Antes de la bienvenidaPasada una semana de aquella cita tan gloriosa, eh vuelto al lugar que se ha convertido en mi favorito para pasar el tiempo "El callejón" mejor conocido como "The Golden tree"
La última vez que vine no termine de leer el libro que me gustó, así que eh vuelto para terminarlo.
Para mí sorpresa hay alguien ahí dentro que no espera ver, paso el umbral adentrándome en el sitio, me siento en mi mesa favorita a lado de una planta muy linda y un librero antiguo.
—De nuevo por aquí, ¿Le traigo su muffin de chocolate y maltratada de vainilla cómo de costumbre?—pregunta el chico que atiende.
Sonrió al notar como ya sabe lo que como siempre que vengo a este lugar.
—se lo agradecería.
—me llamo kills.
—Gisell mucho gusto—estiro la mano, mirando de reojo al chico de atrás, que está recargado en la barra.
—bien traeré tu pedido—se retira.
Me levanto al librero en busca del libro de la última vez, y no lo hallo dónde lo deje la última vez, está en el estante de abajo.
Lo tomo y la hoja seca que deje está un poco maltratada, me siento otra vez y kills trae mi comida como siempre. Continuo leyendo la historia tan entretenida y de momento a otro alguien toma asiento frente a mi.
—la verdad el trama está muy bueno, pero al final le faltó algo...—habla el chico.
—¿A si?
—me gusto, pero no lo volvería a leer.
—¿Entonces fuiste tú el que lo tomo?—le pregunto.
—Me pareció interesante.
&Lo tomaré como un si.
—Y no te desmiento, si lo tome yo.
—¿Que haces aquí?
—vine a tomar un café, y a leer ¿Y tú?
—lo mismo, solo que con muffins y maltratadas.
—Woow ,estamos conectados ¿Será el destino? —se ríe.
—No lo creo—me recargo en la mesa con mis codos.
Lo analizo de pies a cabeza, las ondas en sus mejillas se hacen notar cuando sonríe, y me hace pensar que lo conozco de hace más tiempo.
—Gisell...¿Segura que no me estás siguiendo?
—¿Por qué lo haría .... Jesper?
—No se, tal vez te obsesionaste conmigo, y ahora me vas a secuestrar y mantener retenido en tu sótano amarrado mientras abusas de mi—se cruza de brazos riendo.
—No tienes tanta suerte-me burló.
—Perdón princesa... por no cumplir tus expectativas de rehén.
—¿De dónde saliste?-pregunto.
—¿Que?-responde.
—¿Que?
—¿A qué te refieres?
—no hace tanto que vivo aquí, pero en todo el tiempo que llevo, nunca te había visto, y bueno no es como que pases desapercibido.
—Eey el cabello blanco está de moda—toma mi malteada y empieza a tomarle.
—¿Lo teñiste o ...?
ESTÁS LEYENDO
susurrándole al oído [+18] Editando
Teen FictionCada acción trae una consecuencia y está vez no será la excepción. Gisell Ritchter no cometió ningún crimen, pero en cambio la hicieron pagar por un pasado que no era de ella y que la marcará para siempre. Está no será una lucha por poder, por qué e...