Embarazada, bueno, pero ¿de él?
Ahora no se como mirar a mis padres.
¿Como les diré que serán abuelos? Pero ¿Que compartirán ese título con sus mejores amigos?
Si suena algo fuera de serie pero si. Nunca imaginé que quedaría embarazada de Mateo J...
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La amistad es tan linda y especial que muchas veces duele más dejar a un amigo que a tu propio novio. No lo digo porque pasé algo así, si no que en estos momentos estoy presenciando una ruptura y tengo a Emile a moco tendido en mi cama con el maquillaje corrido y hecha un desastre.
- ¿Me puedes volver a decir que pasó? - desde que llegó no a dejado de balbucear cosas sin sentido.
-Cel...Cele...vi...vi a Derek...con...con otra...besa...besándose - al terminar de hablar no se calmó, más bien se puso a llorar más.
-¿Que? ¿DONDE VISTE A ESE MALDITO QUE VOY Y LO BUSCO? - Yo lo mato ya, nunca había visto a mi amiga llorar de esta manera.
-¿A quien vas a matar? - la voz de uno de los gemelos interrumpió mis pensamientos.
-A Derek – digamos que a Logan nunca le agradó Derek, hasta ahora que por mi embarazo, nos ha estado uniendo, pero él desde hace mucho no le ha agradado ya que todas las chicas que a Logan les "gusta", mágicamente aparecía Derek y se las llevaba.
- ¿Porque lo quieres hacer? - me moví y pudo ver a Emi llorando - ¿Que izo ese hijo de su madre? -sabia que a él no le gusta decir muchas maldiciones y cosas así.
-Engaño a Emile. - no se si es destino o que pero el timbre de la mansión Johnson sonó interrumpiendo.
-¿Esperaban a alguien más? - le pregunté a Logan y él solo negó -¿Emi llamaste a alguien más? - solo negó. Pues claro todos están aquí disfrutando de la piscina mientras estoy tratando de consolas a una Emi llorona.
- Voy a ver quien es - dijo Logan un poco enojado.
-Vamos Emi deja de llorar porque si tu lloras yo lloro y eso es algo malo para tus sobrinos - al parecer no le agradó y me tomo de la mano y me saco de la habitación.
Pero al estar por la mitad de la gradas, escuchamos unos gritos de hombre y golpes, nos miramos confundidas y empezamos a bajar rápido o lo que yo podía.
Al estar cerca de la puerta vimos nada más a Matt tratando de separar a Logan de un pobre chico ya casi inconsciente.
-¿Qué está pasando? - pregunto pero cuando veo como Tom intenta poner de pie a nada más y nada menos que a un Derek medio inconsciente, me entró una rabia que Emi me paro porque estaba a punto de patear - Emi suéltame que a este lo mato - Matt le pasó a Luis a su hermano rojo de la rabia y el padre de mis hijos me tomo de la cintura impidiéndome cometer un delito.
- ¿Porque lo golpeaste Logan? Se que no lo soporta pero no es para que lo mates así de la nada - dijo Tom mientras pasaba su brazo por sus hombros.
- Ese desgraciado tiene que estar en el hospital, mal nacido - todos nos sorprendidos al oírlo, como dije a él no le gusta decir ese tipo de cosas.
- ¿Que te pasa Logan? Tu no eres así - esta ves dijo Matt.
-¿Sabes porque lo digo? - Se zafó del agarre de su hermano y se puso frente a Derek - Porque este idiota engaño a Emile - los chicos lo miraron sorprendidos incluso el mismo Derek - si amigo te encontraron con las manos en la masa desgraciado - lo golpeó una ves más. Pero esta ves Tom lo soltó para que cayera al suelo.
-¿Qué? Estas mintiendo - este trata de desmentir - yo amo a Emile como para engañarla.
Emi empieza a reír logrando que todos la miren.
-Por favor Derek te vi en el estacionamiento tragándote a Tatiana - este miro con miedo a todos nosotros - si mientras yo estaba como estúpida esperándote para nuestra cita tu me estabas engañando con esa estúpida.
- No es cierto amor ella me beso yo no - si este tipo tiene miedo.
- No mientas, estabas atrasado como una hora - la mire sorprendida, una hora eso no se perdona - cuando salí del restaurante sintiéndome humillada porque todos me miraban con pena, tu estabas tragándote en el estacionamiento a esa zorra -ahora si Logan lo va a terminar de matarlo.
-Hijo de pu...de su grandísima madre. Como se te ocurre desgraciado - Luis lo separó.
-Vete si no quieres morir aquí - dijo Matt mientras llamaba a los guardias de la casa se lo llevaban a su auto.
Todos entramos a la casa y Emi se acercó a Logan y lo llevo al baño a curarle las pocas heridas que tenía.
-¿Estas bien? - me pregunto Matt mientras nos sentábamos en unas sillas que están bajo una sombrilla.
- ¿Si porque? - lo mire confundida.
- Es que te alteraste y al doctora dijo que no puedes tener conflictos así – me encanta cuando se preocupa aunque son en pocas ocasiones.
- Si ya me relaje, tranquilo - solo asintió, se puso de pie y se tiró a la piscina logrando mojarme con unas cuantas gotas.
Una media hora después, llegan las mellizas muy sonrientes y debo decir que eso me asusta. Minutos más tarde llega Sam como siempre, sería pero al mismo tiempo un poco relajada con el ambiente.
Todos están jugando en la piscina, yo no he entrado porque están jugando muy brusco y Matt está peor que una gallina con pollitos, no deja ni que Tom me toque y eso lo aprovechan los chicos y se burlan de él.
- Ya, ¿pueden dejar de molestarme? – es su pregunta o advertencia número 26 del día, los chicos son muy molestos en algunos casos.
-Querido amigo - se acercó Logan y le puso su mano en su hombro - no dejaremos de molestarte así que vayas acostumbrándote.
Llegó la noche y los chicos empezaron a encender la parrilla para cocinar la carne que la está cortando Tom con Emi y por mi parte, estoy en el baño vomitando, traté de ayudar con la comida pero cuando vi la carne me entraron las náuseas y el asco.
-¿Ya te sientes mejor? - me pregunto Dani mientras me ayuda a ponerme de pie.
- Un poco, sólo quiero salir a tomar aire.
Salimos del baño que por dicha esta en la planta de abajo y no tuve que subir al segundo piso.
- ¿Ya te sientes bien? - me pregunto Mateo mientras me acercaba a los sofás exteriores .
- Si tranquilo - asintió y me dejó sola mientras entraba en búsqueda de líquido para mí.
-Me alegra ver como están compartiendo – mi hermano esta sentado a mi lado viendo es mismo panorama que yo.
-También me alegra.
Siento como toma mi mano y entrelaza sus dedos con los míos así que me giro para mirarlo y regalarle una sonrisa.
-Te amo – él me sonríe.
-Te amo tanto como la cantidad de las estrellas – le sonrió aún más y mido hacia donde están mis amigas compartiendo con los amigos de Mateo.
Desde que tengo memoria, nos hemos dicho eso. Caled al ser seis años mayor que yo, siempre me protegía, me cuidaba y le daba palizas a quien tratara se sobrepasarse con migo. Pero él siempre estaba para mi y yo le decía que lo amaba y él me respondía que me amaba tanto como la cantidad de estrellas.
