente y más río, la imaginación de Chaeyoung era demasiado pintoresca.

Si no que sería por tener a dos cachorritos o más en su vientre, así creía que se les decía a los bebés, técnicamente si, en su especie.

— Mina, bebé, abre la puerta el alien te va a matar —Un golpe seco la preocupó— Mina sabes que no me gusta que le pegues a la puerta de esa forma —Regañó severamente y solo se ganó otro golpe—¡Myoui Mina! —Gritó y la contraria lanzó algo más pesado.

— ¡Mierda! —Sus ojos se abrieron y comenzó a forcejear con la puerta— ¡Mi computadora! —Sollozo, Chaeyoung dejó caer la frente en la puerta— ¡Abre la puta puerta!...¡oh!. Verdad que tengo que abrirla.

Unos pasos, el sonido del seguro y por fin la figura que ella quería ver estaba frente a ella— Nunca digas que no te amo, no lo dudes, ni pienses lo contrario —La abrazó y besó ambas mejillas— Nunca de los nunca.

— ¡Dejen de gritar estoy viendo una película! —Mina sonrió y Chaeyoung rodó los ojos.

— ¡Esta bien, sigue viendo la película!.

— Deja de gritar tan fuerte me da dolor de cabeza —Golpeó a la menor en la frente— Quiero silencio.

— Como ordené —Un saludo militar que Mina no se tomó como ella pensaba que se tomaría.

— Vuelves a hacer eso y te arranco los dedos —Chaeyoyng asintió con miedo y se apartó para caer en la cama— ¡La cama la acabo de acomodar!.

— ¿En los hombros o más arriba? —Jihyo había decidido de una vez por todas cortas el cabello, Momo, Sana y Nayeon la veían de lejos, con unos puchero y caras entristecidas, ya no tendrían a nadie a quien podían hacerle peinados.

Nayeon se había cortado el acento hace poco, Jeongyeon no se dejaba tocar, Momo ella prefería llevarlo corto, Sana le gustaba tanto su cabello que solo ella lo tocaba, Mina aunque lo tenía largo cada que se le acercaban a hacerle algo se ganaban una mirada asesina, Dahyun ocultaba su cabello con un gorro cuando las tres híbridas estaban unidas, Chaeyoung con ella tenían un solo impedimento, Mina, demasiado celosa para tener que aguantarse una vez más el "¡A mi Chaeyoung solo la toco yo ¿entendido?!".

Tzuyu, a ella le tenían miedo, sentían que les iba a lanzar un hechizo que las dejaría todas chuecas.

Por esa razón era que ahora se limpiaban las lágrimas, falsas, de sus mejillas al ver que el ceballo de Jihyo ya no estaba en su cintura, ahora estaba en su cuello, demasiado cortó para sus ojos.

— La hemos perdido —Nayeon negaba con la cabeza mientras sus labios eran prisioneros de aquello dientes que le daban tanta ternura a su prometida.

— Demasiado adorable para mi —Colocó una mano en su pecho y se desmayó, de mentira, solo que ellas híbridas lo creyeron.

— Amor —La híbrida de coneja veía a Jeongyeon con los ojos muy abiertos— ¡Despierta!.

— ¿La mato? —Momo le preguntaba a su novia que se encogió de hombros y miró en dirección a la taiwanesa que intentaba calmar los sollozos de Sana.

— Jeongyeon, hasta Nayeon esta llorando abre los putos ojos —Se metieron con su novia, la hicieron llorar y sollozar, eso no lo soportaría Tzuyu, todo menos que lastiman a su pequeña ardillita.

La coreana abrió los ojos y lo primero que se ganó, que obviamente merecía, era un golpe de todas las que estaba ahí.

Hasta de Mina y Chaeyoung que se habían dedicado a verse a los ojos, manía que tenían, demasiado enamoradas para el grupo.