Broken Pieces ❥ muke

37 ❥ fault

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FAULT
[culpa]

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Se removió en la cama, extendiendo su brazo hasta que se topó con algo sólido, para luego aferrarse a eso y hundir su rostro en una suave superficie, intentando retomar su estado de sueño. Aunque, estaba seguro de que eso le costaría, porque una vez despertaba, era casi imposible volverse a dormir.

De todas formas, refregó el rostro en la suave superficie y sus brazos se aferraron a la solida figura en la cama. Luego, sintió una suaves caricias en sus cabellos, que casi lo hicieron volver a caer en ese estado entre despierto y dormido, de no ser porque se sentía fuertemente observado, haciendo que no fuera capaz de seguir manteniendo los ojos cerrados por más tiempo.

Parpadeó levemente, alejando el rostro de donde se encontraba hundido para luego ver a su alrededor, intentando ajustar su visión. Lo primero que se dio cuenta era que esta no era la habitación de huéspedes en la que estuvo durmiendo estos últimos días, o la de su apartamento, sino una con una gran cantidad de afiches y posters pegados en las paredes, dispersos sin alguna clase de orden, además de algunos discos pegados en ella, con paneles de corcho, en donde fotos sostenidas con pines se encontraban en ellas.

Frunció levemente el ceño, para luego notar el escritorio con dos pantallas de computadores, el tocadiscos y un librero con una gran cantidad de libros completamente desordenados, no como los de su casa, ordenados perfectamente en orden de tamaño.

No fue hasta ese momento que recordó que esta no era su habitación, sino la de Michael, y para eso, su cabeza ya estaba mirando hacia un lado, encontrándose con unos ojos verdes que estuvieron siguiendo cada uno de sus movimientos, con una divertida sonrisa bajo ellos.

Michael tenía las manos en sus cabellos, apartándolo cuidadosamente de su frente y rostro, aclarando su campo de visión para que pudiera darse cuenta de las ojeras bajo los ojos verdes y los resecos labios bajo ellos. De todas formas, estaba seguro de que era la mejor imagen que podría encontrar al despertar.

Podría a acostumbrarse a esto, a despertar con Michael a su lado. Quizá, ya estaba acostumbrado desde que él reclamó un lado de la cama de la habitación de huéspedes en la que estuvo durmiendo, pero esta vez era diferente. Antes, no podía apreciar la belleza de Michael sin sentirse culpable, tocar su rostro o permitirse disfrutar el simple sentimiento del calor corporal de que los cuerpos de ambos ejercían.

Está vez, tenía todo esto permitido. Porque, estaba despertando al lado del chico que le gustaba y de quien también gustaba.

Ya no más Michael contra Luke, solo Michael y Luke.

Le gustaba tanto como eso se sonaba.

—Te ves tan lindo cuando duermes —fueron las primeras palabras de Michael, que hicieron que una sonrisa inconsciente se formara en sus labios —. Haces esta pequeña cosa con la nariz que- Dios, eres hermoso —dijo él, haciendo que sintiera sus mejillas calentarse.

—Tú también —sus palabras hicieron que la leve sonrisa en el rostro de Michael se transformara en una mueca, haciéndole saber que él no creía por completo en sus palabras, y dolía tanto darse cuento de eso —. Créeme, por favor —pidió, acariciando su nariz contra la de él.

—¿Un problema a la vez? —dijo él en voz baja, a lo que solo asintió, dejando un corto beso en la pequeña nariz del chico.

—Igual seguiré diciéndote lo hermoso que eres hasta que me creas —dijo, a lo que Michael le dio una leve sonrisa, casi forzada, pero sabía que lo estaba intentando —. ¿Por qué parece que no hubieras dormido? —preguntó, trazando delicadamente las oscuras marcas bajo los ojos del chico con el dedo índice.